Capitulo 18

979 112 2
                                    

Oscar

Mucho que procesar.

Michell lloraba sentada en el suelo mientras yo estoy recargado en el marco de la puerta.

—Siempre fue ella verdad—dijo lloriquiando.

—Ya sabes la respuesta—dije seco.

—Pense que podias llegar a quererme, pero siempre me utilizaste para sacarte a esa de la cabeza—dijo enojada.

—Perdón, de verdad, pero Margot es mi primer amor, el amor de mi vida—mencione.

—Te perdono, pero no hay que terminar, yo puedo hacer que te olvides de ella, yo puedo—dijo acercandose a mi.

¿Qué?

—No, claro que vamos a terminar, quiero estar con ella, quiero ser una familia unida, tenemos un hijl que necesita a sus padres.

—Todo es por ese mocoso verdad, yo sabia que te tenia que impedir ver a ese niño mientras estabamos juntos—dijo enojada.

Ah no, con mi hijo no.

—Si tenia que hacer eso, seguro que ese niño ni es tuyo, y la muy puta te lo encajo—dijo—Yo si podria darte un hijo propio.

—No se si eres ciega, o retrasada, pero es una copia de mi—dije obvio.

—Yo no lo veo, yo digo que estas cegado, el mocoso ni se parece.

La ignore.

—Terminamos, vete de aqui antes de que digas otra estupides—dije molesto.

—Y mis cosas?—dijo.

Ah si, se estaba mudando poco a poco.

—Tengo una mochila grande, mete tus cosas y adios—dije poniendo la mochila en la cama.

—Grosero.

—Lo siento.

Cuando ella se fue llame a Margot.

—Hola papá—contesto Leanh.

—Hijo, hola y tu mami—pregunte.

—Mami se esta bañando—dijo.

—Y por que contestaste la llamada si no sabes leer—pregunte.

—Por que tu cara esta en un circulo arriba de un numero.

—Ah, claro.

—Mami estoy hablando con papi—escuche a Leanh decir.

—Oscar—dijo.

—Hola, te hablaba para decirte que ya soy libre—dije sonriendo.

—Oh.

—Libre de que mami—pregunto Leanh.

—Eh, eh.

—De cosas hijo—contesto Leanh.

—Que tal si hoy salimos a comer algo, estoy libre, me referia a eso—trate de arreglarlo.

—Si, mami, por favor—escuche que Leanh pedia.

—Por favor—le segui.

—Bueno esta bien.

***

Una de las mejores tardes de mi vida.

Fue una comida muy amena.

Me encanto, que se repita.

Leanh estaba dormido en mi hombro mientras caminabamos por el parque apreciando los ultimos rasgos del atardecer.

Parte de tu ADNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora