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—Es más fácil ponerlo con esto —dice Seungcheol, deslizando una ligera capa de gel sobre el pene blando de Joshua. Las caderas de Joshua se impulsan hacia adelante con interés.

Toma un minuto poner el aparato. Seungcheol es más cuidadoso de lo que probablemente sea necesario. El anillo se cierra detrás de sus testículos, similar a los anillos de penes con los que han experimentado. Cuando Seungcheol empieza a deslizar el encierro de castidad por encima de su pene, Joshua tiene que cerrar los ojos y pensar en ahjummas peleándose para no ponerse duro.

Una vez que el aparato está acomodado, Seungcheol lo cierra en su lugar con el pequeño candado que traía consigo. Los labios de Joshua se tuercen por lo ridículo que se siente con su pene metido en esta cosa.

Lo último que Seungcheol saca de la caja es una pequeña llave. La pone en una delgada cadena de plata y la abrocha alrededor de su cuello. La llave de la libertad de Joshua brilla en el pecho de Seungcheol.

—¿Y ahora qué? —pregunta Shua.

—Ahora tal vez recordarás a quien le perteneces.

Eso golpea con fuerza al americano, el reconocimiento de su pertenencia. La única cosa que más quiere que pertenecerle a Seungcheol, es que Seungcheol le pertenezca a él.

Joshua se hunde más en su asiento y abre sus piernas. —¿Cuánto tiempo tengo que llevarlo?

Seungcheol chupa un moretón de la curva interna del muslo de Joshua, haciendo al pelinegro gemir—El tiempo que yo quiera.

El aparato está hecho para que dure, Joshua puede verlo. Hay una ranura en el extremo para que pueda orinar y rejillas de ventilación a los lados para la limpieza, pero aun así, duda que Seungcheol se proponga que lo lleve por largo tiempo. Aunque el aparato es pequeño, todavía es perceptible por debajo de sus pantalones y tienen una sesión de fotos mañana.

Las manos de Seungcheol se deslizan sobre los muslos de Joshua mientras su boca se desliza más cerca de su ápice. —Creo que me va a gustar esto —murmura Seungcheol. —No más malos comportamientos tuyos. No puedes salirte de esto aunque lo intentes.

Joshua nunca lo intentaría, pero la idea de que no puede, de que su habilidad para correrse ahora está bajo el completo control de Seungcheol, es una realización embriagadora. Su pene vuelve a la vida. Excepto que Seungcheol tiene razón, Joshua no puede hacer nada. La jaula de penes se aprieta alrededor de él, impidiéndole ponerse completamente duro. No es doloroso, pero está ahí, frotándose contra él, provocándolo con lo que ya no puede tener.

—Hyung —aspiró.

Una presión de labios contra su piel —Shhh.

Las caderas de Joshua ruedan inútilmente mientras Seungcheol continúa con sus atenciones. Empuja hacia arriba, como una petición insistente para Seungcheol ponga su boca donde Joshua realmente la quiere, una petición que solamente se encontró con el aire.

–Voltéate —murmura Seungcheol en vez de eso, ayudando a Joshua a darse la vuelta y ponerse de rodillas sobre el cojín del sofá, con los pantalones todavía atrapados en sus tobillos.

Joshua agarra el respaldo del sofá mientras el calor de la boca Seungcheol se presiona contra él, como una ligera burla contra la parte rellenita de su glúteo, antes de que dos grandes manos lo abran por completo.

Seungcheol lame una franja caliente hasta la ranura de él, y Joshua se estremece, arqueando la espalda y empujando su trasero hacia atrás en busca de más. Seungcheol entierra su lengua entre los glúteos de Joshua y le da exactamente lo que está pidiendo. Su boca trabaja contra él, lamiéndolo con su lengua, tarareando y succionando con avidez su agujero. Sus manos se alternan entre acariciar y apretar los glúteos del americano.

Joshua se inclina hacia adelante por completo y planta su frente contra el respaldo del sofá. —Por favor —suplica. Está tan excitado, pero ni siquiera puede terminar de ponerse duro. Nunca podrá correrse de esta manera. —Por favor.

Seungcheol sólo continúa, abriéndolo con la lengua. Entusiasma a Joshua hasta el punto en que su trasero se balancea hacia atrás contra su cara, y sus sonidos necesitados apenas y se amortiguan contra el sofá.

Y luego se detiene. Seungcheol se levanta y se deja caer a su lado sobre el sofá, como si no tuviera ninguna preocupación en el mundo, como si su barbilla no siguiera húmeda por la evidencia del lugar en el que ha estado.

Joshua le parpadea. —¿Eso es todo?

Seungcheol sonríe y asiente con la cabeza una vez, y después utiliza el control remoto para encender el televisor. Joshua se vuelve a girar otra vez en su asiento. Seungcheol debe estar bromeando.

Salvo que han estado haciendo esto el tiempo suficiente para que Joshua sepa que no está bromeando. La paciencia de Seungcheol para esto es igual al de la fangirl más dedicada que acampa antes de sus conciertos. Cuando Joshua había sugerido experimentar con este tipo de relación, no había contado con la inclinación de Seungcheol por ser travieso. Se vuelve a hundir en su asiento y hace un puchero.

Cuando está seguro de que su Hyung no va a dar marcha atrás, pasa a subirse los pantalones.

—Déjalos —dice el mayor, todavía viendo la televisión. Apoya su mano sobre el muslo desnudo de Joshua y deja que sus dedos se enrosquen en el hueco entre sus piernas.

La pierna de Joshua parece pequeña bajo de la amplitud de la palma de Seungcheol. La jaula se siente incómoda y pesada sobre su pene a pesar de que su peso es ligero, pero trata de ponerse cómodo y no pensar en ello. Trata de enfocarse en el televisor, pero su mirada se mantiene desviándose hacia Seungcheol, pasando de su boca a la llave y viceversa.









Hola una pregunta, ¿saben que es una jaula para penes?

Que pena😭

RENDIDO "Cheolsoo"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora