-Entiendo... - Los dos apartamos la mirada, tanto ella como yo estábamos avergonzados.
-Y... Que me dices, ¿quieres ser mi novia? - Se que no soy bueno improvisando pero... Al menos lo dije.
-Mira James, eres buen chico y guapo pero... Lo nuestro no podrá ser, hay muchas mas que yo, lo siento.
Se le iban cayendo lagrimas, se tapó la cara, al rato se levantó para irse pero le cogí del brazo, se giró me miró con sus ojos verdes llenos de lágrimas, era hermosa. Me abrazó sentí ganas de besarla pero me aguanté las ganas y la abracé.
-¿Porqué lloras? Todo esta bien.
-Es que no lo entiendes, nada está bien.
Me santía mal, no por que me rechazó sino por que estaba llorando y creo que por mi culpa.
-¿El que no está bien?
-Cuanta menos gente tenga a mi alrededor mejor.
-¿A qué te refieres con eso?
Paró de llorar, se secó las lágrimas e ignoró mi última pregunta.
-Lo siento pero... Creo que me voy a ir.
Miré mi reloj, eran las 7:57 ella seguía de pié esperando una respuesta.
-Te acompaño- dije lo mas amable posible.
-No hace falta.
-Que si, que si. Por cierto... ¿Quieres quedar mañana?
-No creo que quiera.
-No debería ser... Si claro estaré encantada.- dije imitando su voz para que se riera y lo conseguí.
-Bueno bale...
-Está bien.- paso por tu casa a las 6:30
-Perfecto.
La dejé en su casa y me fui a la mía. Me quedé pensando en su carácter, me gustaba.