¿FLECHADO?

156 28 14
                                    


┌────── ∘°❉°∘ ──────┐
└────── °∘❉∘° ──────┘

El día pasó de prisa. Carlos había regresado a su departamento para hablar con Alonso, uno de los abogados de la familia para hacer todo el contrato con Charles.

Después del hospital, le había dado contexto a Alonso en el que explicaba la situación y por qué lo hacía. El hombre lo había aturdido con su risa creyendo que bromeaba, por supuesto que Calros le explicó que no lo era y solo quería quitarse a su padre de encima para poder volver a su vida de desenfreno sin molestia alguna.

Preparó dos vasos de Ron listo para esclarecer los puntos con su compatriota —El whisky se terminó —exclamó el más joven dejando uno sobre el porta vasos frente a Alonso.

—No te preocupes —sonrió correspondiendo —¿Entonces quieres que establezca una duración?

—¿Tres meses te parece prudente?

—Honestamente toda esta situación no me parece prudente, pero si, es lo mejor.

—Es por un bien común —respondió dando un sorbo al vaso sentándose frente a Fernando —y adjunta esto.

Extendió una hoja con lo que le había pedido Charles; generales sobre lo básico que debía saber sobre Carlos. Su comida favorita, lo bien que hacía panqueques esponjosos y su obsesión con el fútbol.

—Creo que te estás tomando esto demasiado en serio —Fernando reía al dar un vistazo a la hoja entre sus manos —No me mal interpretes, amigo, pero esto me parece absurdo.

—Solo apóyame con el contrato, por favor.

Rodó los ojos mientras tomaba los papeles y se levantaba del sillón —espero y después no te arrepientas de esto.

—¿Por qué lo haría?

—He visto esa mirada antes —exclamó tranquilo —ese joven es terreno peligroso.

—Si lo dices por lo que sucedió con Sergio...

—No —lo interrumpió —es peligroso para ti y créeme que no me gustaría tener que extender el contrato por más tiempo.

—Espera —rió incrédulo —¿Crees que yo...? —volvió a reír.

—Solo cuídate; Carlos.

El más joven no paraba de reír —escúchate —volvió a tomar asiento —¿insinúas que yo me estoy flechando por ese Niño?

—No quiero presuponer nada, pero conozco esa mirada —el hombre igual volvió a tomar asiento —y era lo mismo cuando estaba ella...

—Suficiente —cortó la conversación tajantemente borrando la sonrisa de su rostro —ese tema no se toca.

—Mi recomendación como tú amigo es que tomes tus precauciones y cortes esta farsa antes de que empiece —se levantó —aunque no lo quieras ver, este individuo hará de tu vida un verdadero dolor de huevos.

—No es de esos.

—No digo que lo sea; es más, no creo que te esté jodiendo en cada momento; siento que te joderás tu solo.

—Otra vez exagerando —tomó las carpetas que descansaban sobre la mesa —llévate esto y mañana me das el contrato.

—Solo te lo advierto; conozco al Carlos enamorado y sé que es un peligro para todos; para si mismo —fernando recibió las carpetas llevándolas a un costado de su cadera —recuerda uno cae primero y el segundo cae más fuerte; tú —lo apuntó —jamás has sido de caer primero. Buena noche.

DISARTRIA | CHARLOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora