Auror

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Los aurores miraban divertido a Scorpius que hacia sonrisas y saludaba a las camaras que los fotografian junto a la ministra.

- oye Malfoy - dice Blaise - ¿Crees que Scorpius sepa que sucede?

- no lo sabe, pero le gustan las fotografías - dice el rubio.

- ¿No te molesta que vaya a salir en todos los periódicos? A mi a decir verdad me molesta que me fotografien con mis pequeños en la calle - dice Harry.

- ¿Tendria que molestarme? - dice Draco - es bueno que la gente sepa que los Malfoy somos hermosos - Blaise lo mira con burla

- ¿Vas a aceptar el trabajo? - Draco lo mira.

- Pottah, ofrecerme trabajo por cuidar a mi mujer es lo mas estúpido que haz hecho en la vida - Harry lo mira - pero me alaga, saber que me consideras para eso, ya que nadie la va a cuidar mejor que yo.

- exacto - dice Harry - y por lo menos sabre siempre que no estará en peligro de que la traicionen si no puedo ir como escolta - Draco lo mira - esta bien Pottah, acepto tu trabajo pero no quiero estar todo el día al lado de mi mujer, le quitará lo divertido al matrimonio.

- no entiendo - dice Harry.

- voy a volver a ser auror como querias, voy a salir con ella a las misiones pero me niego a seguirla todo el dia Potter, amo a mi mujer pero no quiero que mi relación fracase por tu culpa.

- ¿Pero si vas a volver? - pregunta Harry

- no tengo nada mas divertido que hacer - se encoge de hombros - aparte, ver a Hermione durante el dia, aunque sea de lejos me va a gustar.

- podrias tenerla de cerca.

- ya te dije que no Pottah - rodea los ojos - trabajar con ella es divertido, pero ella en sus asuntos y yo en los míos, verla y seguirla a todos lados seria estresante en nuestra relación, por que no tendriamos un respiró del otro. Terminaría matando todo.

Hermione terminó de dar su entrevista, ella le hizo señas a los aurores, ellos la siguieron en silencio, mientras Scorpius esta vez se aferraba a su cuello y saludaba con sus pequeñas manos a todos las personas que saludan a la castaña.
El niño pensaba en su pequeña mente que la gente en el mundo es muy amable, no como escucho una vez a su abuelo decir, que la gente odiaba a los Malfoy. Scorpius no logra comprender aún que en realidad todos lo saludan por que su madre es la mujer mas importante del mundo magico, para el la castaña es solo su madre.

- Hola Madame Malkim - dice Hermione - aqui le traigo al resto de mis aurores para que les tome las medidas.

- Gracias Ministra.

- mami yo tamien quiedo un taje - dice Scorpius mirando como miden a Blaise.

- claro, papi le pagará a Madame Malkim a aparte para que te haga un traje igual a los aurores.

- ¿Si papi?

- claro, mami ya hablo - dice cargandolo

- quiedo a mami - le estira los brazos a Hermione.

- deja a mami descansar Scorp, luego vas con ella ¿Si?

- mien - dice mordiendo suavemente la quijada del rubio.

- no se como a Malfoy no le duele - dice Blaise.

- no lo muerde en realidad - dice Hermione acariciando el cabello del pequeño - son como pequeños besos estilo scorp.

Draco tomo de la cintura a Hermione y ella se acurrucó en el pecho de Draco, posando al igual que el pequeño su cabeza en el pecho del hombre, ella fue acariciada en el rostro por las pequeñas manos de su hijo y le sonrió.
Cuando los aurores estuvieron listos y la mujer tomó las medidas de Scorpius, le tocó a la castaña. Draco miraba fijamente como ella era medida, disfrutaba de verla reirse al sentir las cosquillas.

- listo, la semana que viene estaran los uniformes.

- gracias madame Malkim, de verdad lamentó que fuese todo tan rapido.

- no es nada ministra, para mi es un placer que me considerase para esto.

- venga por aqui - dice Theo ayudandole a salir - la acompañare a la salida.

- bueno, ¿Vamos Hermione? - dice Draco al ver a Scorpius corriendo en la punta de sus pies, haciendo circulos.

- si vamos, nos podemos ir mediante la red flu - mira a los chicos, Potter, mañana trae a Pansy aqui - el asiente - y a ustedes tambien los quiero aquí. - dice mirando a los ex amigos del rubio.

- Scorp, nos vamos - dice Draco

- si papi - dice y mira a los adultos - adios tio Pottah, adios tio monstuo, adios tio pocholate, adios tio teothodo.

- Scorp, ellos no son tus tios - dice Draco y todos lo miran.

- si pedo dices siempe que pedo decidle a tus amibos tios.

- ellos no son mi amigos Scorp - lo carga - ven vamos.

- adiós chicos.

- adios mione - dicen todos y ella los mira y sale cargando la mochila del pequeño.

Ellos se fueron mediante la Red flu hasta la mansión, al llegar lo primero que vieron fue a Crookshanks dormido sobre el regazo de Lucius Malfoy que leía tranquilo, mientras Narcisa a su lado bordaba algo escuchando música clasica.

La paz de la pareja acabo cuando Scorpius salió corriendo y gritando por la sala, al encontrar su rana de juguete favorita. Mientras la joven pareja se sentaba a charlar con los padres del rubio respecto a la boda y los invitados.

A las 10 de la noche, Draco miraba a Hermione arropar al pequeño luego de la cena y el baño con agua tibia. Los dos cantaban la canción para dormir que le enseño ella. Se arrodillo junto a la cama y beso su cabeza, mientras acariciaba dl cabello ondulado del pequeño.

- mami, Hoy fue muy divetido - dice el pequeño - tuve amibos nevos y tamien hice una pocion de vedad, y voy a sed audod pomo papi, pada potegedte y que vivas pada siempe ponmigo

- claro que si - le sonríe y besa su cabeza - ahora es hora de cerrar esos hermosos ojitos y descansar.

El pequeño abrazo a Crookshanks, pronto se durmió y Hermione lo beso en su cabeza, dejo hechizos para iluminar su habitación. Draco entro a la habitación, beso al pequeño y se fue atras de la castaña, quien ya estaba cambiada con la camisa que traía el en el día.

- no me dijiste para que te quería Harry - dice ella y el se acuesta entre sus piernas, descansando su espalda en el pecho de ella.

- quería que volviera a los aurores - ella acaricia su pecho y besa su mejilla - pero como escolta personal tuyo, todo el dia.

- ¿Escolta mío? ¿Y que ellos no pueden o que?

- al parecer Potter cree que no confias lo suficientemente en ellos para ser tus escoltas - besa las manos de Hermione - asi que acepté volver a ser auror, pero no tu escolta personal - Hermione se sonríe - a menos que salgas del ministerio.

- eso me parece perfecto - ella besa su cabeza - seria muy monótono tener que estar tanto juntos.

- lo se, eso pensé yo - se voltea y la mira - estresante, le quitaria la diversión a nuestro matrimonio - la besa - se podria confundir trabajo y sentimientos - besa su cuello- y no quiero jamás en la vida tener que alejarme de ti por culpa de nuestro trabajo.

- yo tampoco quiero alejarme de ti amor - lo besa - eres mi vida, tu y nuestros pequeño - le susurra ella.

- te amo - contesta el.

- te amo - responde ella.

Draco beso los labios de Hermione, era un beso tierno y suave. Sus manos se aferran a la cintura de la castaña con fuerza, mientras que su lengua disfruta de saborear la de la castaña. Los labios de Hermione abandonaron los de Draco para besar el cuello de él, disfrutando de los gemidos del rubio, que se encuentra entretenido besando su cuello, mientras desabotona la camisa de él, que cubre el cuerpo de su amada castaña. Los dos lo deseaban, anhelan el cuerpo del otro, y volver a entregarse a los placeres carnales.

Por El Meñique (Dramione) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora