The Misfit Club | 𝓂𝒾𝓈𝒽𝓊 [miyeon + shuhua]

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Miyeon retuerce sus manos nerviosamente mientras mira al escenario, observando a uno de los clubes ensayar su actuación. Ajusta su vestido dorado por quinta vez en los últimos diez minutos.

Los New Directions ya han terminado, por lo que Miyeon se queda de pie, preocupada, hasta que les llamen para escuchar los resultados. Todos los demás están sentados en el backstage o escondidos entre la multitud, pero Miyeon no puede calmarse lo suficiente como para descansar con ellos.

Una mano se extiende y la agarra de repente, deteniéndola de caminar por el pasillo. Miyeon casi grita de miedo por temor a ser secuestrada, pero luego se da cuenta de que es Soyeon quien la está guiando hacia un asiento vacío. Se sienta, pero observa alrededor con preocupación, sin querer que su equipo la vea hablando con la competencia y sin querer que Shuhua la vea hablando con Soyeon en absoluto.

—Hola, hermosa —saluda Soyeon, levantando los pies, para desagrado de la persona frente a ella. No parece preocuparse por esa persona ni por nadie más y continúa ignorando las miradas irritadas de Vocal Adrenaline—. ¿Por qué estás aquí sola? ¿Dónde están los New Dickections?

—Directions, y deja de coquetear —corrige Miyeon. Se quita el brazo de Soyeon, que se estaba acercando sospechosamente a sus hombros.

Soyeon pone los ojos en blanco pero coloca sus manos en su regazo de manera deliberada. Parece que Soyeon está coqueteando solo por coquetear, lo cual Miyeon supone que está bien, siempre y cuando nadie realmente intente algo con ella esta noche —bueno, excepto Shuhua.

Ella ciertamente no se opondría a que Shuhua diera el primer paso. ¿Dónde está Shuhua, por cierto?

—¿Viniste aquí para hablar o...? —Soyeon deja la pregunta en el aire, levantando una ceja.

Miyeon resopla. —Me agarraste.

—Estabas caminando de un lado a otro, era raro —responde Soyeon, encogiéndose de hombros y flexionando los dedos mientras lo hace. Repite la acción un par de veces, moviendo las manos hacia un lado como si pudiera tocar a Miyeon, pero nunca lo hace—. ¿Estás nerviosa o algo así?

A pesar del tono tranquilo y la expresión pasiva de Soyeon, sus pulgares siguen moviéndose un poco. Hmm. Miyeon reconoce un tic nervioso cuando lo ve, principalmente porque ella está llena de ellos.

—¿Tú lo estás? Estás siendo demasiada pegajosa—señala Miyeon. Le resulta agradable tener la ventaja sobre alguien a quien teme vocalmente.

Es un movimiento efímero y pronto ella coloca las palmas contra sus rodillas. —Tal vez solo quiero tocarte.

—Déjalo. Me voy —amenaza Miyeon, sonrojándose a pesar de sí misma.

—Lo siento, lo siento. Olvidé que estás enamorada. ¿Cómo va eso, por cierto? —pregunta Soyeon, pareciendo genuina.

Poco a poco, Miyeon baja la guardia. En realidad, nunca estuvo bien establecida. Después del fiasco de la fiesta de Halloween, Soyeon es extrañamente la única persona con la que Miyeon puede hablar sobre Shuhua, a menos que quiera someterse a una conversación increíblemente incómoda con Yoona.

No hay manera de que eso suceda.

—Bien. Ella... —Miyeon se muerde el labio inferior por un momento, accidentalmente limpiando todo el gloss—. Ella me hace realmente feliz.