𝗍𝗋𝗎𝖾 𝗅𝗈𝗏𝖾 ━━ Lautaro Martínez

# prologue

Candela
📌 Predio AFA, Buenos Aires

Bajé del auto junto con Emiliano y caminé junto a él hasta adentrarnos en el predio. Ambos tuvimos que mostrarles nuestras identificaciones a la seguridad del lugar, aunque ya nos conocieran. Cuidadosos como siempre

— vení a vernos entrenar, boluda. Ni que fuese tan divertido estar encerrada haciendo cuentas —me jodió mi amigo

— no se, no quiero que me caguen a pedo —Le tenía cierto miedo a los jefes. Aún era relativamente nueva y no sabía si podia hacer esas cosas

— un rato nomás. Después vas a trabajar —insistió— Te regalo un café —intentó sobornarme

su oferta fue lo suficientemente tentadora como para lograr convencerme. Cuando asentí suavemente, él dejó salir una sonrisa y me guió hacía el comedor para buscar mi café

me habia levantado tardisimo y no había alcanzado a desayunar. Si Emi no me buscaba, no llegaba a horario ni en pedo

— buenos días, Torito —saludó el mayor

— epa, todo bien Dibu? —se saludaron y los ojos de Lautaro cayeron pesadamente en mí, logrando ponerme algo nerviosa— Hola, todo bien? —saludó educadamente

se acercó y chocó nuestras mejillas a modo de saludo

— Bien, y vos? —traté de ser educada

— bien, bien. Qué haces por acá vos? no desayunaste nada? —dirigió la pregunta a él

— vine a buscar café porque Candela no desayuno. Necesitamos una contadora con la cabeza funcionando —jodió y lo empujé despacio

— ahh, vos sos la nueva contadora? Escuché que habían cambiado pero nunca tuve la oportunidad de cruzarte. Igual, pareces re jovencita, cuántos años tenes? —preguntó

— Tengo veintiséis, no soy tan jovencita tampoco —acomodé mi cabello, sonriendo sin mostrar los dientes

— ah, ni diferencia tenemos. Yo tengo veintisiete. —se cruzo de brazos— No sabía que a Emiliano le gustaban las menores —tiró con un tono de joda

fruncí el ceño confundida. Recién nos conocíamos y ya asumía cosas sobre mi? Este se piensa que no puedo llegar a este puesto por mi inteligencia y no por ser la "novia de..."

— qué? —pregunté

— ah... no son novios? Disculpá, pensé que si

blanquee los ojos ignorando su comentario y saqué mi celular de mi bolso. Esperando a mi amigo y sin ánimos de continuar charlando con el personaje frente a mi

— vamos. Te acompaño a que encuentres algún lugar y después voy a los vestidores —dijo apareciendo nuevamente con el vaso en su mano, haciéndolo lucir diminuto

sin siquiera despedirme, lo seguí hasta las gradas

— es piola Lautaro, viste? —opinó

— que se yo —me encogí de hombros

— uh, qué te dijo el virgen? Se nota que te molestó algo

— nada. Dijo que vos eras mi novio. Me molesta que piensen que estoy acá por un hombre —me quejé

— pero si yo te presenté, boba —se burló soltando una risa

— pero conseguí el puesto por mi inteligencia. No me eligieron por ser tu amiga —agarré el café— Chau, andate

— ah bue, te vas a enojar conmigo también? —se rió y se acercó a darme un corto abrazo, para luego plantar un beso en mi cabeza— Era mentira, mujer. Te quiero mucho

— yo también, Damián Emiliano —dejé salir una sonrisa— Dale, anda antes de que nos reten a los dos

sin más, se alejó en dirección a los vestuarios mientras me quedaba sentada en mi lugar revisando un poco redes y mensajes de los directivos y grupos administrativos en los que me habían agregado desde la AFA