■ Emilio es un alfa de linaje puro y ha estado enamorado desde siempre de un omega que no le dirige la palabra.
■ Joaquín es un omega puro que es maltratado por su familia por "defectuoso".
¿Qué pasará cuándo el alfa descubra todo lo que pasa con su...
Los chicos llegan junto a Azul, y Joaquín emocionado los esperaba con una comida deliciosa para todos.
Felipe lo ayudó en cada cosa que le pidió y justo cuándo decoraba con chocolate un hermoso pastel de chocolate y almendras, Emilio ingresó a la cocina.
La carita de felicidad del omega le encantaba. Se acercó y hundió su índice en el chocolate derretido, para luego tomar una fresa y hacer lo mismo.
La mordió y le dió la otra mitad, acercándose despacio. Se moría por besarlo, pero sólo apoyó su frente a la contraria e inspiró.
"Los chicos llegaron y trajeron a alguien que quiere verte"
*Puedes guardar el pastel en la heladera. Lavaré mis manitos* - las mueve al aire.
El alfa asiente y deja todo cómo su omega pidió. Su papi Felipe lo mira sonriendo y con una risita baja.
Prepara el té para todos y algunos cafés. Después un chocolate para él y Joaquín y vá poniendo todo en la bandeja.
"Mailo, ¿me ayudas con ésto hijo? Él no se vá a mover de aquí hasta decorar la otra tarta" - le señala a Joaquín sacando todo de la otra heladera.
"Ok llevo todo al jardín y vengo por ustedes" - se lleva la bandeja.
El omega está tan concentrado en su manga pastelera con crema que no vé quién llega a la cocina.
*Me quedó muy linda, ¿cierto Felipe?*
"Se vé perfecta y les vá a gustar a todos. Deja el mandil y saluda a..." - le señala a la linda omega,
Ella lo mira con una enorme y brillante sonrisa. De sus ojos brotan algunas lágrimas y se acerca rápido a él.
*¡AZUL! Si viniste, te extrañé*
"Vayan a tu cuarto un momento, cuándo saque el último budín del horno los llamo" - los saca de la cocina.
Joaquín entra al cuarto de la mano de Azul y la acomoda en una silla mientras se apura en agarrar una nueva camiseta y se cambia. La omega recorre la habitación y sabe que es de Emilio por el aroma y todo lo que hay en ella. Una vez frente al escritorio las fotos de su amigo con los chicos, con su mamá, con ella, la hacen sentir en calma.
Lo vé acomodarse y se sienta.
"Creí que ésta vez no saldrías del hospital, ¿por qué no confiaste en mí? Si tan sólo una vez lo hubiera sabido te sacaba de ahí y mi familia no te dejaba volver por nada del mundo... Sabes que mi papá odia al ruin de tu padre y yo..." - las lágrimas caen y de pronto las manitos de Joaquín toman las suyas.
Su mirada es de tristeza, inhala y se limpia.
*Creí que si buscaba ayuda, me mataría. Ó peor, les haría algo a ustedes*
"Nosotros somos más, nunca te hubiera dejado sólo. Promete que si algo pasa de nuevo, con cualquier persona, me lo dirás"
*Lo prometo, gracias por estar conmigo* - se abrazan.
"Disculpen... Todo está listo, y Ely y Leidy salieron al jardín también, así que ¿podemos bajar?"
"Sí, vamos que quiero probar tus deliciosos pasteles" - lo saca del brazo y hablan de otras cosas en el camino.
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