Pansmione: Tuya

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Hermione suspiró, "P-Pansy", dijo, mientras sentía a la chica jugar con sus pechos.

La pelinegra sonrió mientras aún besaba, chupaba y mordía el busto de la Gryffindor, quien se dedicaba a gemir, haciendo que la sonrisa de la chica fuera aún más grande.

"Espera, ah, no dejes marcas", Hermione ocultando su sonrojo con su cabello.

La chica se detuvo ante el comentario de su Gryffindor.

"¿Por qué no quieres que te deje marcas?", preguntó Pansy, quien no se detenía recorriendo el cuerpo de la otra chica con sus manos, "¿ese idiota te ha tocado?". Esta dejó de tocarla y sus manos subieron a sus mejillas para obligarla a verla.

Hermione la vio con sorpresa. No esperaba que la Slytherin reaccionara así. La chica de mayor altura sabía que no podía reclamarle al final, Ronald Weasley era el novio de la castaña, pero le provocaba enojo solo pensarlo. El solo pensar que el pelirrojo la viera como ella la estaba viendo en este momento la enojaba. Le enojaba que él pudiera ver el sonrojo que tenía la castaña cuando tocabas una zona sensible, le enojaba que él pudiera escuchar sus gemidos de placer, le enojaba que él la besara... que la tocara.

"Hermione", sin que ella quisiera, su voz sonó fría.

"No, nadie más que tú", se apresuró a decir la castaña, mirándola avergonzada.

La pelinegra sonrió, "Y solo yo lo haré, ¿entendido?". Su tono sonó más como una orden.

Hermione asintió, recordando lo que Harry le dijo cuando el pelinegro empezó a andar con Draco Malfoy: "Los Slytherin son celosos, pero sobre todo posesivos, así que ten cuidado con Parkinson".

"Dilo", ordenó la chica, bajando sus manos hasta la cintura de Hermione.

"S-soy solo tuya, Pansy", Hermione enredando sus piernas en la cintura de Pansy cuando esta la levantó.

"Terminarás con él", le susurró al oído, "y luego serás mía".

La castaña tragó saliva nerviosa, "Ron..."

"Me vale mierda lo que diga", dijo, besando el cuello de esta, dejando marcas.

"Aaah, bien, lo haré en cuanto lo vea".

"Lo harás mañana, ya que en lo restante del día te quedarás conmigo", dijo bajando sus manos hasta meterlas en la falda mal puesta de la más baja.

"Mmm, Pansy, aaah, aún tenemos clases aaah".

"No me importa".

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