Marcas

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Ok, sabía que ser madre había sido uno de sus mayores sueños y que también sabia que amaba con su alma al cachorro que estaba en su vientre. Pero algo de lo que estaba segura, es que odiaba los malditos mareos y vomitos del embarazo.

Había estado tan encantada con la noticia que había olvidado completamente que esto tenía que pasar en algún momento de la gestación.

Y sabia que no se podía hacer mucho más que recibir feromonas y abrazos de su alfa, quien ayudaba bastante pero no lo suficiente para que se acabara completamente.

También sabía que tendría que aguantar pues no quería arruinar el baby shower de Ama y sus gemelos.

No seria muy agradable que todos en la celebración vieran a un Omega vomitando frente a ellos y tampoco para quien tuviera que limpiarlo después.

Así que acaricio su estómago con sus ojos puestos en su bebé.

- Por favor, pórtate bien hoy.

No sabía si su bebé le entendía. Apenas había cumplido los 3 meses y solo había ido 2 veces al doctor. Sabía que tendría que ir de nuevo en dos semanas. Pero estaba contenta de estar en el jardín de Ama y Filis.

Todos sus amigos también estaban allí, al igual que las familias de los padres. Abril podía ver cómo todo el mundo acariciaba el vientre de Ama, el cual estaba ya lo bastante grande, pues no solo tenía 5 meses de embarazo, si no que también los gemelos ocupaban bastante espacio. Abril sabía que su vientre no sería tan grande como el de Ama cuando también tuviera los 5 meses. Porque después de todo, ella solo tenía un cachorro.

Cachorro que estaba antojado de un jugo de frutilla que supuestamente su madre alfa le traería. Abril hizo un puchero pues no veía a Samantha cerca de su percepción visual.

Claro que muy pronto esa expresión desapareció con un grito cuándo alguien la abrazo por detrás. Y supo de inmediato que era Samantha gracias a su olor.

La alfa rio divertida y Abril le dió un golpe en su brazo. Samantha le entrego su vaso con jugo de frutilla que tanto quería y toda su expresión de enojo que tenía desapareció totalmente, siendo reemplaza por una de alegría.

Luego de eso, el vaso estuvo completamente vacío y pudo suspirar satisfecha, recibiendo un sonoro beso en la mejilla que la hizo reír.

Ama se acercó a ella para charlar. Últimamente hablaban mucho más seguido pues tenían algo en común que las demás del grupo, el embarazo. Las demás no podían entender como se sentía, así que muchas veces unían fuerzas para quejarse en dúo, volviendo locos al los demás  para que cumplieran sus caprichos.

Stefani incluso les había comenzado a llamar el "dúo del mal", ganándose una mala mirada de ambas omegas. En esos momentos, ambas se miraban con venganza y decían al mismo tiempo "Cuando en un futuro, seas tu la embarazada, nos vamos a reír en tu cara" y a Stefani se le iba todo el color de la cara. No por la mención de un posible embarazo, sino que sabían que las advertencias de las omegas serían cumplidas.

Abril y Ama eran las que más miedo daban en el grupo cuando estaban enojadas.

Al pasar la tarde, muchas actividades se realizaron, con las risas de fondo y los gritos alegría. La estaban pasando de maravilla.

También revelaron el sexo de los gemelos, que al parecer, serían gemelas pues ambas eran niñas. Todos gritaron cuando dieron el anuncio a través de loky el perro de Filis. Quien había tenido que amarrarle globos rosados en su cintura cuando lo habían llamado a través de un silbido.

Y ahora estaba abriendo los regalos, los cuales por suerte, eran mayormente unisex. Eran cosas que si necesitaban para las bebés, como pañales y ropa. Casi ningún juguete y Abril sabía a través de las miradas de la pareja que estaban conformes con los regalos.

No había dejado de sonreí pues todo era muy alegre y su bebé le había hecho caso al portarse bien.

Eso hasta que comenzó a marearse y algo dentro suyo supo de inmediato que era. Salió corriendo del jardín para entrar a la casa y subió lo más rápido que pudo al segundo piso cuando se dió cuenta que el baño del primer piso ya estaba ocupado, sintiendo los gritos de Samantha detrás suyo, que en todo momento se había quedado al lado suyo, por los que obviamente se habían dado cuenta de los síntomas.

Cuando ya estuvo en el baño, boto todo por el sanitario y Samantha llego para poder dejar caricias en su espalda.

Una vez termino de vomitar, se recargo en su alfa completamente agotada, con sus cabellos pegados a la frente gracias al sudor y sintiéndose mejor luego de eso. Era peor aguantarse las arcadas que vomitar la mayor parte del tiempo.

Al menos su bebé pudo aguantar hasta casi al final de la fiesta y le había permitido comer la mayoría de la comida sin sentir asco. No sé podía quejar de eso.

Y también, Samantha siempre estaba allí para apoyarla.

.....

Aquí el cap de hoy

Esperó les guste 😊

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Nos vemos el viernes

Se me cuidan