★₊˚﹟𝐃𝐎𝐈𝐍' 𝐓𝐈𝐌𝐄 '
━ Sabes que nada será fácil cuando todo el mundo está en tu contra, incluyendo a quienes creías amar.
Brooke Cooper vivía una vida normal hasta que el Karate llegó al valle, la adolescente le interesó hacer eso, y logrando q...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
┊: ❝ chapter seven. the dogs🥋
___________________________
A la mañana siguiente, Brooke se encontraba a un lado de Miguel mientras veían al mayor terminar de beber su cerveza. La castaña miraba con el ceño fruncido al ver como este se empinaba su bebida de un solo trago para después mirar a sus estudiantes.
— Han entrenado duro. Son más fuertes, rudos y rápidos. Se esforzaron. Están listos para este torneo, ¿no? — comenzó a decir el mayor arriba de el techo de un auto.
— ¡Si, Sensei!
— ¡Error! — dijo para después aventar la lata hacia los pies de los jóvenes —. Su mejor esfuerzo no es nada. Si quieren ganar el torneo de karate sub-18 All Valey, tienen que dar lo mejor de lo mejor. Por eso a partir de ahora tendrán lo peor de mi. ¿Entendido?
— ¡Si, Sensei! — volvieron a responder.
— ¿Son perdedores?
— ¡No, Sensei!
— ¿Ustedes son nerdos? — preguntó fuertemente.
— ¡No, Sensei!
— ¿Están seguros de eso? — preguntó, a lo que sus alumnos negaron, a excepción de Brooke pero guardo silencio cuando escuchó a todos negar.
El mayor llevo sus manos hacia su rostro con frustración al escuchar a sus alumnos. Mientras Brooke ocultaba una pequeña risa al ver la reacción del Sensei.
Más tarde, Johnny los había puesto a entrenar justo en ese lugar, con llantas de carros y demás.
— Sus enemigos los rodean, destruyanlos. — dicho eso, todos comenzaron a destruir las partes de autos viejos que había por ahí.
Cada quien golpeaba las ventanas de las viejas puertas de los autos, incluso a los autos mismos.
— Si quieren ganar, deben tener hambre. ¿Tienen hambre? — decía mientras les entregaba pedazos de carne seca a sus alumnos, quienes asintieron ante su pregunta —. Bien. Ellos también.
Dicho eso, varios perros venían ladrando, rápidamente corrieron lejos de ellos. Brooke aprovechó sus clases de gimnasia en su niñez y saltó hacia un auto logrando esquivar a los perros, pero una mueca salió de su rostro cuando un perro alcanzó a morder a Eli.
Más tarde, Brooke se encontraba en su habitación terminando de arreglarse, pues irían a cenar con los LaRusso, ya que Amanda le había pedido ayuda a Amelia pues su suegra estaba ahí, así que la mujer no dudo en aceptar e ir a ayudar a su amiga. Brooke al principio no quería ir, pero siempre le parecían divertidas las cenas con los LaRusso, así que decidió ir por igual.
