-17-

0 0 0
                                    

Amelia

No tengo ni idea de cuantas horas han pasado. Después de la discusión, y segunda separación con Ethan, me fui corriendo de ahí y en cuanto pude llame un taxi para que me llevará a mi casa, era totalmente incapaz de parar de llorar, ni si quiera recuerdo de como pude darle mi dirección.  Cuando por fin llegue me fui a la ducha, solo podía escuchar como mi respiración sofocada se juntaba con el agua que caía sobre mi.

Me puse lo primero de ropa cómoda que encontré, trate de dormir, pero era incapaz de hacerlo por culpa de toda la ansiedad que sentía. Así que puse el altavoz lo más alto que pude y empecé a bailar, y eso nos lleva al actual presente. No se cuanto tiempo llevo encerrada en mi habitación  bailando, solo que es lo suficiente para tener en la mente en blanco y casi ni poder respirar. Sinceramente mi salud ahora mismo no me importaba, solo quería hacer desaparecer esta mierda de ansiedad.

Pero supe que mi cuerpo me rogaba el parar cuando me caí al suelo con las piernas temblando, tuve que ponerme una mano en el pecho para tratar de calmar mis pulmones.  Sentía que mi mente estaba toda oscura, no podía controlar todos los malos pensamientos, no entendía nada, ¿Por qué Ethan me había ocultado la verdad? Si tan solo me hubiera contado todo desde el principio ahora mismo estaríamos bien, es decir, claro que en el momento aquel le hubiera dejado igualmente, pero hace meses cuando tuvimos aquella charla le hubiera perdonado, tal cual como hice. Me sentía totalmente destrozada, igual que en aquel momento, no podía parar de llorar, ni siquiera era capaz de moverme, así que acabe durmiéndome en el suelo de mi habitación, con el corazón roto, una vez más.  

Me desperté por el timbre de mi casa, fui rápido a abrir ya que no paraba de tocar, era Elaine. Se me tiro a abrazarme, y solo pude volver a ponerme a llorar.

-- Te lo dije Amelia, simplemente te lo dije.

-- ¿Cómo te has enterado?

-- Me escribió Ethan, anoche me mando un mensaje pidiéndome disculpas por segunda vez, al leerlo esta mañana no entendía nada, pero ha sido reaccionar y me he venido corriendo a tu casa.  

-- Gracias por venir, te lo agradezco.

-- No hace falta que me des las gracias, soy tu mejor amiga, para eso estoy. Así que ahora te ordeno que te sientes, voy a preparar un desayuno para las dos, después veremos una peli que te guste, luego nos pondremos guapísimas e iremos a un restaurante bueno, y más tarde si te sientes con fuerzas me contarás que ha pasado, y si no descansaras, que se que no habrás dormido una mierda.

Es la mejor, cada día puedo confirmarlo más.

Ataco sus ordenes y me siento mientras ella prepara algo para comer, no tengo ni idea de la hora que es ya que no he mirado el móvil ni un segundo, pero suponiendo que ha dicho la palabra " desayunar " no debe de ser muy tarde. No tarda en dejar en la mesa un vaso de café y unos panckakes con chocolate y algo de fruta.

Mientras nos terminamos todo lo que ha preparado le cuento todo lo sucedido, prefiero hacerlo ahora para quitármelo de encima.

-- No puede ser mas red flag, aparte de gilipollas e inmaduro es mentiroso  e infiel.

-- Ni siquiera se porque decidí darle una oportunidad, maldita luna.

-- Sobre eso quiero pedirte disculpas

-- ¿Qué? ¿Por qué debes disculparte tú?

-- Fui yo la que te aconsejo que se la dieras, aunque no en el sentido amoroso, pero aun así debí pensar que podría pasar.

-- Tú no tienes nada de culpa, al fin y al cabo el es mi destino, así que de alguna forma tenia que pasar.

Seguimos hablando un rato más, cuando decidimos salir al centro comercial llamamos a  Kate, le tengo que poner al día de la mierda de situación actual.  No tardamos mucho en arreglarnos, es decir, arreglarme, ella ya viene guapísima desde su casa, me pongo una simple sudadera con un pantalón corto, prefiero ir cómoda.

Cuando llegamos Kate ya esta ahí, se acerca rápido a saludarnos pero en seguida se da cuenta de que algo no va bien. 

-- ¿Amelia vestida de forma básica? Mas os vale contarme.

Vamos donde siempre para empezar a contarle todo.

-- Sabia que no estaba equivocada al decir que todos los hombres son iguales, pero ahora en serio, ¿Quién coño se ha creído para ocultarte que te puso los cuernos? Que hijo de puta.

-- Literalmente, pero por cierto, ¿Qué vas a hacer el proyecto?

-- No lo se, supongo que debo de hablar con el.

-- No, que le follen, quédate tu con tu parte y que se apañe el solito.

-- Ojalá, pero no es tan sencillo, ya esta todo pactado con los profesores. Tratare de separar lo personal con los estudios, además tampoco nos falta mucho para acabarlo y aun tenemos bastante tiempo. 

-- Wow, te admiro muchísimo. Realmente se nota lo madura que eres, sin duda ese cabrón no te merece.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Estaba agotada después de todo el día, realmente he estado bien, el problema es ahora, el volver a mi propia soledad, donde no hay nada para callar mi mente, ha sido inevitable llegar a casa y volver a llorar.

Le extraño tanto, y eso duele, duele mucho, porque extrañarle significa que ya no esta en mi vida, y la razón por la cual ya no esta es una mierda y me destroza viva. Aquel día hace dos años le entregue toda mi confianza, significo mucho más que cuando le entregue mi cuerpo por primera vez, y al día siguiente la traiciono, pero pensaba que solo había fallado a mi confianza, y actualmente, después de dos años de todo, me ha vuelto a fallar por el mismo contexto que en el pasado, pero esta vez si me he enterado de la verdad completa, también me fallo a mi aquel día, y me ha vuelto a joder completamente.

Querida luna, creo que te odio, no lo se, o mas bien tu me odias, ¿Por qué decidiste atarme a el? Cuando todo parece que esta bien, todo se va a la mierda, ¿Acaso este es nuestro destino? ¿El nunca ser felices? 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 13 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La luna y su destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora