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Evie ya había llegado, y sentía mis manos sudar.

¿Como se supone debía decirle todo? "A pues me emborraché, al ver como Zellie me engañaba con otra y luego de eso Red me llevó a su casa y cogimos". Claramente no iba a decirle así, aunque si fue eso lo que sucedió, pero, no le diría así.

Abrí la puerta dejando ver a mi amiga y la peliazul rápidamente se abalanzó a mí con un gran abrazo.

— Me... Me enteré de todo... — dijo ella suavemente mientras me aferraba más a su cuerpo en un cálido abrazo.

— ¿De todo? — respondí con nerviosismo y me limité a decir rápidamente algunas babosadas. — yo no sabía lo que hacía... ¡Te lo juro! ¡Si hubiera sabido no me hubiera acostado con ella! ¡Sabes cuanto la odio! — dije rápidamente y mi amiga se apartó de mí, a la vez que sus ojos se agrandaban con demasiada sorpresa.

— ¿¡TUVISTE SEXO CON RED, CHLOE!? — gritó y ahí me di cuenta de que ella no sabía de nada de lo que le había soltado.

"Mierda"

Maldije para mis adentros y miré con arrepentimiento a la contraria mientras asentía levemente.

— ¿¡QUÉEE!? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿No la odiabas? — me inundó de preguntas mientras me tomaba de los hombros.

— Es... ¡Es su culpa! ¿Por qué lo hice? No lo sé. — hice un puchero y me fui a esconder en el pecho de mi amiga.

— Será mejor que nos sentemos, debes contarme todo y con lujo de detalle. — ríe ella con burla mientras acariciaba mi cabello y luego nos dirigimos hacia la sala de estar para poder sentarnos en los sofás.

Suspiré pesado, y pude sentir como volvía a formar un puchero con mis labios. Luego de un rato, acompañado de varios gritos y burlas por parte de la peliazul, terminé de contarle todo, tal y como ella lo pidió, con lujo de detalles incluidos.

— Te pasas de verga Chloe. — dijo ella entre risas y llevó una de sus manos a su boca para taparla mientras continuaba riendo.

— ¡No me hace gracia Evie! ¡Estoy furiosa con Red! ¡Se aprovechó de la situación! ¡Se aprovechó que estaba borracha! — chillé fuertemente en negación total, al ver como mi amiga disfrutaba de la situación bochornosa en la que me había metido.

— No puedo... No puedo... — decía ella entre risas. — ¿Y que pasará ahora? ¿Qué piensas decirle cuando la veas mañana? — pudo articular cuando por fin pudo contener su risa.

— ¿Hablarle? ¡Estás loca! No pienso hablarle, esto fue algo que no debía suceder. — hice nuevamente un puchero y comencé a patalear sobre el sofá mientras soltaba varios quejidos.

Seguía molesta por toda esta situación, no quería verle la cara mañana, ¿Cómo debía mirarla? No creo tener el coraje para hacerlo.

— Mm... Entonces, la vas a ignorar, ¿Cierto? —  asentí.

— Si la ignoro y hago como si no me importara dejará de buscarme, ¿No? — dije con lógica y solté una risa a ver a mi amiga renegar. — mañana quédate conmigo todo el día en la Universidad, ni se te ocurra dejarme sola. — la señalé.

— Pero Chloe... No vamos a la misma clase. — dijo ella y caí en cuenta en sus palabras, y era cierto, íbamos en el mismo grado, con los mismos profesores, pero en distinto número de grupo.

— Joder, esto tiene que ser un maldito juego. — dije con frustración en mis palabras, me comenzaba a enloquecer todo el asunto.

— Tranquila... Sé que podrás llevarlo bien mañana, ¿Si? Confío en ti. — me dijo ella mientras envolvía mi cuerpo entre sus brazos para dejar cortos besos sobre mi cabeza a la vez que me proporcionaba un gran abrazo.

— Te quiero... Mucho Vivi. — sonreí por lo cariños que estaba recibiendo y deje que me continuara haciendo mimos. — por cierto... ¿Dejaron mucha tarea? — la peliazul ríe por la repentina confesión de cariño que le había echo. — Yo también te quiero, niña. — acarició suavemente mi mejilla. — Y bueno, respecto a la tarea, diría que más o menos... Ah y pronto se acerca un trabajo en parejas...

— ¿Trabajo en parejas? Eso... Eso quiere decir que son de sólo dos personas... — sentí mi corazón palpitar enérgico y mordí mi labio inferior para calmar ese sentimiento.

¿Por qué me sentía así? ¿Estaba felíz? Menuda mierda.

— Exactamente, trabajo de dos personas solamente, yo tú voy rezando para que no tengas la mala suerte de caer con Red. — bromeó la ojimiel con una pequeña carcajada y pude sentir como mi nariz se arrugaba.

— Ni lo menciones... Capaz y por a ver dicho eso tengo la mala suerte que de que si me toque hacer el trabajo con ella... — respondí con un suspiro. — tengo hambre, ¿Y tú? ¿Quieres algo de comer?

— Me gustaría sinceramente. — me sonríe.

— Vale iré a preparar algo de comer, por lo mientras... ¿Puedes pasarme el trabajo de hoy? — dije con un pequeño puchero y vi como me asentía levemente — gracias, y perdón por pedírtelo... Sé que estás cansada de escribir.

— No pasa nada, por ti no hay cosa que no haga. — ríe comenzando a sacar sus libretas para ir pasando sus apuntes a mis libretas.

Le lancé un beso en medio de una risa nasal y luego me dirigí a preparar la comida. Habían pasado alrededor de una hora y la pasta con pollo ya estaba lista, me encontraba sirviendo en los platos para luego ir a llamar a Evie para comer juntas.

Serví dos buenas cantidades de pasta en cada plato junto a dos buenos vasos con soda. Se veían bien, realmente lo hacían.

Llevé los platos con los vasos a la mesa del comedor y agregué los cubiertos añadidos de unas servilletas, acomodé todo y luego llamé a mi amiga para que viniese a comer.

De pronto noté como mi teléfono comenzaba a sonar, lo tomé entre mis manos para ver quién era y se trataba de un número desconocido. Dudé un poco en si responder o no, pero la intriga no me dejaba en paz, quería saber de quién se trataba.

Presioné el botón de aceptar la llamada y me lleve el teléfono a la oreja.

— ¿Chloe? Soy yo... Red...

Logré escuchar al otro lado de la llamada y sentí mis piernas temblar. No podía estar pasando esto, era ella, era Red.









•••

Holaa, estoy trabajando en una adaptación y tiene pareja secundaria pero no sé si poner a Ella x Bridget o Mevie.

¿Qué dicen? ¿Cuál quieren?

Enemies to Lovers | GlassheartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora