Angel y demonio

Capitulo 6

Me levanté de golpe, aquel sueño... Asmodeo estaba sentado en un trono en el infierno y yo estaba sentada sobre su regazo mientras le besaba, un beso mucho más... Intenso, me desperté al instante sintiéndome rara en mi bajo vientre.

Bueno yo debía seguir con mi vida pero... Vería a Asmodeo dentro de cuatro días ya que debía bajar al infierno ¿Cómo le miraría a la cara? ¿Aceptaría besarme otra vez? La verdad me gustaría. Me disponía a cambiarme pero cuando me deshice de mi ropa noté algo raro.

-¿Qué...?

***

No podía hablar con Gabriel sobre eso así que me dirigí hacia donde sabía que estaría mi mejor amiga, Gadiel era probablemente la que sabía más cosas de mí  y yo de ella. Cuando llamé a su puerta me la abrió aun vestida con su pijama de lino blanco el cual era muy parecido al mío.

-¿Estás bien?- Me preguntó aquella Angel mientras se sentaba en su cama y me observaba.

-Es que...- Dije nerviosa- Ha pasado algo... Raro.

-¿Raro? ¿En qué sentido?

-Mira.

Saqué mi ropa interior de mi bolsillo y le mostré el líquido viscoso que había en ellas ¿Estaría enferma? Quiero decir los ángeles femeninos éramos como cualquier humano, teníamos la menstruación y todo eso pero nunca había salido de ese modo.

-Creo que...

-¿Con qué has soñado, cochina?- Se rio.

-¡Gadiel! Estoy preocupada. Mi periodo...

-No es tu periodo Haniel- Rodó los ojos- Dios mío, dile a Gabriel que te deje ir a las clases de educación sexual ¿Quieres?

-Los arcángeles piensan que no es totalmente necesario para el trabajo que desempeñó.

-Quieres ser madre así que deberías saberlo- Se tumbó sobre la cama y me miro con diversión- Sabes cómo se hacen los bebés ¿Verdad?

-¡Claro que lo sé! De hecho he visto el proceso con As varias veces ya en los juicios ¿Vale?

-Has soñado con Asmodeo- Sonrió.

-Pero no tengo nada raro ¿Verdad?

-No, de hecho es bastante normal. Por cierto hoy Gabriel va a estar insoportable Lucifer llegó ayer para decir que había ganado la apuesta del mes.

-¿Y tú sabes qué es lo que se suelen pedir?

-Me lo imagino- Se encogió de hombros- Pero ojalá corroborarlo porque Gabriel siempre baja al infierno malhumorado cuando pierde.

-Oh.

-Eso sí- Gadiel suspiró- Es obvio que te sientes atraída por Asmodeo y aunque Gabriel piense que las relaciones con los demonios no son aceptables, lo cual me parece de ser un hipócrita.

-¿Por qué?

-¿Por qué crees que Lucifer y Gabriel están todo el día discutiendo? Tuvieron durante milenios una relación que todos sabemos que en fondo no ha acabado. Lo de la apuesta es una excusa barata para no dejar de interactuar el uno con el otro, se llevan a matar pero no saben vivir separados.