Fragments of us. [ Billford ]

13. Mi musa. (NSFW)

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—Quedate justo allí.

—Eres tan divertido ¿Te lo dicen a menudo?

El tono sarcástico de Bill fue pasado por alto una vez más, Ford lo tenia de espaldas mientras apuntaba rápidamente en hojas sueltas, Su curiosidad podia mas que el mismo y esta forma solo la alimentaba más.

—¿La estática pasa por todo tu cuerpo?

La mano de el demonio subio hasta su rostro, tocando la linea a la que se refería Ford, trazandola por su cara, desde su pomulo y descendiendo por su cuello, no se veía donde terminaba, se perdia la vista con su polera.

Aun de espaldas Bill alzo los hombros y los bajo, dandole a entender que efectivamente no tenia idea de como funcionaba su "cicatriz"

—Ven.— Dijo el de cabello canoso, dejando sus hojas de anotaciones a un lado sobre la mesa.

Bill obedeció, dandose la vuelta y llegando hasta la silla de escritorio en la que se encontraba su antiguo compañero.

—Agachate solo un poco.

La estática en la piel morena de Bill vibró ligeramente iluminandose aun más cuando se inclino hacia Ford, dandole libre paso a sus manos para amazar su cara.

—¿Duele?

—No, solo duele con emociones fuertes.

—¿O sea que la controlas con tus emociones?

—No lo llamaría así, Sixer, pero es una forma fácil de decirle.

El dedo indice de Stanford recorrió su mejilla, la piel sobre su yema se sentia calida, pero cuando llegaba a la grieta parecia tocar hielo. Sus ojos inundados de curiosidad siguieron su camino hasta su cuello, bajaría más la visión pero el polo estorbaba bastante, aunque suponía que llegaba hasta la cadera, probablemente.

—Haz intuido cosas que yo no.— hablo una vez más el de cabello oscuro, señalando los apuntes de Ford con la visión. —Sigues siendo muy observador es impresionante.

Ford no conesto con palabras, pero dejo a la vista su gesto de disgusto mientras su mano decendia hasta la mandíbula con una pequeña barba de su antigua musa.

—Ese cerebro tuyo sigue siendo encantador.

En un instante Ford se encontro levantándose de su asiento, tumbando a Bill hacia el escritorio tras de el, inclinando su cuerpo ligeramente. Al mismo tiempo sus manos bajaron hasta su cuello, ejerciendo un poco de presión, no la suficiente para cortar su aire pero la necesaria para identificar la amenaza.

Lo único que pudo salir de la boca de el moreno fue un chillido de la impresión, Ford se encargó de confundir a sus pensamientos cuando se acerco imponentemente a su rostro, Parecía enfadado.

—No estoy callendo en tu juego Cipher, para con eso de una vez.

Los ojos amarillos fosforescentes de Bill miraron seriamente hacia el otro, tratando de comunicar algo con su mirada, algo entre "no se a que te refieres." y "entiendo completamente a que te refieres y me divierte." Era complicado decifrar cual era la dominante.