Sumisión ¿involuntaria?

tentación

*la orejóna aúnque intimidante en su mirar también emanaba un aura de nervios y se le notaba, detras de la cara de lujuria y advertencia que queria imponer a su pequeño maestro sentía nervios y culpa que incluso la hacian temblar un poco aunque claro la picardía y la curiosidad le ganaban por mas inponente que se hiciera ser pasar hasta Eliot en su ridícula situación veia que a Judith le costaba un poco mantener el personaje, lo cual quiza era solo mas vergonzoso pues el mero tamaño colosal de la coneja era lo unico que evitaba que Eliot detuviera su perverso juego*

Eliot: bien, bien tu tu ganas Judi >.<, no no te castigó pe pero por favor a adyudame si?

*Simplemente estaba desesperado, habia pasado por tanto a este punto que ya nisiquiera queria estar enojado con sus Pokémon, solo quería recuperar su tamaño y dejar de ser usado como trapo sexual aúnque claro que ya habia pasado por su mente lo incómodas que serían de ahora en adelante las interacciones con todos y como no?, como olvidarás la vez que masturbaste a quien se supone esta a tu cargo con las patas, nalgas o te lo restregaste por las bolas?*

Judith: cin Cinderace (q quiza mas tarde amo~)
Eliot: qwq, porque algo me dice que fue un no, e ey!, no!, no no, no toques alli!, ahhg~, Judith!~,, hmgg!

*Esta acerco su otra pata al cuerpo inmóvil del entrenador, entre jugueteos y quejidos de Eliot Judith lo presiono y aplasto un poco amasando a su querido maestro con sus patas las cuales ya parecían hornos humeantes y densos, con toda la intensión esta avances pasaba sus dedos regordetes en especial el gordo sobre el pequeño pene de su entrenador, haciendolo gemir y gritar por piedad por mas que tratara de mantener su posición y dignidad su cuerpo como durante toda si aventura le jugaba chueco, su duro miembro pedía y pedia mas mientras sus mejillas parecían que se caerian o quedarian entumidas por la vergüenza, esta siendo brutalmente denigrado por los que se supone son sus compañeros/mascotas y de algún modo lo esta disfrutando*

Eliot: ahg, ahgg, noo!, noooh, ohhhh~ >~<

*Entre los bruscos aunque placenteros y muy culposos movimientos Eliot terminó atorado debajo de la hilera bajo los dedos de Judith, por un momento esta alejo su otra pata pues ya no había nada que acariciar, Eliot habia acabado de espaldas con su cara boca abajo y casi todo su cuerpo hundido y cubierto por las enormes colinas calientes que eran los simples dedos de su Pokémon*

Eliot: hmgg!

Judith: derrrr~, (maestro~}

*Como si no fuera suficiente con la vergüenza solamente algo sobresalía de entre los dedos de Judith visible desde arriba, el pene duro y rojo de Eliot ahora a total  merced de una coenja que ardía de placer está ni siquiera tardo en comenzar a frotar sua dedos mientras alzaba un poco su pata la cual mantenía cautivo a Eliot con el mero apretón que el resto de sus dedos y almohadillas ejercían, este sentía los masivos, humedos pero eróticos roses que los dedos gigantes de la Pokémon hacian aplastando al punto de casi exprimir a la fuerza el pene de su amo*

Eliot: ahgg, ahhh!, AHHH!~

*sus gemidos fueron ahogados y silenciados a la fuerza por los colosales dedos contra los que Eliot tenia sometida su cara y parte frontal del cuerpo, apenas y podia gritar o en su defecto gemir, sentia el sudor salado y fuerte de Judith entrar en su boca, tenia prácticamente que besar a la fuerza las sudadas patas de su compañera si no queria ahogarse, simplemente era patético y habia algo en eso que a Judith le gustaba, claro que aún respetaba a su entrenador pero no queria dejar de aprovechar esta oportunidad tanto que entre los movimientos bruscos y mientras Eliot estaba cerca del orgasmo comenzó a escuchar unos ruidos algo raros entre las patas masivas de Judith que insonorizaban un poco el ambiente*

Eliot: hmgg!?

*Por un momento los dedos de Judith se separaron, Eliot penso que quiza al fin se iba a resignar pero lo que vio lo hizo sentir aún las miserable aúnque algo alargado y por mas que odiaba admitirlo Horny, su Pokémon estaba acariciandose y tocandose con su denigrante situación, pronto entendido que ese leve estirón solo era un spasmo pues al poco tiempo los dedos se compactaron de nuevo pero esta vez mucho mas fuerte que antes, casi sintio su cuerpo coverse y ser moldeado por esas masivas almohadillas de coneja, la situación se repitió un par de veces entre los sonidos perversos e intensos que Judith generaba*