10.- Persigue al buho... que facil decirlo.

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Agregare a mi "lista de cosas que no debo hacer":

Despertar a Nico.

Probe primero con sacudirle el hombro, ni se quejo.

Luego, con un par de bofetadas. Lo único que consegui fue dejarle marcas rojas en la mejilla.

Y ya a la desesperada le di cinco patadas en la costilla.

Creo que es obvio que no consegui despertarlo.

Sin cotar, claro, que su pie derecho apuntaba en una dirección poco común.

Ahora lo estaba arrastrando por el pie izquierdo en dirección al camión de basura volcado.

Se que no es el mejor refugio, pero con mis debiles brazos no llegaría muy lejos arrasatrando a ese chico (pese a que pesaba poco) además, no mucha gente buscaría chicos tras un camión de basura volcado.

¡Ah! Se me olvidaba.

La herida que se había hecho Nico sangraba. Por suerte, tenía un poco de papel confort en el bolsillo. Pude limpiarla un poco.

También descubri que yo misma tenía una herida en la extensión de mi brazo (ni la había sentido).

Deje a Nico apoyado en el camión y me sente a su lado.

Es muy estúpido quedarse sentada minutos después de que un cíclopé- con- rabietas te halla atacado ¿No? Pero respóndame a esta pregunta:

¿Qué harías tú si te hubiera atacado un cíclope (del cual a duras penas te salvaste), siendo uno ignorante dentro de lo ignorante? (A/N: Respondan xD)

Bueno, pues yo hice lo que estoy haciendo (tiene sentido).

Unos cinco minutos después, estaba cabeceando.

Trate de mantenerme despierta, pero cada tres segundo mis ojos se cerraban. Llegue a peñiscarme el brazo.

Pero, dormir unos minutos no le haría daño a nadie ¿Verdad?

Total...

Cerre los ojos tranquilamente, ya a punto de quedarme dormida.

Una fulgurante luz gris me impidio ese deseo.

Abri los ojos de golpe justo para ver a una bella mujer frente a mi.

"Es un sueño" fue lo primero que pense.

-No, Darielis, no es un sueño.

"Definitivamente, es un sueño"

-No, escucha hija.

"¿Hija?"

-¡Esto es urgente, Darielis!

-Pero...

-Sigue al buho, querida. Rápido. Te están persiguiendo.

-¿Que me están persiguendo? ¿Usaste plural? ¡¿Quienes?!

-Eso lo sabras pronto. Sigue al buho.

-Pero Nico...

Ya había desaparecido, dejando nada donde antes había estado.

Parpadie, confusa.

Ahora delante de mi tenía la silueta de un buho brillando.

Me puse de pie como acto reflejo y me acerque.

El buho se alejo un par de centímetros.

Con eso se refería a "seguirlo".

Tome el brazo de Nico y lo pase por sobre mi hombro, luego avance lo más rápido que pude hacie el buho.

Estuve así una buena hora.

Cada vez que avanzaba, el animal se alejaba. Me desesperaba.

Pero no podía detenerme, la mujer había dicho que nos perseguían.

Y no creo que sea con buenas intenciones.

La herida del brazo me ardía y Nico no hacía nada (ya con despertarse ayuda un poco) por lo que lo arrastraba todo el camino.

Nos habiamos internado en un bosque que se elevaba poco a poco, dando claro que era una colina.

Tropece con una rama y caí.

Ya era tercera vez que sucedía, por lo que solo me puse de pie.

Nico gimió.

Lo aparte rápidamente, con esperanzas de que despertara.

Sus ojos luchaban por abrirse y movía los labios, como si quisiera hablar.

Entonces los abrio definitivamente, como si hubiera recordado algo.

-¿Dónde estamos?-. susurro.- ¡El cíclope!

-Calma, calma. Tenemos que apurarnos.

Asintio, como si supiera exactamente de que trataba.- Pero, ¿Dónde estamos?

-No se, preguntaselo al buho.

-¿Qué buho?

Señale al frente, iba a decir algo. Pero las palabras se atascaron en mi garganta cuando frente a mi solo había... bosque.

-Ahi... buho... había.- tartamudee.

Nico miro alrededor, como si hubiera reconocido algo.- Vamos.

Iba a caminar, pero piso con el pie malo y cayó.

Conseguí tomarlo de la polera antes de que tocara piso.

-Mi pie...-murmuro.

Volví a pasar su brazo por sobre mis hombros, pero el lo aparto.

-No me toques.- espeto.

Reí sin ganas luego de recuperarme de la sorpresa.- Si, claro, esperemos a que te recuperes. Quizas si tenemos suerte lo que sea que nos persigue quiera tomarse un descanso.

-Si. Pero aún asi no me toques.

-¿Estás idiota? ¡No puedes caminar!

Parecía que no lo hubiera notado.- Oh, verdad.

(*Facepalm mental*)

-Tendre que tocarte si de algún modo debemos avanzar.

-Solo esta vez.- susurro para si mismo, como si se estuviera consolando.- Bien.

Pase nuevamente su brazo por sobre mis hombros y avance.

Ahora era mucho más facil. Nico caminaba un poco con su pie izquierdo y me daba indicaciones, cosa que era muy util (dado que no tenía que mirar al frente tan seguido).

-Estamos cerca.-murmuro para si.

Trate de ir más rápido, pero estaba cansada.

Escuche un crujir de ramas a distancia.

-¿Oiste eso?-.Pregunte alarmada. Nico asintio.

Si o si, debía ir más rápido.

Jadeante, prácticamente corrí (sin caerme) en las direcciones que me idicaba Nico.

-Un poco más. Un poco más.- se decía.-¡Allí! ¡Donde el gran pino!

Tan cerca. Tan cerca.

Me caí.

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Nunca crei que publicaria tan rápido.

El poder de las vacaciones xD


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⏰ Última actualización: Sep 20, 2015 ⏰

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Una vida anormal |Nico di Angelo| Pausada ;(Donde viven las historias. Descúbrelo ahora