Vuelve a mí

15. Ayuda

María se levantó y al voltear al lado de ella, vio a Scarlett todavía durmiendo, esto la alarmó y la movió, pensaba lo peor, hasta que vio que la rubia movió su mano y respiro tranquila.

La pelinegro se levantó de la cama, tomo una ducha rápida, se vistió y fue a la cocina a preparar el desayuno, regreso a la habitación y vio que Scarlett seguía durmiendo, le dejo una nota en el buró, le dio un beso en la mejilla, y se dispuso a salir de su departamento, subió a su auto y condujo hasta la empresa, al llegar fue directo a los laboratorios.

Cuando llegó al laboratorio se sorprendió al ver a Melina y Steve ahí.

- Buenos días - saludos María

- Buenos días - contestaron ambos

- María, quiero que lo involucres a Steve en todos los proyectos que tienes a cargo, excepto en uno y sabes cuál - la miro Melina con una ceja alzada

- Si, señora Romanoff - contesto María

- Excelente, me retiro para que empiecen a ponerse al día - y sin más Melina salió del laboratorio.

- Tanto tiempo sin verte María, me enteré que te casaste - hablo Steve con una sonrisa

- Si, pasaron muchas cosas cuando te fuiste - sonrió María

- Me dijeron que tú esposa es muy bella - dijo Steve acercándose a ella.

María capto lo que intentaba hacer Steve, tenía que pararlo, así que escribió algo en la computadora.

- Hablaremos de trabajo aquí en la empresa, mira esto es lo que vas a hacer - comento María haciendo una seña para que se acercara.

Steve se acercó a ver la computadora y no podía creer lo que leía.

"Sé lo que intentas hacer con tantas preguntas, pero aquí no, tu madre tiene cámaras, me vigila las 24 horas, nos vemos en mi hospital".

- Claro, me parece perfecto - musitó Steve

- Bueno entonces entonces empieza por este nuevo invento, quiero que me ayudes a revisarlo - hablo María con seriedad

- Me parece bien - suspiro Steve.

Así ambos estuvieron trabajando en el invento, solo hablaban cosas referentes al trabajo, porque efectivamente Melina estaba viéndolos por la cámara de seguridad.

- Más te vale que no intentes una estupidez, María - hablo para si misma.

Melina se dirigía a la caja de seguridad a revisar el control, cuando tocaron a la puerta y su secretaria entro.

- ¿Que pasa, Hela? - preguntó

- Señora, el general quiere hablar con usted

- Hazlo pasar.

Hela se salió de la oficina y posteriormente entro el general.

- Genelar Dreykov - lo saludo Melina con una sonrisa

- Señora Romanoff - contesto con seriedad

- ¿Que lo trae por aquí? - pregunto Melina

- Vine a ver cómo va ese dispositivo que ha creado, lo he hablado con mis superiores y están interesados, pero quieren saber si de verdad funciona - menciono el general haciendo un mohín con la mano

- Será efectivo general, estamos en pruebas, llevamos un año y medio, aunque hay algunas cosas por pulir

- Queremos ese dispositivo, será la mejor forma de que nuestros soldados dejen el miedo atrás y se concentren en defender a su país - dijo el general