CAPITULO 4

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Hola!, vengo a dar unas declaraciones, espero no tardar mucho, son estos:

1- soy nuevo, este es mi primer fic, por lo cual acepto críticas y consejos, pueden dejarlos aquí o al final, ustedes eligen

2- cuando vean estos símbolos "****" significa que estoy cambiando de ecena o de perspectiva de una ecena

3- cuando vean este símbolo "¤¤" es que es un recuerdo

4- por favor, quiero meter a un personaje llamado "goki" (la versión femenina de goku) y necesito saber cómo, por favor pido ayuda ;]

5- abra Lemon, pero pondré un cartel antes para que se lo salten si lo prefieren

6- cuando los personajes tengan este símbolo ' significa que están pensando o hablando en su mente

7- ni dragon ball ni high school dxd me pertenecen, créditos a sus despectivos creadores

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La tarde ya había caído, un joven rubio se encontraba caminando, su destino era incierto por ahora -por que mierda me llevaron a ese estupido maid café?- eran los balbuceos o más bien dicho quejas que se se escuchaban de aquel chico, -hubiera estado interesante o incluso me hubiera divertido si solo fuéramos a comer- seguía quejándose, aparte se escuchaba un rechineo de dientes -pero solo fueron a tomar las medidas de las empleadas, maldito motohama- fue su última declaración, se podía notar el gran cansancio que llevaba.

Aquel joven tan cansado se encontraba ahora mismo en su departamento, abriendo la puerta, el se metió a su departamento 'bueno, al menos pude comer bien ahí' dijo algo feliz 'y me regalaron un vaso' sacando el vaso, el joven pudo notar que en el frente había una estampa de gato.

Dirigiéndose a su cocina, se enteró de la realidad al escuchar un sonido en la habitación, se puso en alerta y sintió sus presencias, se le hacian muy conocidas, pero no le dio importancia, caminando de forma discreta, el abrió la puerta silenciosamente y sacó su báculo, listo para atacar, pero lo que encontró lo lleno de sorpresa.

-ya te dije que yo dormiré en la cama- exclamaba la mujer de cabello negro, que llevaba de nombre reynare.

-ni hablar, no pienso dormir en el suelo- fue la contestación de la otra mujer, una peli azul de nombre kalawarner y como si su vida dependiera de aquello, ella sostenía la almohada muy fuerte.

-qu-que mierda hacen ustedes aquí?- cansado de esconderse, el joven llamó la atención de las 2 mujeres. Las dos mujeres lo miraron con una mezcla de sorpresa, enojo y miedo. Era de esperarse, después de todo el son casi mata a su compañero de un solo golpe y casi las mata a ellas.

Las dos mujeres se mantuvieron calladas, pero la peli azul apunto de manera temblorosa a una mesita, donde había una carta, el son aún desconfiado y atento, se dirigió a la mesa, tomando la carta y leyendo la.

"querido son gokú, lamento no estar presente, pero como te dije te seguiré contratando, así que abstente de aceptar otros encargos ya que no hará falta".- comento en voz baja. -parece que es una nota de azazel-san.- concluyó lo obvio y siguió. "Por ahora vigila al chico que supone es de interés para varias personas y ya nos contactaremos para acordar un nuevo sueldo, por ahora concéntrate en eso y de cuidar bien a tus nuevas invitadas,.- la nota pareció llegar a su fin y con esa última parte entró en confusión, pues no supo a qué se refería, tal vez el último fragmento le aclararía sus dudas. - "posdata. si te causan problemas solo llámame, aunque te aseguro que no lo harán".- con ello no dio con más contenido ni siquiera en el reverso de la hoja, el solto un suspiro y se dirigió a las dos damas -entonces se quedarán conmigo?- mirando a sus ahora compañeras de departamento, las noto con una cara sarcástica hacia el, probablemente debido a su comentario más que obvio.

La dura realidad del desamor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora