Verano, dulce verano [En proceso]

Capitulo 7

En el billar había muchos chicos, pero conseguimos encontrar a Marco con facilidad, estaba hablando con un chico bastante guapo, era rubio, alto y con ojos color avellana.

Nos acercamos y Adriana agarro a Marco de la cintura por detrás, yo no podía dejar de mirar a ese precioso chico.

- Anda chicas, por fin aparecéis. ¿Donde os habíais metido? Nos dijo Marco.

- Nada amor, lo importante es que estamos aquí, que mas da lo que estuviéramos haciendo. Dijo Adriana acercando su cara a la de el.

- Cierto. Le respondió Marco y la beso.

El chico desconocido y yo nos echamos unas miradas de incomodidad, estaban los dos tortolitos montandoselo aquí en nuestra cara y nosotros sin saber que hacer o decir.

Se separaron y Adriana presto toda su atención en el chico rubio y alto que me había cautivado.

- Marco. ¿No nos presentas a tu amigo? Dijo Adriana girándose hacia el.

- Claro, chicas este es Luis. Luis, estas son Adriana y Stella. Dijo Marco mientras nosotras le dábamos dos besos.

- Encantado. Dijo Luis y me dedico una preciosa sonrisa.

Mi amiga, que era muy avispada cogió a Marco de la mano y se lo llevo casi a rastras a una mesa, dejándonos solos, que vergüenza, no sabia que decir ni que hacer, suerte que el era muy agradable y rápido hizo que se me pasaran las mariposas en el estomago.

- ¿Sabes jugar al billar? Me pregunto.

- Si, bueno, cuando era mas pequeña mi abuelo me enseño a jugar.

- Te apetece echar una partida. Yo invito. Me dijo mientras sacaba la cartera.

- No, no, no, no hace falta de verdad. Me estaba empezando a poner algo nerviosa, hacia mucho tiempo que no jugaba, y no quería hacer el ridículo delante de este chico tan mono.

- De verdad Stella, que ni me importa, anda no seas tonta y vamos a echar una partida. Me dijo riéndose.

- De verdad que no. Le conteste un poco seca.

- ¿Porque?. Hizo una pausa. Lo siento, de verdad, no quería agobiarte. Me miro con cara de preocupado, pobrecito.

- No, no, si no es nada de eso, es que hace mucho que no juego y me da miedo hacer el ridículo.

- Bueno, se una solución para eso. En su cara se formo otra vez una sonrisa y se puso a buscar a alguien.

- ¿Cual?

- Juguemos por equipos. Se giro y me agarro de la mano, me encanta sentir su mano junto a la mía. ¡Miralos, allí están! Dijo señalando a Marco y Adriana.

No acercamos a ellos, estaba tomándose algo, parecía coca-cola, pero a saber, se daban cariñitos y reían.

- Chicos. ¿Echamos una partida al billar los cuatro? ¿Dos a dos? Dijo señalándome a mi y a el y a ellos dos.

- Que va tío, estamos ocupados. Adriana solto una risilla tonta. Mejor diselo a Josh y Caterina, que Stella les conoce también.

- De acuerdo. Dijo Luis.

No, no, no, como que contra ellos dos, no, no quería ver a Josh con ella, o quizás si, quería ver su cara cuando me viera con Luis, así sentiría lo mismo que cuando le vi yo con mi amiga.

- Sii, perfecto. Dije yo, y nos alejamos en su búsqueda.

Al cabo de unos minutos los encontramos en la barra, Josh estaba mirando una carta, probablemente miraba algún aperitivo,mientras Caterina le miraba de arriba a abajo, comiendole con la mirada, es mi amiga, pero odio que haga estas cosas, aunque yo tampoco puedo decir nada ya que ella no tiene ni idea de lo que siento por Josh.

Luis y yo nos acercamos y los chicos se chocan las manos y se dan palmaditas en la espalda mientras que Caterina me echa una mirada de "joderollos" no la culpo, la verdad yo habría actuado igual.

- ¿Os va un dos contra dos en el billar? Dijo Luis.

Tras esas palabras la cara de Caterina cambio de una sonrisa falsa a una cara de asesina, y lo peor es que esos ojos siniestros iban dirigidos principalmente a mi.

-¡Claro! Dijo Josh, tiro la carta y se levanto de un salto.

Caterina se levanto después, sin ganas, pero ¿Cómo iba a llevar la contraria a Josh?

Los chicos se adelantaron para ir a la mesa de billar mientras que Caterina me agarro de la camiseta y de un tirón me apartó quedándonos las dos atrás.

-¡Pero que estas haciendo! Pensé que eras mi amiga. Me dijo Caterina.

-Caterina, yo, lo siento mucho de verdad, no era mi intención molestar, aunque creo que estas exagerando.

-Ooooh, ya se lo que pasaa, a ti te gusta, por eso todo este rollo del billar y de fastidiarme con el.

Me dolió que mi amiga pensará así de mi, aunque no podía negarla que no me gustaba Josh, odio mentir. Simplemente me quede en silencio.

-¡Lo sabía! Pues que sepas que jamás será tuyo Stella, nunca. Se empezó a poner colorada, se la veía muy enfadada, es comprensible, aunque siendo ella una de mis mejores amigas. No quería discutir a si que simplemente me mantuve en silencio.

-Vale, genial. ¿No quieres hablar? Pues vale. Esto es la guerra. Y tras esas palabras de la que es una de mis mejores amigas se dio la vuelta y se fue corriendo junto a Josh que ya estaba con Luis en el billar.

Luis levanto la mano animándome a ir rápido para empezar la partida.