La noticia cayó sobre nosotros como una sombra oscura, envolviéndonos en una tristeza profunda. El llanto de mi madre era la melodía fúnebre de un adiós que nunca hubiéramos querido pronunciar. En ese momento, comprendí que el amor es tan frágil como la vida misma, y que la pérdida es una parte inevitable de la existencia
mi mente quedo en blanco y mi corazon empezo a latir con fuerza culpandose de tantos te quiero y tantos momentos desaprovechados, mi mente no lo procesaba pero mi alma gritaba que lo habiamos perdido, la primera lagrima se resbalo por mi mejilla y fui consiente de que estaba gritando que era mentira, recuerdo que mi padre intento acercarse a mi pero me aleje encerrandome en mi habitacion
mi mente me repetia una y ota vez que era una pesadilla que eso no sucedia, olvide todo lo que tenia por realizar pero simplemente me centre en el vacio que se formaba
En el camino a casa de mis abuelos, un silencio sepulcral envolvía el auto. La canción se repetía una y otra vez en mis auriculares, como si estuviera atrapada en un bucle infinito. Con cada escucha, el dolor se agudizaba, pero al mismo tiempo, sentía una extraña sensación de calma. Era como si la música me estuviera preparando para lo que vendría: una vida sin mi abuelo. La melodía se convirtió en mi mantra, en mi compañero de duelo, en un recordatorio de que a pesar de todo, la vida seguía adelante aunque en el proceso esa cancion se convertiria en la capaz de llevarme de vuelta a ese momento
al llegar a casa lo que menos queria era entrar a su habitacion donde ya hacia lo que era el sin su caracteristica sonrisa al esperame cuando lo llegaba a visitar, lo primero que visualice fue a mis tios y primos fuera de casa y me quede fuera viendo los carros pasar, estando en un estado de shock donde lo que menos queria sentir era que esa seria mi realidad, unos gritos de adentro me sacaron de mis pensamientos, era mi abuela que decia mi nombre sin remedio, recuerdo caminar a su encuentro y sentir sus brazos envolviendome pero en ese momento me dijo algo que me marco por dentro. nos dejo solos, me dejo sola eso me rompio un poco mas ese dia
recuerdo mi ultima conversacion con el mientras espero a que la misa inicie todo eso transcurrio en el mismo dia porque te perdimos un 10 de junio a las 5:00 Am y eso jamas podre olvidarlo por que fue un cambio repentino en mi vida.
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Más allá de la tormenta
Teen Fiction"Todos enfrentamos tormentas en la vida. Momentos de dolor, pérdida y confusión que nos sacuden hasta los cimientos. Pero ¿qué hay más allá de esas nubes oscuras? En estas páginas, encontrarás un faro de esperanza, una guía para navegar los desafíos...
