Capricho

Capítulo 6: Regreso

Para todo ser —humano o no— la muerte se presenta con diferentes rostros.

Para la pilar de las flores se presenta como un demonio, y no un demonio cualquiera, sino como una luna superior, puede ver el número seis reflejado en sus ojos, piensa en la hermana escurridiza que logró escapar, sabe que el grupo de cazadores que fue en su búsqueda no descansará hasta haberle cortado la cabeza, pero su infinita empatía la obliga a pensar en como ayudarlos, aún cuando es ella quien necesita ayuda: el veneno ha invadido su sistema, sabe que no hay mucho que hacer, ni siquiera Shinobu podría curarla, lo suyo era una causa perdida, pero este día recordarán a Kanae Kocho como la pilar que movió la balanza a favor de los humanos.

Con eso en mente sujetó su espada con firmeza y apuntó al demonio que la miraba con una sonrisa burlesca.

—No sé que haría si perdiera a mi hermana —confesó con la espada apuntando a su enemigo —. Así que te daré el privilegio de morir primero —declaró yendo al frente para atacar.

...

Sanemi corría con todas sus fuerzas hacia la mansión mariposa.

Cuando estaba a pocos minutos para llegar al pueblo recibió la visita del cuervo de Kanae, quien informó el inestable estado de la pilar tras pelear con una luna superior.

Sanemi abrió la puerta de la finca y se adentró directamente hacia la sala de curación donde Shinobu trabajaba, sabía con exactitud que Kanae estaría allí.

Dejó escapar el aire que hasta ese instante había estado conteniendo al mirar a su mujer destinada en una cama de sábanas blancas, casi tan pálida como las vendas que rodeaban su cabeza.

—No avisaste que venías —dijo la menor de las mariposas al verlo entrar.

—¿Cuando despertará?

—El veneno debilitó su sistema, es un milagro que aún respire —explicó preocupada —, un milagro llamado Nezuko —Shinobu lo miró detenidamente, esperando alguna reacción tras saber que su hermana fue salvada por un demonio. Quiso indagar más, pero el pilar no tenía cara de querer conversar, nunca la tuvo, pero esta vez Shinobu no podía iniciar sus bromas —. Estipulo que despiertará en una semana, tal vez dos —informó levantándose del asiento qué estaba junto a la camilla —. No seas brusco —pidió caminando a la puerta —, sigue delicada.

Shinobu cerró la puerta y tomó una bocanada de aire, decir el estado de su hermana de forma profesional resultaba difícil, aún así, prefería informar su condición herida que recibir la noticia de un prematuro fallecimiento, pensó que el pilar del viento era de los pocos que podía comprender el terror que invadió su ser al imaginar que pudo morir. Negó con la cabeza queriendo dejar de pensar en lo que no sucedió, diciéndose que Kanae volvió victoriosa.

Dentro de la habitacion, Sanemi continuaba de pie frente a la joven mariposa, observando con expresión sombría el cuerpo de la mujer inconsciente.

De un momento a otro la mirada fría se tornó vulnerable, el albino subió la mirada para evitar que las lágrimas abandonasen la cuenca de sus ojos. Creyó que funcionaría, pero el miedo instalado en su pecho necesitaba ser drenado y, al no poder hablar con Kanae, las lágrimas resultaron su desahogo.

Nadie sabe cuanto tiempo estuvo llorando en la silenciosa habitacion, una habitacion donde el unico sonido era el sollozo interminente de un hombre preocupado.

—Volviste —sonrió caminando hacia la cama —. Gracias por volver a mí —juntando sus frentes —, perdón por no poder protegerte —reconoció amargamente —. Por favor despierta —pidió dejando un beso en sus labios —, así estarás conmigo completamente.

¡Hola!

Quiero dar gracias a todos los que siguen la lectura después de tanto tiempo, es un privilegio para mí saber que hay alguien que espera la siguiente actualización, ¡gracias!

Hasta la próxima, disfruten el capítulo. :)