Confesiones

1.2K 141 11
                                    

Jimin podía sentir que su cabeza explotaría en cualquier momento, como diablos fue a beber de esa manera, bueno en cierta parte le hacía falta.

Con mucha pesadez salió de su cama, el dolor de cabeza solo parecía ir en aumento al percibir la claridad del día.

La resaca es horrible.

Paso por la sala con rumbo hacia la cocina en busca de un vaso de agua y alguna pastilla que le ayudará con el dolor. Tenía leves recuerdos de lo sucedido anoche, con un gran bocado de agua se trago la pastilla, no debía pasar mucho para que hiciera efecto.

Camino de vuelta a la sala y se sentó en el sillón, todo estaba en silencio, sentado ahí recordó la noche anterior, sus ojos se abrieron demasiado al recordar el casi beso con Yoongi, se golpeó mentalmente por semejante imprudencia. Con sus dedos tocó sus labios rememorando el roce que tuvieron con los de su amigo.

—Ay no, —tiro de su cabello recordando que le conto a Yoongi su pasado en Corea, debió de verse como un patético llorando a moco tendido al contar su triste experiencia.

Después de esto sin duda descartaría la idea de beber algún día.

Unos toques en la puerta lo sacaron de su auto sermón, no tenia idea de quien podría ser así que a paso lento camino hasta la entrada abrió la puerta y se avergonzo al vet a Min Yoongi del otro lado sosteniendo una bolsa.

—Pequeño Jimin, buenos días, —saludo. —Espero la resaca no te este matando porque de ser así aquí traígo sopa y unos cuantos analgésicos.

Jimin sintió sus mejillas arder, no se atrevía a mirar a Yoongi a los ojos solo de recordar aquellos labios finos contra los suyos.

—Jimin, —Min llamo su nombre al verlo perdido.

—Oh lo siento, buenos días Yoon, pasa —se hizo a un lado permitiendo que su amigo ingresará, con un suspiro cerró la puerta y caminó hasta la cocina.

El pelimenta dejo la bolsa sobre el mesón y procedió a sacar la sopa que le extendió a Jimin además de un analgésico.

—Yo tome una pastilla, gracias —con timidez destapó la sopa olía delicioso así que empezó a comer, —Por cierto no te hubiese molestado en traer esto.

Yoongi nego con una sonrisa. —Era mi obligación hacerlo, después de todo fui yo quien te dijo que bebieramos,, además cuando se trata de ti nada es una molestia.

Nuevamente Jimin se sonrojo, podríamos decir que fue el vapor que salía de la sopa o el último comentario de Yoongi.

Se quedaron en silencio, Jimin comiendo y Yoongi mirándolo comer.

—Con respecto a lo de anoche, quería disculparme si te incomode, creeme que no fue mi intención, lo menos que quería era hacerte sentir mal, —se disculpo el pelimenta.

—No pasa nada, quédate tranquilo, ambos estábamos ebrios, hay que culpar al alcohol, —rio.

—Tienes razón, hee.. pero con respecto al beso. —se rasco su nuca nervioso por lo que iba a decir, Yoongi sabía que algún día debía confesar lo que sentía pero no estaba seguro si esa era la ocasión correcta o no. —Yo enserio quería besarte.

Jimin casi escupe la sopa, se atragantó levantándose a tomar un vaso con agua, no podía estar Yoongi hablando en serio.

—¿Q..qué? —logro articular.

—Voy a ser sincero de una vez o no podré dormir está noche, —aclaro su  garganta. —Jimin, tu me gustas, se que talvez podrá sonar muy acelerado pero tampoco puedo evitarlo, desde que te conocí sentí a mi corazón latir desesperadamente, se que tienes un pasado que cargas contigo pero no por eso quiero que te cierres a la idea de volver a amar de nuevo. Lo que siento por ti no es algo pasajero y no quiero que lo sea, quiero poder tomar tu mano y besar tus labios sin que huyas, decirte a cada momento lo hermosos que eres, porque eres tan hermoso que aveces pienso que no eres real, dame una oportunidad para demostrarte que puedo ser esa persona que amaras siempre, dejame ser el hombre que cuide de ti, regalame una oportunidad para enamorarte, —Jimin no sabía que decir, su cuerpo parecía haber perdido la movilidad, tan solo queria llorar.

Entre abrio sus labios pero estos solo temblaron, sus ojos empezaron a empañarse para darle paso a las lágrimas, al darse cuenta de esto Yoongi corrió hasta su lugar, tal vez fue imprudente lo que dijo, Jimin parecía no sentir nada.

—N..no puedo, te..tengo miedo, —lloro mirando a Yoongi.

—Dejame curar tu corazón.

Con esas pocas palabras Jimin se aferró al cuerpo de Yoongi llorando desconsoladamente.

Media hora después se encontraban sentados en el sillón de la sala, nadie sabía que decir, la euforia del momento había terminado.

Jimin soltó un suspiro, sus ojos estaban levemente hinchados y su nariz roja.

Si quería avanzar debía soltar el pasado.

—Hace tres años, salí de Corea porque sentí que me iba a morir —froto sus manos, empezando a contar su historia. —Jungkook fue mi novio y luego mi esposo llevábamos cinco años de casados, a mi parecer todo iba de maravilla, nos amabamos incondicionalmente, no voy a negar que los años que estuve a su lado fueron los mejores, pero todo tiene un fin y el de nosotros ya estaba escrito. —Yoongi escuchaba muy atento, —Jungkook cambio de la nada, se la pasaba de mal humor o a veces ni me hablaba, decía que era el estrés de la empresa y le creí, pero que equivocado estuve.

Yoongi arrugó su entrecejo sabia lo que Jimin estaba apunto de decir, claro estaba que de ebrio también lo dijo pero escucharlo estando sobrio era otra cosa.

—Un día salí de viaje con un amigo pero de medio camino tuvimos que volver por mi teléfono, al llegar nuevamente a casa lo encontré a el y su secretario teniendo relaciones en nuestra cama donde vivimos tantas cosas, dónde nos entregamos infinidad de veces al amor. —su voz quería quebrarse, pero respiró hondo, ya no quería llorar más, no lo valía. —Me senti tan humillado, tan idiota, me volví loco que termine golpeando a su amante pero no me arrepiento era lo menos que se merecía por hacerme eso, ese día salí de ese lugar que ahora solo se volvió un sitio extraño para mí, una promesa que tenía y tengo claro es jamás dejar que me engañen, yo amaba a Jungkook pero no por eso lo iba a perdonar.

<<Aún con mi corazón hecho pedazos me largue, deje todo eso atrás y me aisle por dos semanas donde no supe nada de nadie, quería vivir mi duelo a mi manera. Luego de ese tiempo le cite para que nos viéramos, iba decidido acabar con todo, ese día le pedí el divorcio claro esta que se nego pues estaba arrepentido pero ya era muy tarde. Desde ese día me prometí olvidarlo y es lo que voy hacer.

Sin pensarlo demasiado Yoongi abrazo a Jimin, no podía imaginarse todo el dolor y sufrimiento que debía pasar estando solo.

—Por esa misma razón te pido tiempo Yoongi, —se separó un poco para mirar al pelimenta, —mi corazón aún duele y lo que más deseo es sanar para en algún futuro poder volver a amar.

—Te esperaré todo el tiempo que sea necesario Jimin, —tomo el pequeño rostro entre sus manos y junto sus frentes, —Yo estaré junto a ti, en cada paso que des porque para poder avanzar es necesario sacar todo eso que nos atormenta y creeme cuando te digo que voy hacer hasta lo imposible por borrar toda esa mala experiencia para reemplazarla con mucho amor.

Jimin sonrió y Yoongi lo volvió a sujetar entre sus brazos. Aún nada estaba perdido, con perseverancia el se ganaría el corazón de Jimin 

Porque si tenía que enseñarle lo que es el amor desde cero, el con gusto lo haría y así ambos podrían escribir su historia de amor.

...

Atte: Jageun 💜

Voy A Olvidarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora