Previo a la Cena
Mis padres estarán fuera por unos días, como todos los años en estas fechas, debido a su aniversario, y aprovechare ese tiempo para invitar a Ling a casa.
Quise crear un ambiente acogedor y romántico para ambas, que pudiéramos tener tiempo a solas, seria mentir decir que no fantaseo con la idea de estar juntas, porque deseo a Ling, y con todo lo que hemos vivido últimamente, he tenido que hacer un esfuerzo para no dejarme llevar, en los lugares mas inapropiados, que puedo decir me trae de cabeza, pese a esto, soy sincera cuando digo que pase o no algo entre nosotras, el solo hecho de compartir mi tiempo con ella es suficiente, puedo esperarla todo lo que sea necesario, ya que anhelo que nuestra primera vez estando juntas, no sea un recuerdo cualquiera.
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CenaAun cuando el sueño me invadía, en el momento que Ling me despertó, recordé que había alistado todo en mi habitación antes de salir por ella, previendo que se podría presentar algún inconveniente, y asi ocurrió me quede dormida, lo que era de esperar, ya que esta semana no tuve mucho tiempo para dormir, debido a que me desvele pensando en Ling y en como podía sorprenderla, sumado a mi trabajo, no descanse lo suficiente, pero eso no fue impedimento, para que la ilusión de saber si le agradaría lo que prepare para ella, me hiciera despertar por completo.
Tuve la certeza de que todo le gusto, cuando vi que no dejaba de sonreír, y decir que le había encantado, fui feliz y sentí que la falta de sueño había valido la pena.
Todo estaba siendo perfecto, por lo que me atreví a insinuar lo mucho que deseaba dar el siguiente paso, lo mucho que la deseaba. Cuando su respuesta fue positiva, pude sentir como mis nervios junto con mi excitación se hacían presente, y es que esta noche Ling se veía hermosa, ese vestido negro que esbozaba sus curvas de manera sutil, me atrapo, y durante la cena no pude evitar pensar lo afortunada que seria si pudiese verla sin el, y en consecuencia mi primer movimiento fue despojarla lentamente de el, y no se imaginan todo lo que sentí cuando la vi frente a mí, sólo con su lencería cubriendo su cuerpo, podría haberme quedado horas contemplándola, su cuerpo, su piel, todo en ella es perfecto, sentí una mezcla de sensaciones, una parte de mí deseaba saltar sobre ella y poseerla de forma apasionada como si el tiempo se estuviera acabando, y otra parte deseaba tocar cada espacio de su piel de la forma más suave posible para no dañarla, y es que Ling para mi lo es todo.
Fue así como con todo el autocontrol que pude obtener la recosté en la cama, y recorrí su cuerpo, como si tuviese la tarea de no olvidar ninguna parte, me dejé llevar y la besé, la acaricié, toque su cuerpo y cada vez que lo hacía, podía sentir el deseo recorrer el mío, la deseaba tanto que me fue difícil tomarme las cosas con calma, pero lo hice, quería deleitarme, quería impregnarme de ella.
Fue tan placentero tocar, besar sus pechos, lamer sus pezones, escucharla gemir y ser la causa de ello, aún puedo recordar lo que fue ver su completa desnudez, sentirla vulnerable y deleitarme con su excitación, y es que deslizar mi lengua por sus pliegues hasta llegar a su centro, y poder ver y sentir como se deshacía en mis brazos, me volvió loca, y cuando creía que no podía ser posible sentirme más excitada con el solo hecho de poseerla, pude sentirlo con mis dedos en ella, su cuerpo sudado, ella gimiendo mi nombre y yo sintiendo como sus paredes se cerraban por lo que le hacia, lo fue todo, sólo el hecho de recordarlo hace que mi cuerpo se vuelve a encender, y se con certeza que si en el pasado, creía que ella me tenía en sus manos, ahora ya no era sólo una creencia, era una realidad.
___Una vez Ling se quedó dormida, yo me encargue de velar su sueño, y es que aunque hubiese intentado dormir, no lo hubiera logrado, aún no daba crédito al hecho de haberla hecho mía.
No podía apartar mis ojos de ella, no dejaba de contemplarla, sus piernas, su abdomen, sus pechos, su rostro, no creo que exista alguien tan perfecta como ella, su piel tersa, sus largas pestañas, sus mejillas aun ruborizadas evidenciando lo que acababa de suceder y sus labios... Dios sus labios, eran tan suaves, tan dulces al besarlos, lleve mis dedos a ellos para tocarlos suavemente, muriéndome por besarla otra vez, pero impidiéndomelo, no queriendo interrumpir su sueño.