Mis pasos se hunden en arenas que nunca serán mías,
caminos que llevan al borde del horizonte,
donde tu sombra es un eco que nunca responde.
Eres la estrella inalcanzable en un cielo ajeno,
y mis manos, vacías, trazan constelaciones que no me pertenecen.He lanzado al viento los susurros que jamás escuchas,
y cada palabra es como un barco sin puerto,
navegando hacia un océano de olvido,
donde las corrientes me alejan de la orilla que jamás me esperará.Tu risa es la flor que florece en un jardín cerrado,
y aunque mi alma quisiera regarla con mis sueños,
las llaves que necesito se disuelven en mis dedos,
como niebla que se desvanece antes de ser tocada.Soy el río que fluye hacia el mar que nunca me acogerá,
y tú, una montaña enraizada en otro mundo,
inalterable, imponente, imposible de escalar.
Así que dejo de luchar contra la marea que nos separa,
porque sé que tu tierra y la mía nunca se encontrarán.
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Otros escritos
RandomEsos escritos, que nacen sin motivo, son solo escritos sin rima, escritos no canción, escritos que salen de algún corazón.