•°THE BLOOD DRAGON《 HOTD🐉| DAEMON TARGARYEN

(005) "Había Una Vez Una Princesa En Un Castillo Pt Final"

"—Yo no te gesté ni tampoco te di a luz pero te amamante, te bañé y te arrullé, te amo como si fueras carne de mi carne Aemmyra y nada cambiará eso—."

°~

La oscuridad de la noche se cernia sobre la ciudad, en lo alto la luna y en lo bajo el brillo del comercio y la vida nocturna, los burdeles abiertos de par en par, con mujeres semi desnudas en la entradas, ofreciendo sus servicios de placer a cambio de una paga qué satisfaciera a sus jefes.

El bullicio de ese lugar era muy diferente al ambiente del castillo, misma ciudad pero una brecha de realidad.

En el castillo solo se escuchaba el ruido de los guardias haciendo sus rondas de custodia por los desolado pasillos, bueno, casi desolados porque entre hurtadillas torpes iba el príncipe, ocultando su presencia, si alguien lo veía el plan que había ejecutado esa noche se vería en riesgo, era importante que su precencia allí fuera de completa ignorancia para todos pero le resultaba algo difícil dado el estado en el que se encontraba, se había tomado algunas copas demás antes de recordar su compromiso, por lo que ahora iba un poco borracho.

El peli blanco, con la vista un poco borrosa, se acercó a una puerta desgastada qué allí había, entró, cruzó la habitación, una vieja bodega, se detuvo un momento a medio camino para admirar un tapiz medio descubierto colgado qué antes no estaba, le resultaba familiar, ya se le había comunicado vagamente la llegada de nuevos tapizes así que supuso qué allí habían parado los antiguos, se encojio de hombros para luego continuar su camino.

Golpeó con fuerza detrás de un mueble en la esquina más alejada y cuando la pared cedió, se metió dentro, inhalando despacio para evitar respirar el olor a humedad qué siempre lo recibía.

Luego de caminar varios metros y girar varias veces luego de casi desorientarse por fin llegó a su destino, la habitación de su sobrina, espero unos segundos antes de entrar, atento a cada mínimo sonido que le diera un indicio de si estaba sola o en compañía de alguien.

Cuando no escucho más que silencio se decidió a entrar.

Traspasando la pared, Daemon barrio rápidamente la habitación con sus ojos, buscando a su sobrina, ya se había vuelto rutina para ambos, Daemon al principio solo quería saciar su curiosidad sobre la niña menor de su Hermano pero para su sorpresa le había comenzado a tener más afecto del previsto, ella por su parte apreciaba la atención que le daba su tío y el interés que mostraba por mantener una charla e intereses con ella

La encontró donde siempre la hallaba en su habitación, sobre el sillón de una esquina, a un lado de una mesita de té donde siempre compartían su tiempo juntos, solo que a diferencia de las demás noches ella no se encontraba despierta, al parecer Daemon se había tardado más de lo previsto por lo que la niña se había dormido esperando su llegada.

Y por la poca cera que le quedaba a la vela sobre la mesa supuso qué fue mucho tiempo.

Dormida profundamente y recostada sobre su brazo ligeramente alzado sobre su cabeza, vestida solo con su pijama, temblaba ligeramente.

Tiene frío se susurro a si mismo.

Se acercó despacio a la cama, donde recogió una de las mantas que Aemma usaba para dormir y la tendió suvamente sobre ella, para arroparla, se agachó a su altura para cubrir el brazo descubierto de la niña cuando algo le llamó la atención, algo que le helo la sangre y le bajó de golpe la borrachera.

Una cicatriz, tomó rápidamente la vela sobre la mesa y la acercó a la piel descubierta, donde pudo observar con mayor claridad, la cicatriz era grande y a pesar de que ahora se veía sana, se notaba que en el pasado fue una horrible quemadura, Daemon más inquieto observó con mayor atención la piel expuesta de la niña, se encontró con algo que no había notado , más cicatrices, pequeñas y otras más grandes, algunas viejas y otras más recientes, de cortes, rasguños, destapó ligeramente los pies de la niña donde el camisón de pijama estaba enrollado hasta sus rodillas, más cicatrices, en sus tobillos dos marcas, como si hubiera sido atada de ellos hasta que su piel se desgarró , Daemon comenzaba a sentir fuego e ira subiendo a su cabeza, se tomó unos segundos para respirar lentamente y cuando creyó que se estaba calmando su sobrina se removió en su lugar atrayendo su atención.
Susurraba algo no inteligible, se acerco para escuchar más claro.