La construcción delante de sus ojos avanzaba rapido. Quizas terminarian algunos meses antes. Que haria luego de terminarla? Quizas regresar a Texas, le habían propuesto diseñar un puente alla. El pensamiento de abandonar New York de repente le daba ansiedad.
Eso significaria quizas no volver a ver a Lauren, aunque tampoco era que se vieran mucho. Desde el dia que le habia regresado su labial no había sabido más de ella. Tampoco de Dylan. Si bien le agradeció por lo que fue una noche genial, sentía que no estaba lista para una relación. O quizas no estaba lista para dejar ir la idea de Lauren aun.
Lauren estaba en la oficina de Chris. Lo sabía porque su secretaria lo había comentado delante de ella hace unos minutos. Debería entrar y saludarla? No, eso no. Eso sería demasiado forzado. Pero podia pasar casualmente fuera de la oficina en caso de que saliera de esta. Cosa que hizo.
Pasó por el amplio corredor varias veces hasta que finalmente Lauren salió con una sonrisa en la cara y sin rastro de Chris tras de ella.
-Camila, cómo estás?- la menor se acercó a ella y dejó un suave beso en su mejilla izquierda
-Todo bien, supervisando ya sabes. Y tu?-
-Pues Chris me comentó ayer que quería que viniera a que habláramos de una posible reunión de ex-alumnos aprovechando que varios estamos en New York- la chica asintió
-Eso estaría bien. Tienes trabajo ahora?- Lauren negó
-Quieres acompañarme a almorzar?- Camila asintió un poco mas rápido de lo que hubiera deseado
Cuando ingresaron en el coche de la ojiverde esta le preguntó que deseaba comer.
-La verdad me da igual-
-Te molesta la comida chatarra? He estado con antojo por un tiempo ya- Camila asintió y la chica puso el auto en marcha
-No comes comida chatarra seguido?-
-Por supuesto que no, tengo cierta edad y tengo que cuidar la figura- Camila se sonrojó viéndola de arriba a abajo
-Yo diría que tu figura está fenomenal- las mejillas de Lauren se tiñeron de rojo también mientras le agradecía
Habían mil lugares de comida rápida en New York, pero Lauren quería hot dogs. Y no cualquier hot dog, los que venden en Central Park. No sabía como se sentiría la menor de que la llevase a un lugar con tanta historia para ellas después de tanto tiempo pero supuso que lo averiguaría por el camino.
La menor en efecto, al ver el rumbo que tomaba el auto, supuso a donde era que se dirigían. Una ola de melancolía la atacó de repente. Tantas veces habían venido a ese parque. Ella amaba que Lauren se sentara en un banco a verla hacer fotos como una loca a todo el lugar.
Al llegar no había cambiado mucho. Era de los pocos lugares en New York que había permanecido congelado en el tiempo desde que se fue. El mismo señor estaba vendiendo los mismos hot dogs. La fila seguía igual de larga. Mientras Lauren estaba entretenida pensando de que pedir su hot dog, Camila no paraba de mirarla. Estaba fascinada con ella. Que tan loco sería volver a caer en Lauren?
Después de todo ya estaba divorciada. Quizás la chica del restaurante era algo casual. Quizás aun existía una oportunidad para ellas. O quizás todo eso era solo Camila soñando despierta.
Cuando llego su turno Lauren hizo el pedido. Antes de irse el señor las miró con una sonrisa.
- Era muy hermoso verlas pasar la tarde acá hace unos años. Me alegra que estén de vuelta- ambas asintieron con una sonrisa pero por dentro sintieron un cubo de agua fría caerles encima
El señor las recordaba pero ellas no estaban de vuelta.
El almuerzo transcurría en silencio. Lauren miraba el lago y Camila miraba su comida.
-Esto es incómodo?- preguntó la ojiverde
-No, para nada- Lauren arqueó una ceja- Bueno quizás un poco si. No supe de ti desde aquella noche- la trigueña suspiró
-He estado ocupada. Y supuse que con tu nueva relación lo estarías también- se encogió de hombros
-No estoy en una nueva relación- la ojiverde la miró- Solo salimos ese día que nos vimos en el restaurant-
-Solo una vez?- Camila asintió- Pensé que uno debía esperar más para acostarse con alguien- la morena la miró incrédula ante lo que acababa de decir
-Por que asumes que me acosté con el?-
-Por favor Camila! Me abriste la puerta en su ropa y con el cabello todo revuelto. Se sumar dos mas dos-
-Bueno si lo hice fue mi decisión. No debería importarte- dijo algo molesta
-No me importa. Eres libre de vivir tu vida-
-Igual tu! Con esa chica que te acompañaba en el restaurante aquella noche- Lauren comenzó a reír a carcajadas mientras Camila la miraba con cara de confusión
-Esa chica es mi secretaria, desde antes de conocerte lo es. Es lo mas cercano que tengo una amiga-
-Oh- dijo Camila cabizbaja y apenada
-De hecho..- Lauren lo pensó por un momento pero en un impulso de valentía lo dijo- Estábamos hablando de lo hermosa que te ves- Camila la miró de repente- Todos estos años que han pasado te han asentado de maravilla. Estas mas hermosa que nunca- la chica se sonrojó
-No me digas esas cosas Lauren. No esta bien-
-Por que no esta bien?- "es ahora o nunca" pensó la chica mientras tomaba las manos de la menor viéndola profundamente a los ojos
-No lo sé Lauren, ya no somos las mismas-
-Lo sé. Ya no soy una mujer casada y tu ya no eres una estudiante universitaria. Finalmente somos libres Camila. Por que no intentar?-