La Mascara del amor.

EL COMIENZO DE UNA HISTORIA

un gran suspiro lleno de alivio fue emitido por el gemelo mayor al ver a sus hermanos regresar a lo lejos, logrando hacerlo sonreír para apresurarse  a ir a su lado.

- mis hermanos, ¡están bien!, gracias dioses, ¿por que tardaron tanto en regresar?

cuestiono al verlos regresar, acercándose a ambos, borrando un poco su sonrisa al ver al de cabellos celestes bajar del caballo molesto,  sumamente lastimado, pasándolo de lado, 

-¿Qué fue lo que paso?

cuestiono de nuevo, siendo evitado por el de cabellos celestes, quien discretamente tocaba  con su mano su costilla intentando disimular su dolor. 

-Kanon adopto una mascota o tal vez dos, me da igual

Respondió molesto ignorando todo, caminando erguido hacia alguien que curara sus heridas.

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-Entonces eso fue lo que paso, como vez hermano independiente a todo solo son dos omegas en peligro, no puedo dejarlos a su suerte y menos cuando afrodita  lastimo tanto a uno de ellos.

explicaba Kanon, viendo como el mencionando lucia molesto, chasqueando los labios al escuchar lo que decía, cruzándose de brazos   desviando la mirada, viendo desde lejos como aquel guerrero con el que había peleado, era atendido por el medico del lugar, mismo quien le brindaba una sonrisa, la cual el albino respondía de manera un tanto coqueta, causándole un gran enojo que no lograba comprender. 

- por favor saga, dile que es una estupidez y no permitas que haga esto, puede ser alguna trampa o algo similar, no puedes dejar que cometa tremenda tontearía, deberíamos de matarlos y ya, son enemigos, sean omegas o no, actué como debía hacerlo.

Esta vez fue Afrodita quien tomo la palabra, acercándose a saga, quien simplemente analizaba la situación.

-No te exasperes afrodita, entiendo tu punto, pero si los reuní a ustedes dos, es por que quería la versión de ambos.

Saga ciertamente estaba sorprendido por la situación no era normal de su hermano actuar de aquella manera, tan despreocupada trayendo al propio enemigo dentro de sus fronteras, pero podía ver en los ojos de su hermano menor  un preocupación inmensa por el que el llamaba a Radamanthys, el tono de su voz reflejaba una verdad tan grande que le hacia totalmente feliz, aun que actuaria imparcial, tenia que hacerlo.

-Si ya terminaron de atender a aquellos dos, por favor tráiganlos.

Ordeno y eso hicieron, llevando a todos a un salón aparte, sentándose frente suyo para poder analizarlos con mayor detenimiento.

-Tanto kanon como afrodita me han contando su versión de lo sucedido, no logró comprender algunas cosas, asi que si no es molestia ¿podrían explicarlas ustedes? Solo asi podre saber si concederles el asilo o no y bajo que términos.

Fue el rubio quien asintió con la cabeza, escuchando firmemente al gemelo mayor, entendiendo totalmente su dudas.

-Bueno, no me gustaría mentirle, es hasta cierto punto verdad que el objetivo de nuestro comandante era que entráramos aqui,como espías.

-Vez, te lo dije - interrumpió el de cabellos celestes- deberíamos de matarlos, acabar  con esto ya,  ya tengo hambre.

-Pero - continuo continuo el rubio- fue el como querían que cumpliéramos la misión lo que llevo a revelarnos, siendo sincero, esto fue mas una excusa para poder marcarnos, no se si lo sepa, pero para nuestro reino un omega de nuestra edad que no ha parido y no ha tenido un alfa, termina en los burdeles, el rey esta obsesionado con que la natalidad aumente sin importarle las consecuencias, es verdad también que al llegar cierta edad nos dan la opción de pelear o ir directo al distrito rojo, pero elegir la primera opción no es precisamente algo bueno, a diario podemos ver como los Alfas de nuestro propio ejercito usan a los soldados omegas para satisfacerse, preñándolos de  diferentes alfas, es algo natural para nosotros, sin embargo en el caso de Deathmask como mío no ha sido exactamente lo que ellos buscan y eso ha causado bastantes molestias, asi que, bueno es especulación mía, pero siento que armaron todo esto solamente para que pudieran debilitarnos y por fin reclamarnos pero claramente si no nos humillaban primero no estarían contentos ,fin al cabo tenían que enseñarnos nuestro valor, asi que simplemente preferimos darle la espalda a aquellos que nunca cuidaron de nosotros, no le miento, es la verdad, entendemos su desconfianza e incluso entenderíamos si no quiere darnos asilo.