rehabilitación de Villanos (AU) // dabi es estudiante de la UA

Capítulo 8: ¿Dabi? (fin de temporada)

Una semana pasó desde el cambio de look de Dabi. La clase 1A ya habían regresado de sus prácticas, pero hasta ahora no habían visto a Dabi. Estaban acostumbrados a que él estuviera siempre en su cuarto y siempre era el último en llegar a clases.

Ya en la clase, aún faltanan unos minutos para el comienzo de esta. Todos charlaban sobre sus aventuras ya que el día anterior no habían tenido tiempo por que habían llegado muy tarde.

A escasos minutos de empezar la primera clase. Todos lo ven y se acercan para hablar con él.

―Hola, ¿eres nuevo?
―Cómo te llamas?
―¡Bienvenido!
―Me encanta tu cabello
―Yo te recomendaría usar otro asiento, ese está ocupado.
―¡tus ojos son preciosos!
―¿Cuál es tu quirk?

Dabi solo guarda silencio incómodo por la situación. No había imaginado que está sería la reacción de sus compañeros ante su cambio de look. ¿Encerio creían que era un alumno nuevo?

Shoto era el único que no se había movido de su lugar. A decir verdad, no le importaba en lo absoluto el "nuevo". Simplemente se le hacía familiar, pero no se le ocurría quien sería.

Aizawa entra al salón de clases. Ninguno de sus alumnos le hacía caso, su única idea fue tocer y efectivamente logró captar la atención de ellos. Lo cuál, todos volvieron a sus respectivos lugares.

―Veo que finalmente has podido socializar, Dabi.― Habla sereno. Había intuido que no lo habían reconocido.

―¡¿QUÉ?! ― Exclaman todos.

―Ni me lo digas, profesor ― esa respuesta les confirma a todos que realmente era Dabi, gracias a su voz.

―Basta de charlas. Ya tendrán tiempo para hablar de esto. Comencemos la clase.

En los dormitorios todos estaban reunidos en la sala principal para hablar en profundidad del tema. Mientras tanto, Dabi se encontraba en la cocina que estaba conectada con la sala para hacerse su comida favorita; Soba fría. La puerta principal se habrío dejando pasar a la pequeña Eri.

Eri, al ver a Izuku, salió corriendo a sus brazos.

―Te extrañé mr Deku ― Izuku se agaachapara quedar a la altura y abrazarla.

―Yo también te extrañé, Eri. ― Eri dirige su mirada hacia Dabi que ya se encontraba comiendo en la barra a espaldas de la escena.

―¡Dabi!― Grita y corre hacia Dabi. El peliblanco la recibe y le desordena su cabello con una pequeña sonrisa disimulada.

Todos se quedan atónitos. Eri habia preferido ir con Dabi en vez de quedarse con deku. Y lo peor... ¡¿CÓMO ES QUE ELLOS SE LLEVABAN TAN BIEN?! ¡¿Qué había pasado mientras no estan?!

Dabi le dió una paleta grande que había en su despensa propia. Los ojos de Eri brillaban y le agradeció el regalo con un abrazo.

―¿Que estás comiendo? ― pregunta Eri.

―Soba fría. Son mis favoritos― contesta Dabi. ―ve a jugar con el brócoli, iré a mi habitación a estudiar.

―Pero quiero jugar contigo― se queja.

―Eri, jugaré contigo en la tarde. Te llevaré a un lugar ¿Si?

―¡Está bien! ― le dio otro abrazo y se fue con deku. Dabi limpió lo que había usado y se fue directamente a su habitación.

"¿Realmente él es Dabi?" Se pregunta todo el mundo. Primero quedo y reconocible y después se comporta muy tierno con Eri. ¿Qué clase de quirk tan poderoso le afectó a Dabi?

Deku le preguntó a Eri qué fue lo que pasó mientras ellos no estaban, Eri les contó a todos con una carita muy inocente. También le contó la parte en la que Aizawa citó a Dabi para hablar y justo después, tomó la decisión de cambiar de look -Dato que conecta con la familiaridad y "cariño" con la que le habló su profesor en clase.- sí que se habían perdido de mucho. Aún seguían impresionados, pero dejaron el tema hasta ahí.

꧁◈᚜◈᚜--᚛◈᚛◈꧂

Horas después, shoto tenía hambre. Buscó en la nevera algo para comer. Vio que había en un táper la soba fría que tanto le gustaba. Sin embargo, borró su pequeña sonrisa cuando vió una etiqueta que ponía el nombre del dueño de dicha comida. Shto estaba en una pelea interna si pedirle permiso a Dabi para comérselo o no mientras mientras miraba el táper.
―Oye, deja de comerte mi soba con la mirada.― se queja Babi a sus espaldas. Shoto se maldice internamente. Indeciso si voltear o no.

Shoto decide por voltear y verlo aún con el táper en la mano. Sus ojos azules eran muy frío. Más fríos que la soba.

―¿puedo comerme tu soba, por favor?― pregunta disimulando su nerviosismo con una cara sin expresión alguna.

―¿Que te hace pensar que dejaré? ―Se crusa de brazos.

―es mi favorito...

―¿y?

―no los he comido en días...

― no me importa.

―¿no vas a compartir? Tienes que hacerlo.― a menaza Shoto imitando la pose del peliblanco.

―¿Y a mi en que me afecta? ― contrarresta acercándose intimidadamente. Shoto se enoja.

―Te doy 1,000 yenes por la soba.

―No.

―2.000 yenes.

―No.

―3.000 yenes.

―¡Que no!

―¡10.000 yenes!

―¡Joder, tengo una maldita black card. No necesito tu dinero! ¿Quieres la soba? ¡PUÉS CÓMETELA PERO DEJA DE MOLESTAR!― Dabi se llevó la manzana por la cuál inicialmente había ido a la cocina y volvió a su habitación enojado.

Shoto se quedó perflejo no se había movido de su lugar hasta que escuchó el puertazo que dió dabi en la segunda planta. Él ya estaba feliz por tener la soba que tanto le gustaba en sus manos. Solo podía comerla cuando su hermana se la preparaba especialmente para él.

No le gustaba la soba que preparaban en el comedor ya que la servían caliente y simple. También intentó hacerla por él mismo pero le fue imposible. Y la soba que tenía Dabi tenía buena pinta y por eso luchó por tenerla.

Aún estaba algo confuso por eso de que tenía una black card pero dejó de pensar para disfrutar de su Soba bien fría. Cuando la probó, sus ojos se abrieron completamente y sus pupilas se dilataron era muy parecida a la soba que le preparaba su hermana, pero incluso algo mejor. Era la mejor soba que había probado en su vida.

Mientras tanto, por otro lado, Dabi estaba sentado en su cama recostado en la pared masticando su manzana. Estaba en el fondo de sus pensamientos. La soba era su comida favorita, y la de shoto también. Cuando Shoto se cruzó de brazos, se parecía mucho a él cuando tenía el cabello mitad rojo y mitad blanco practicando lo de ser intimidante frente al espejo, y La cara sería de ambos. Ellos eran iguales en muchas cosas pero no se daban cuenta. Buscó en su cartera la black card que tenía desde hace años pero que nunca usó.

―Supongo... que él no tiene la culpa... ¡PERO AÚN ESTOY ENOJADO CONTIGO― Regañó a la targeta.

ָ࣪ ۰ . .۰˖ ݁ ˓ଓ ·.◦۪۪̥°۪۪ ੭