¿Tú otra vez?

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***

Ambos se quedaron congelados al ver que la puerta se abría de repente y, cuando la persona que entraba se hizo más visible, fueron capaces de ver al Duque Rody Soul.

"¡Ese omega de cuarta otra vez!"—Pensó Katsuki malhumorado.

—Hola, Bakugou, Midoriya. Tiempo sin verlos.—Saludó sonriendo astutamente.

El alfa se puso alerta, poniéndose por delante de su prometido para protegerlo.

—No es necesario que me protejas, Izuku. ¡Yo puedo contra él, soy más fuerte!

El mencionado se volteó y le respondió:

—Ya lo sé, Kacchan. Pero no voy a consentir que se acerque a ti.

Katsuki se ruborizó y no dijo nada. Simplemente le permitió al príncipe continuar con su cometido.

—Ja. Parece muy confiado, Príncipe Izuku.—¿Acaso piensa que soy tan estúpido como para no tener algo planeado?

El pecoso se puso en posición defensiva y dijo:

—Sí, imagino que algo tramas. Lo que sucede es que no me intimidas.

El joven de cabello castaño se enfadó y se acercó a ellos corriendo.

"No quiero pelear aquí, pero sé una manera de debilitarlo."

—Lo siento, Kacchan.—Dijo de repente.

El rubio cenizo no entendió por qué su amado había dicho eso hasta que sintió un olor a feromonas alfa proveniente de éste.

—M-Mierda, Izuku...—Murmuró Katsuki de rodillas en el suelo y excitado al percibir el olor, que de igual manera afectó a Rody

Sin embargo, a pesar de estar debilitado; el otro omega no dejaba de sonreír. Dando así a entender que tenía un as bajo la manga.

"Algo no va bien."—Pensó Midoriya.

—¿Qué planeas, Duque Soul? ¡Dilo claramente!

Éste sonrió y dijo:

—Ngh... Pronto lo vais a saber y será demasiado tarde para que podáis evitarlo.

En ese instante, la pareja se dio cuenta: El duque traía refuerzos consigo.

"¡Tengo que salir de aquí con Kacchan!"

Acto seguido, el joven de ojos verdes fue corriendo a tomar a Bakugou para alejarlo de allí.

—¡No permitan que salgan de aquí!—Gritó Rody de pronto.

"¿Qué es esto...?"—Pensó el alfa al ver que un grupo de guardias empezaban a entrar.

La situación no era buena y decidió huir. Por una puerta trasera que había.

Pero, inesperadamente, al abrir la puerta; vio que más guardias los esperaban allí.

"Tengo que enfrentarme a ellos pero Kacchan no puede estar solo después de haber liberado mis feromonas antes."

Sabía que no tenía más remedio que soltarlo, así que le dijo en voz baja:

—Kacchan, escapa. Yo me encargaré de ellos.

El marqués sabía que no podía ser de ayuda para su novio, así que le respondió:

—E-Está bien. Buena suerte, Izuku.—No se te ocurra perder.

—No te preocupes, eso no pasará.

Katsuki echó a correr tanto como le dieron las piernas sin ser del todo consciente de que estaba siendo perseguido.

"¡Tengo que llegar al castillo!"—Pensó desesperado.

Empero, tres guardias frustraron su huída.

—¡Soltadme, bastardos!—Gritó pataleando.

¡Quieto, omega!—Le dijo uno de los guardias haciendo uso de su voz alfa.

Como seguía afectado por las feromonas de Izuku, su cuerpo sucumbió y sus piernas dejaron de moverse.

—Jajaja. Después de todo, sigue siendo un omega patético.—Se burló el guardia.

—Tienes razón, no sé por qué algunos se hacen los orgullosos. Deberían simplemente aceptar que solamente sirven para que los alfas lo usemos para coger y embarazarlos.

—¡Bien dicho!—Dijo otro de ellos.

Al rubio cenizo le hervía la sangre a raíz de aquellos comentarios que aquellos imbéciles estaban haciendo a costa de los omegas.

—¡Imbéciles! ¡¿Quién sois vosotros para decir eso?!—¡Los alfas son los que se dejan llevar por su maldita polla a la hora de actuar! ¡Sois como animales en celo!

Los aludidos se molestaron y lo tiraron contra el suelo para propinarle patadas.

—¡Sucio omega!

—¡Calla, puta!

—¡Te vas a enterar, cubo de semen!

Él intentó aprovecharse de la situación para escapar mas no se lo permitían y estuvieron dándole una paliza hasta que estuvieron satisfechos.

—Reanudemos la marcha, tenemos que entregar vivo a este sujeto al duque.

—Sí, mejor. Hasta de que se colme nuestra paciencia.

Se llevaron a Bakugou consigo hasta llegar a la mansión de Rody y lo encerraron en los calabozos.

***

Mientras tanto, Izuku continuaba luchando contra alguno de los guardias que quedaban en pie. 

"Ya no puedo más... ¡Pero no puedo desmayarme aquí! ¡Tengo que encontrarme con Kacchan!"

Entonces tomó la decisión de hacer una maniobra de distracción, ésta consistía en lanzar varias piedras que encontró en el lugar, cosa que fue efectiva; ya que los hombres de Soul se retiraban.

"¡Es mi momento!"—Pensó el pecoso huyendo en dirección al castillo de su familia.

Empero, cuando llegó al castillo y preguntó por el omega, le dijeron que Katsuki no había llegado.

—¿Qué...?

El príncipe se quedó helado, ¿qué había pasado con su novio?

—No puede ser... ¡Tengo que encontrarlo!—Gritó de repente girando con la intención de salir del castillo.

Sin embargo, fue frenado por su padre.

—Hijo, entiendo que estés alterado pero debes pensar con la cabeza fría, ¿acaso sabes dónde podría estar tu prometido?

—Sí, sé quién se lo ha llevado: El Duque Rody Soul.

El rey se sorprendió y dijo:

—Bien, ya tienes una ventaja al saber ese dato pero debes trazar un plan.—No te aconsejo que vayas ahora porque la seguridad seguramente sea bastante fuerte en estos momentos. Aguarda hasta el mediodía, que es cuando los soldados y guardias estarán hambrientos a la par que agotados.

—¡Pero, padre! ¡Mi omega está allí!—¡No puedo quedarme aquí de brazos cruzados!

—¡Hazme caso y sé sensato!

Su reclamo logró que el pecoso reaccionase.

—P-Perdón, padre. Tienes razón, me dejé llevar por mis emociones.

Hisashi suspiró y le respondió:

—Tranquilo, es comprensible.—Ahora vamos a tu despacho a conversar tranquilamente sobre cómo haremos para traer a mi yerno de vuelta.

—¡Sí!

Padre e hijo fueron juntos al despacho y allí discutieron el plan.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí



¡Conquistaré al alfa! (Dekukatsu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora