Capítulo 4: La Cita en el White Day

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Era el día de White Day, una fecha especial en la que tradicionalmente los hombres devolvían los regalos a las mujeres que les habían dado chocolates en San Valentín. Pero hoy, en una pequeña y elegante cafetería de Yeonnam-dong, el espíritu de White Day iba a tomar un giro inesperado para dos chicas muy especiales.
Winter llegó temprano, vestida con su estilo tomboy característico: chaqueta de cuero negro, pantalones ajustados y botas. A pesar de su apariencia dura, su rostro traicionaba la verdadera emoción que sentía. Jugaba nerviosa con su collar de estilo hip hop cubano, que llevaba un colgante con las iniciales "WINTER" en diamantes azules y una pequeña figura de una guitarra de rock. Se sentía como un adolescente en su primera cita, y eso era algo que no encajaba con su imagen de estrella de rock fría y segura.—Respira, Minjeong... solo respira. —se decía a sí misma, mientras tamborileaba los dedos en la mesa. Su mente estaba en una espiral de pensamientos; hacía mucho que no se sentía tan expuesta y vulnerable. Cuando la puerta de la cafetería se abrió, Winter levantó la vista y se quedó sin aliento. Karina entró al lugar, luciendo un vestido blanco de encaje que resaltaba su figura delicada, con el cabello suelto y una sonrisa tímida. Traía su iPad en una mano, el cual se había vuelto parte de ella, casi como una extensión para comunicarse con el mundo.Winter se quedó tan impactada por la belleza de Karina que no pudo evitar quedarse mirándola, especialmente en un lugar que no debía: su escote. Los ojos verdes de Winter se agrandaron y rápidamente desvió la mirada, sacudiendo la cabeza como si tratara de borrar el error. Se levantó apresuradamente de la silla, tropezando un poco, y se apresuró a abrirle la silla a Karina para que se sentara.—Annyeonghaseyo, Karina-ssi. —saludó Winter, intentando sonar tranquila, pero su tono traicionó lo nerviosa que estaba.Karina le sonrió y asintió en agradecimiento, sentándose con elegancia. Winter, todavía demasiado distraída por la belleza de Karina, intentó sentarse en su silla sin mirar... y terminó cayéndose de lleno al suelo.—¡Ay! —exclamó Winter, sonrojándose de vergüenza. Se levantó rápidamente, sacudiéndose, y con sus manos hizo un gesto de disculpa.Karina, visiblemente preocupada, tomó su iPad y escribió rápidamente: *¿Estás bien?*Winter asintió, intentando mantener la compostura, aunque sentía que su cara estaba ardiendo de la vergüenza. Karina, al ver la expresión avergonzada de Winter, no pudo evitar reír. Sus risas eran suaves y melodiosas, algo que Winter nunca había oído, pero que instantáneamente se convirtió en su nuevo sonido favorito.Winter sonrió como un cachorrito tímido y se rascó la nuca.—Eres... hermosa, Karina-ssi. —dijo Winter, hablando con sinceridad. Karina, que estaba acostumbrada a leer los labios de las personas, entendió lo que Winter había dicho y alzó las cejas, sorprendida.Karina escribió en su iPad: *¿Soy hermosa?*Winter se quedó boquiabierta, sorprendida de que Karina pudiera entenderla tan rápido.—¿Cómo...? ¿Cómo sabes lo que dije? —preguntó Winter, confundida.Karina escribió una respuesta mientras mantenía su sonrisa tímida: *Puedo leer los labios.*Winter la miró impresionada y rió, un poco nerviosa.—Eso es... genial. —dijo Winter, todavía hipnotizada por los gestos tranquilos y seguros de Karina—. Y sí, eres hermosa, Karina.Karina sonrió ampliamente, sus mejillas sonrojándose un poco. No estaba acostumbrada a recibir cumplidos tan directos, y aunque se sentía halagada, también estaba luchando con muchas emociones bajo la superficie.Winter, aún algo nerviosa, decidió ser valiente y aprovechó el momento.—Karina-ssi, ¿crees que algún día podría... no sé, darme una oportunidad? —preguntó Winter, con los ojos llenos de esperanza, pero también de miedo al rechazo.Karina bajó la mirada por un momento, sus manos temblando ligeramente mientras escribía en su iPad. Después de unos segundos, mostró la pantalla a Winter: *No puedo, ya tengo novio.*El corazón de Winter se hundió instantáneamente, pero trató de mantener una sonrisa.—Ah... entiendo. —dijo Winter, forzando una sonrisa que no llegaba a sus ojos—. Bueno, de todas formas, gracias por venir. No sabía que... ya tenías a alguien.Karina, al ver la decepción en los ojos de Winter, sintió una punzada de culpa. No había querido mentir, pero la verdad era mucho más complicada de lo que podía explicar en ese momento. Lo que Winter no sabía es que Karina no estaba realmente en una relación. Hace meses, había terminado con Lee Jaewook, su exnovio. Jaewook había sido cruel, diciéndole que nadie la querría por ser sorda y muda, y mucho menos con un bebé en camino. Karina nunca le había contado a nadie sobre su embarazo; se había aislado de Jaewook completamente y había decidido criar a su hijo sola.Karina se mordió el labio inferior y escribió algo más en su iPad: *Lo siento, Minjeong. No quise hacerte sentir mal. Eres una persona increíble.*Winter sonrió débilmente, sintiendo una mezcla de tristeza y algo de gratitud por la sinceridad de Karina.—No te preocupes. A veces las cosas no salen como queremos, pero eso no cambia lo mucho que me alegra haberte conocido. —Winter habló despacio, asegurándose de que Karina pudiera leer sus labios claramente.Karina asintió y, en un impulso, tomó la mano de Winter y la apretó suavemente, comunicando con ese gesto todo lo que no podía decir con palabras. Winter sintió el contacto cálido y, aunque la decepción seguía allí, también sintió una chispa de algo que no podía describir: respeto, cariño y una promesa silenciosa de que, pase lo que pase, siempre serían importantes la una para la otra.La cita no fue como Winter había imaginado, pero mientras las dos compartían risas y pequeños momentos en la cafetería, Winter supo que, aunque no pudiera tener el romance que deseaba, tenía algo más profundo: una conexión real. Y eso, para una estrella de rock solitaria como ella, era más que suficiente.

ROCKSTAR - WINRINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora