En shock

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- ¿Embarazada? No… no puede ser… ¿cómo? — mi mente está en caos, tratando de conectar los puntos.

La realidad del que estoy embarazo, me golpea con una fuerza abrumadora, y no puedo evitar sentirme perdida y asustada.

-Sí, lo descubrimos cuando te trajeron aquí. Es algo con lo que tendremos que lidiar ahora.
Lo más importante es que te cuides y sigas las indicaciones médicas para protegerte a ti y al bebé.

Me siento completamente desorientada y aterrorizada. La idea de estar embarazada, la cual ni siquiera sospechaba, me deja atónita.

Mi cuerpo y mi mente están en guerra, incapaces de aceptar la realidad que se me presenta.

-No sé qué hacer, mamá… esto es demasiado… —mi voz se quiebra mientras me esfuerzo por comprender la magnitud de la situación.

-Lo sé, cariño. Pero no estás sola. Estamos aquí para ti, y haremos todo lo posible para asegurarnos de que recibas el mejor cuidado. Necesitas descansar y seguir las recomendaciones de los médicos. Todo saldrá bien, lo prometo.

Las palabras de mamá me ofrecen un pequeño consuelo, pero el miedo y la confusión todavía pesan sobre mí.

Me dejo llevar por el cansancio y cierro los ojos, tratando de asimilar todo lo que acaba de suceder mientras mi madre permanece a mi lado, dándome un abrazo reconfortante.

La palabra resonó como un eco en su mente. Embarazada. Pero justo en el momento en que esa palabra debía haberla golpeado con toda su fuerza, todo el ruido a su alrededor se apagó.

Molly seguía hablando, lo sabía, pero  ya no podía escucharla. La voz de mi madre se volvía lejana, como si estuviera siendo arrastrada por una corriente distante.

Mis ojos se quedaron fijos en un punto vacío, perdidos en un espacio que no estaba ni en la habitación, ni en el hospital, ni en ningún lugar que conociera.

Mi respiración se volvió superficial, y una especie de zumbido comenzó a llenar mis oídos. No había palabras, no había reacciones, solo un vacío ensordecedor.

En mi mente, trataba de procesar lo que acababa de oír, pero era como si mi cerebro se negara a aceptar lo que mi madre acababa de decir que estoy Embarazada.

¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué no me di cuenta? ¿En que momento sucedió?

Las preguntas rebotaban en mi cabeza sin encontrar una respuesta, pero nada de eso parecía real.

Era como si la realidad misma estuviera desmoronándose.

sento mi corazón acelerarse, pero al mismo tiempo todo mi cuerpo parecía congelado.

De repente, siento una desconexión absoluta, como si la yo que estaba en la la cama del hospital con Molly no fuera realmente yo.

Como si estuviera observando a alguien más, una chica a la que le acababan de dar la noticia más inesperada de su vida.

Mamá, preocupada por el silencio,me toma de la mano suavemente, intentando captar mi atención. Pero simplemente no reaccionó.

Ni siquiera sintio el toque de mi propia madre.

Las lágrimas comenzaron a acumularse en mis ojos, no por las palabras, sino por la sensación abrumadora de pérdida, como si algo dentro de mi hubiera cambiado para siempre sin que, sin que yo  pudiera detenerlo.

No sabía cuánto tiempo había pasado, ni qué más le había dicho mamá.

Solo sabía que, en ese momento, mi vida acababa de dar un giro inesperado, y no estoy lista para enfrentarlo.

No me dejes, ginny...(hanny)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora