Un chico joven reencarna en uno de los personajes que más ODIA del manga y animé de MHA o BNHA. Ahora con una nueva vida, abrirá nuevos caminos y sellará heridas del pasado buscando ser alguien que ha cambiado para bien,¿la historia cambiará tras es...
— ¿Tienes todo listo Katsuki? — Me preguntó Mitsuki Bakugo mientras preparaba mi mochila y asegurándome que nada se me quede en la casa. Ya que,por cómo habrán adivinado,es mi primer día en la U.A.
— Si ma,tengo todo listo. — Decía terminando de cerrar la mochila y ponerla en mi espalda. — Tengo mi lapiz,mis lapiceros,mi sacapuntas, borrador,regla ,libros y cuadernos. Hasta tengo mi pañuelo,por si acaso. — Le expliqué sabiendo que ella iba a preguntarme más cosas. — Ah,y tengo mi agua con hielo. — Tomé el termo que desprendía aire frío,aunque no era muy visible.
— ¿Y tú celular? —
— En el bolsillo de mi pantalón.—
— ¿Dinero para tu almuerzo y los pasajes? —
— En mi otro bolsillo. —
— Bien, solo falta una cosa. — Me dice con una dulce sonrisa en su rostro mientras se acercaba a mi,lleva sus manos a la corbata y la arregla un poco. — Listo,eso es todo. Puedes irte —
— Muy bien — Digo asintiendo y mirándome en el espejo de la casa.
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Lo admito,Katsuki si es guapo,¡Alto,alto,no soy gay! Es una opinión a medias,y como decía, podrá ser guapo,pero su actitud canon deja mucho que desear. Si tuviera una actitud más o menos decente,no tendría mi odio completo al personaje.
Pero bueno,me medio peiné y procedí a caminar hasta la puerta para irme a la U.A.
— ¡Ah! Katsuki — Dijo Mitsuki de repente a mis espaldas.
— ¿Mande? — Volteo a verla con curiosidad.
— Que te vaya bien en la escuela. — Me sonríe de manera radiante.
Solté un bufido de risa,sonriendo de medio lado. — Gracias mamá, nos vemos — Finalmente abrí la puerta para irme.
Bueno, finalmente salí de la casa. El trayecto de la U.A. es algo largo,por lo que tenía que tomar un tren para por lo menos estar cerca de la U.A.
Llegué a la estación del tren para esperar el dichoso transporte,no esperé mucho ya que llegó casi inmediato,me fui corriendo y me monté con el maletín en mi pecho,no podía evitarlo,mis costumbres latinas corrían por mi cerebro y me gritaba a full potencia de que alguien me iba a robar,hasta puse mi celular en el maletín.
Después del largo trayecto, salí a una de las estaciones y fui caminando mientras sacaba mi celular y ví la hora,eran 8:05 AM. Las clases comienzan a las 8:30, así que no tengo mucha prisa.
