Capitulo: 5 *Una noche diferente*

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El sol se deslizaba lentamente detrás del horizonte, tiñendo el cielo con los últimos tonos cálidos de la tarde. Taehyung observaba cómo la luz se desvanecía, sintiendo cómo el peso de las palabras de Jungkook y Yoongi se asentaba en su mente. La incertidumbre que lo invadía solo crecía, y en lugar de respuestas, lo único que había conseguido eran más dudas.

Con cada minuto que pasaba, mientras la noche se apoderaba del motel, el temor comenzaba a enraizarse en su interior. Recordaba los ruidos de las noches anteriores, susurros inexplicables y pasos que parecían perseguirlo en la oscuridad. El miedo a lo desconocido lo envolvía más a medida que el sol se escondía.

El frío de la noche empezaba a penetrar en sus huesos, intensificando su ansiedad. Su respiración se volvió rápida y superficial, y un nudo de pánico se apretó en su pecho. El sudor frío recorría su frente, y sus manos temblaban incontrolablemente. La habitación se volvía cada vez más opresiva, y la sensación de que algo terrible estaba por suceder lo abrumaba.

De un momento a otro, la puerta fue tocada, sobresaltándolo de sobremanera y haciéndolo dudar si debía abrirla o no. Con las manos en el pomo de la puerta, finalmente la abrió, y se sorprendió al encontrarse con la mirada curiosa de Jeon Jungkook.

Jungkook observó a Taehyung, notando la palidez en su rostro. Aunque su preocupación era sutil, no logró ocultarla por completo.

—Qué pasa, Taehyung — dijo con una seriedad que no dejaba lugar a bromas.

Taehyung trató de responder, pero las palabras se quedaron atrapadas en su garganta. Jungkook lo miró profundamente, como si intentara ver más allá de su apariencia.

—Tranquilo, Kim. Esto es solo el principio. — dijo, su tono grave, sin rastro de diversión.

Jungkook no esperó respuesta. Con una determinación tranquila, se dirigió hacia la cama y se sentó, acomodándose con naturalidad.

—Por eso hoy dormiré aquí— anunció con tranquilidad y firmeza.

Taehyung parpadeó, sorprendido. —¿Q-qué? ¿Por qué?— preguntó, su voz temblando de nervios.

—No es seguro que alguien en tu estado esté solo— respondió Jungkook con una mirada penetrante. —Es por eso que acordamos estar juntos.

—P-pero no es necesario— insistió Taehyung, su incomodidad evidente. Jungkook le imponía un poco de miedo, no solo por su presencia dominante, sino también por la seguridad que parecía irradiar apesar de la situación.

Jungkook, sin mostrar signos de prisa ni incomodidad, se recostó en la cama con los brazos detrás de la cabeza. Su expresión era relajada y en control.

Taehyung se acomodó lentamente en la cama recostados por igual, sintiendo una creciente tensión en el aire. La habitación se llenó de un silencio inquietante, interrumpido solo por los crujidos ocasionales del viejo edificio. La oscuridad parecía querer envolverlos, cuando la lámpara comenzó a parpadear sin razón alguna.

Después de unos minutos, Taehyung sintió cómo la sensación de opresión en la habitación aumentaba. Los fenómenos paranormales que había experimentado antes empezaron a hacerse presentes de nuevo: susurros inaudibles podían escucharse en la lejanía, pasos etéreos y algo sobre natural parecía estar rodeándolos. Su corazón latía frenéticamente, y la ansiedad lo envolvía como una niebla.

Mientras el miedo lo invadía, sintió una mano cálida tomar la suya. Jungkook, con los ojos aún cerrados, había extendido su mano para sujetar la de Taehyung en un gesto sorprendentemente suave. La acción, tan sencilla pero significativa, le ofreció una sensación de seguridad en medio del caos.

Taehyung, con el corazón aún acelerado, miró a Jungkook, intentando procesar la tranquilidad que su gesto le ofrecía. Aunque los fenómenos paranormales seguían ocurriendo a su alrededor, la presencia de Jungkook a su lado parecía ofrecer un pequeño refugio en la tormenta.

......

Ambos estaban recostados en la cama, mirando al techo. El ambiente seguía cargado, y los fenómenos extraños continuaban. Sin embargo, la mano de Jungkook en la suya era un recordatorio constante de que, aunque la noche era incierta, no estaba completamente solo en su miedo.

El Refugio de la niebla •Kookv•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora