El frío aire nocturno parecía más intenso mientras Lucía seguía a Sebastián por los oscuros pasillos de la mansión. La fiesta, con su música vibrante y sus risas, se había quedado atrás, y el sonido de sus pasos resonaba en las paredes de piedra. Claudia caminaba junto a ella, lanzándole miradas nerviosas, pero Lucía estaba demasiado absorta en sus pensamientos para decir algo. El encuentro en el jardín aún la inquietaba, y ahora este misterioso joven, Sebastián Calderón, prometía revelarle aún más sobre los secretos que parecían envolver la mansión como una niebla espesa.
La mansión Calderón era un laberinto de corredores, puertas cerradas y escaleras de madera crujiente. Cada rincón parecía esconder una historia, cada sombra susurraba misterios que nadie se atrevía a contar en voz alta. Mientras seguían a Sebastián, Lucía no pudo evitar fijarse en los retratos antiguos que colgaban de las paredes, representaciones de miembros de la familia Calderón a lo largo de los siglos. Todos ellos parecían compartir la misma expresión severa y distante, como si hubieran cargado con un peso demasiado grande para soportarlo.
Finalmente, llegaron a una puerta de madera oscura, diferente de las demás. No era tan elegante ni tan imponente como las otras puertas de la mansión, pero había algo en ella, algo que la hacía destacar. Sebastián se detuvo frente a la puerta y sacó una llave de su bolsillo. Era una llave antigua, forjada en hierro, que parecía haber sido hecha específicamente para esa cerradura.
"Lo que estás a punto de ver," comenzó a decir Sebastián, mientras giraba la llave en la cerradura, "es algo que muy pocos conocen. Mi familia ha guardado este secreto durante generaciones, y ahora, por alguna razón que aún no comprendo, siento que debes saberlo."
La puerta se abrió con un chirrido, revelando una pequeña habitación, apenas iluminada por la luz de una lámpara de aceite en una mesa en el centro. Lucía sintió un escalofrío recorrer su espalda al cruzar el umbral. La habitación estaba llena de una extraña mezcla de objetos: libros antiguos con tapas de cuero agrietado, pergaminos enrollados, y en las paredes, una serie de mapas y planos que parecían trazar el diseño original de la mansión y sus alrededores.
En el centro de la habitación, descansaba un diario, viejo y gastado, con la portada adornada con letras doradas que apenas eran legibles. Sebastián se acercó al libro y lo acarició con una reverencia casi ritual.
"Este diario perteneció a mi bisabuelo, Alejandro Calderón," explicó, su voz un susurro que parecía reverberar en la habitación. "Él fue quien construyó esta mansión sobre las ruinas de un antiguo convento. Pero lo que la mayoría no sabe es que ese convento albergaba más que simples monjas y rezos. Se decía que en sus profundidades, se guardaban conocimientos oscuros, conocimientos que nunca debieron ser descubiertos."
Lucía sintió un nudo en el estómago mientras escuchaba. ¿Conocimientos oscuros? ¿Podría ser eso lo que la sombra en el jardín había mencionado? La curiosidad se mezclaba con el miedo, creando un torbellino de emociones que la hacía sentirse aún más atrapada en el misterio.
"Pero, ¿qué pasó con el convento?" preguntó Claudia, quien hasta entonces había permanecido en silencio, claramente impresionada por el ambiente de la habitación.
Sebastián la miró, su expresión grave. "Se dice que un incendio arrasó el convento hace más de un siglo, destruyendo todo a su paso. Sin embargo, algunos creen que no fue un simple accidente. Se rumorea que las monjas intentaban contener algo, algo que escapó de su control y que provocó la tragedia. Mi bisabuelo fue uno de los pocos que llegaron al lugar después del incendio, y lo que encontró lo cambió para siempre."
Sebastián abrió el diario, revelando las páginas amarillentas llenas de la caligrafía elegante de su bisabuelo. Las letras, aunque borrosas por el tiempo, eran legibles y parecían narrar una historia que Alejandro Calderón había mantenido oculta del mundo.
"Este diario," continuó Sebastián, "es su relato personal de lo que encontró en las ruinas del convento. Aquí describe no solo los restos carbonizados, sino también cosas... que desafían la razón. Cosas que, según él, nunca deberían haber existido."
Lucía se inclinó hacia el diario, leyendo las primeras líneas. Cada palabra parecía cargar un peso inmenso, como si fuera un fragmento de una verdad terrible y prohibida. Había menciones de túneles subterráneos, símbolos grabados en las paredes que no pertenecían a ningún lenguaje conocido, y una especie de altar que había sido profanado.
"¿Qué fue lo que encontró?" Lucía apenas se atrevía a preguntar, su voz temblando con la anticipación.
Sebastián cerró el diario de golpe, la tensión en el aire casi palpable. "Encontró... una puerta. Una puerta sellada con símbolos que él no pudo comprender, pero que sabía que no debía abrir. Según sus escritos, esa puerta era un umbral hacia algo más, algo que no pertenece a este mundo."
Claudia se estremeció visiblemente, su rostro reflejando el temor que comenzaba a crecer dentro de ella. "¿Y está... está esa puerta aún en la mansión?"
Sebastián asintió lentamente. "Así es. Mi bisabuelo nunca la abrió, pero selló los túneles para asegurarse de que nadie más pudiera llegar a ella. Sin embargo, a lo largo de los años, ha habido... incidentes. Personas que desaparecieron, fenómenos inexplicables. Mi familia ha intentado mantener todo en secreto, pero parece que esas fuerzas aún están presentes, esperando a ser liberadas."
Lucía sintió que su respiración se aceleraba. Todo lo que había oído, todo lo que había sentido en el jardín, comenzaba a encajar en un rompecabezas que no había imaginado. ¿Podría ser que esa sombra fuera parte de lo que su bisabuelo intentó mantener encerrado? ¿Y por qué ahora se había fijado en ella?
"¿Qué se supone que hagamos con esta información?" preguntó Lucía, luchando por mantener la calma.
Sebastián la miró, sus ojos oscuros llenos de una mezcla de determinación y preocupación. "Eso depende de ti, Lucía. Por alguna razón, has sido elegida por esas fuerzas. No sé si es para liberar lo que mi bisabuelo selló o para enfrentarlo. Pero lo que sí sé es que este diario podría contener las respuestas que buscas, o al menos, una guía para entender lo que está por venir."
Lucía sintió que el peso de la decisión caía sobre ella como una losa. Todo en su interior le decía que estaba a punto de cruzar un límite del que no habría retorno, pero también sabía que no podía simplemente ignorar lo que había visto, lo que había sentido. La sombra en el jardín no había aparecido por casualidad, y ahora, ese oscuro secreto la atraía hacia sí como un imán.
Con una mano temblorosa, tomó el diario y lo abrió nuevamente. Las palabras de su bisabuelo parecían cobrar vida bajo la tenue luz de la lámpara, y por un momento, sintió que estaba allí con él, explorando las ruinas del convento, enfrentándose a lo desconocido.
Claudia se acercó a Lucía y puso una mano en su hombro, ofreciéndole un apoyo silencioso. "No tienes que hacerlo sola," dijo suavemente. "Estamos contigo, sea lo que sea."
Sebastián asintió, su expresión más suave ahora. "Juntos, podremos desentrañar este misterio. Pero debemos ser cautelosos. La verdad que estamos buscando podría ser más peligrosa de lo que imaginamos."
Lucía cerró el diario con un suspiro. Sabía que no había vuelta atrás. Había sido elegida, y ahora debía enfrentarse a lo que fuera que aguardaba en las sombras. La pregunta era, ¿estaba preparada para lo que descubriría?
Miró a sus amigos, agradecida por su apoyo, pero sabiendo que en el fondo, este camino era uno que tendría que recorrer sola, en la oscuridad, siguiendo los ecos del pasado que resonaban en cada rincón de la mansión Calderón.
Y así, con el diario en sus manos y el peso de lo desconocido en su corazón, Lucía dio el primer paso hacia lo que sería el comienzo de un viaje hacia lo más profundo de los secretos que el tiempo había dejado enterrados.
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Secretos Entre Las Sombras
Mystery / ThrillerLucía nunca imaginó que una simple fiesta en la antigua mansión Calderón cambiaría su vida para siempre. La imponente residencia, envuelta en misterio y sombras, esconde secretos que llevan décadas enterrados entre sus muros. Una noche, impulsada po...