¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lyney: Damas y caballeros… con esto concluye mi presentación inaugural”, -dijo, haciendo una reverencia al público- Ahora, sin más preámbulos… podemos proceder al juicio de nuestro dios.
Furina se paró en medio del escenario. Su anterior sorpresa dio paso a una expresión indescifrable que ocultaba su furia hirviente. Miró a la gente, en algunos de los cuales creía que podía confiar. Levantó la cabeza y vio a Neuvillette mirándola imperiosamente. Sus ojos se abrieron ligeramente cuando ella le devolvió la mirada.
Furina: Ah, así que es así. Sí... Te mereces elogios por el esfuerzo que hiciste para aumentar el dramatismo -dijo ella, sacudiendo la cabeza y mirando con disgusto al Viajero- Supongo que toda esa simpatía no eran más que mentiras y manipulación. Como era de esperar de alguien que se pone del lado de los Fatui.
Lumine giró la cabeza con un poco de vergüenza antes de volverse para encarar al gobernante de Fontaine. Miro a su prima que estaba al lado del escenario que la miraba con un negación en su rostro.
Lumine: Tu inacción nos ha obligado a actuar, Furina -dijo, ganándose murmullos de aprobación de la multitud-
Furina: Hmph, realmente debería haberme ocupado de ti, entrometida en el momento en que entraste en Fontaine. Tu que crees Lathi -espetó Furina, y miro a Lathi a lo cual frunció la ceja, el haciendo que todo el salón se quedara mirando incrédulo su lenguaje. Suspiró con resignación- Pero puedo ver cómo se veía eso. Lo siento, todos. No pude proteger a la gente de Poisson... Es mi deber ser juzgada por mis crímenes. No son los únicos que están decepcionados de mí. Yo también estoy extremadamente decepcionada de mí misma -dijo con la mayor sinceridad, y la fiscalía sintió que tenía la oportunidad de hacerlo sin dolor-
Pero ella destruyó esos pensamientos con sus siguientes palabras:
Furina: Lamentablemente, no puedo permitir que tu ignorancia y desesperación arruinen cinco siglos de trabajo.
Paimon: ¿Qué? -preguntó Paimon con su voz estridente-
Furina desestimó su pregunta.
Furina: ¿Qué tal si respondes mi pregunta primero? ¿Cómo lograste todo esto?"
La fiscalía procedió a explicar todo: cómo Navia utilizó a Spina para incitar a una turba a que la llevara a la casa que era una caja mágica hecha por los Fatui, y cómo Lumine intentó que ella revelara sus secretos como último recurso para evitar el juicio.
Furina: Ya veo. Mis felicitaciones por tu trabajo -dijo una vez que terminaron- Recordaré todo esto para cuando termine esta farsa. Solo avancemos rápidamente hasta la parte donde la fiscalía expone mis delitos. Como acusada y actriz principal en esta actuación, aún no me han informado de mi supuesta culpabilidad en todo esto. Por supuesto, es natural que los humanos tengan dificultades para comprender las acciones de un dios. Sin embargo, necesitarán más que eso para condenarme por un crimen...
