Kiss Me

27.

Capítulo 27

De la nada se creo el caos y del caos viene el todo.

Dia 5

Elissa se encontraba en la nada, James a su lado la abrazaba y veía como su madre veía a un cajón con tristeza en su corazón.

-Ahora entiendo porque nos dio esos regalos – dijo Elissa con pesar -. Sabes, si me hubiera enterado de que estaba tan enfermo no me alejaría de el ni un solo momento... El tiempo era lo más valioso que teníamos.

-Te entiendo Elissa, pero sabes bien que papá no permitiría que pausáramos nuestras vidas para cuidarlo, el nos ama tanto que no quería preocuparnos solo quería vernos felices.

Elissa asintió -. Por eso debemos serlo, James... - Elissa miro al piso y lo abrazo fuertemente -. Los dos debemos ser feliz y nuestra madre también.

- ¿Sabes cómo ser feliz? – preguntó su hermano.

-La felicidad es un tema muy delicado James -dijo Elissa para caminar en dirección a su madre.

Elissa abrazaba a su mamá y Lily la miraba en la distancia con ternura.

-Mamá, te quiero pedir un favor. Por favor si estas mal escríbeme, esto es difícil para mí pero también para ti, el se ha ido pero tu no tienes que irte aun.

Elissa tenia miedo de que ella también se fuera, aunque ella perdió a su padre, su madre perdió al amor de su vida y su gran compañía.

-Está bien Elissa, tú siempre has sido tan parecida a él.

La azabache sonrió. -Te amo mamá – dijo dejando un beso en su frente.

-Hola Elissa – saludo Lily.

-Hola Lily, te quería dar las gracias por estar conmigo ayer, sin duda fue de gran ayuda.

Elissa no lo quería admitir, pero en ese momento se sentía con una fuerte necesidad de un abrazo. Esa necesidad de afecto de que alguien te demuestre que si vales la pena que eres lo mejor del mundo aún si tú no te lo crees.

Y Lily se la dio tan espontáneamente que la sorprendió, solo basto un pequeño toque en su mejilla para sentirse acompañada, que alguien se preocupaba por ella y era un sentimiento genuino, verdadero, era único.

Dia 9

Elissa y James llevaban cada día mejor el dolor, no había un gran cambio y aun sentían su llanto en las noches, pero trataban de llevarlo mejor. Sin querer esa situación acerco a los dos hermanos, las peleas habían cesado y las viejas historias revivían en las noches de nostalgia.

-Ayer estaba con Lily y pasamos por una tienda, te compramos estos chocolates, ella dijo que te gustarían – dijo James con una sonrisa.

-Fueron muy amables – dijo con una rara mezcla de pesar y alegría.

James se miraba mucho los zapatos y jugaba con sus manos -. ¿Elissa sucede algo entre tu y Lily?

Elissa miro sus zapatos - ¿Por qué lo dices?

-Hace cosas por ti que por mí no haría. Elissa eres mi hermana y quiero que seas feliz.

- ¿Y si mi felicidad te hace infeliz?

-No importa, pero debes hablarme. Yo la quiero a ella, pero no sé si realmente fue lo correcto.

- ¿Quieres a otra persona?

-No lo es Elissa, he estado muy confundido.

-Un buen café es lo mejor para aclarar las cosas, entre más amargo más real.