El Error No Fue Conocerte /Manjiro Sano

~16~

Al dia siguiente, no pude ni siquiera dormir treinta minutos, mi cabeza esta que explota por los pensamientos sobre la bofetada que me dio Manjiro, mi cabeza cada vez formula que debo o no hacer, o si tal vez debí tambien abofetearlo, aunque no creo ser capaz

Me levanté de mi cama con 0 ánimos, mire el reloj y apenas eran las 10 de la mañana, camine hasta donde estaba mi teléfono, lo agarre y este tenia un mensaje de Sota, entre a su chat y decía "Misa, regresare a la casa a las 11, tenme el desayuno listo, por fa, muero de hambre. Te quiero" sonreí y le respondí "👍🙃" 

Salí de mi habitación y camine hasta la cocina, le haria de desayunar algo sencillo, arroz, huevo y salchichas. Pasaron unos 15 minutos y apenas había acabado de hacer el desayuno. A los minutos mi mama bajo a la primera planta, no había recordado que ella ya estaba acá

— Cariño, no te hubieras levantado, yo podría haber hecho el desayun... —Paro de hablar al darse cuenta de la marca de la mano de Manjiro en mi mejilla— Por Dios, Misaki ¿Que te paso?

Rápidamente intenté pensar alguna frase convincente para que no me preguntara o sospechara algo 

— Me... Una chica me confundió y me golpeó —Menti 

— Mi niña... —Acarició mi cabello y pasó un dedo por el moretón, mientras yo servía la comida en el plato 

— No te preocupes, mami. Ahora... Espero que no vuelva a suceder... —Sonreí, aunque por dentro quería gritar y llorar— Mami... —Mencioné mirando el plato, aunque se que ella me estaba viendo— ¿Alguna vez... Mi papá te pego?

Se que mi pregunta la tomó por sorpresa ya que dejó de tocar mi cabello, de hecho, suspiro y pensó qué decir. Deje de ver el plato y la observe a ella  

— Una vez... —Respondió con un cierto dolor en la voz. La mire con interés y espere atenta su respuesta— Fue porque le reclame que no me gustaba que hablara con mas chicas... Aunque después de eso él no paró de pedirme perdón

— ¿Lo perdonaste? 

— Si... Pero no lo hice tan de la noche a la mañana, espere unas semanas y hasta que me convenció, lo perdone 

— ¿Te lastimo mas veces? —Pregunte aunque ella me miró con una ceja arqueada

— No, esa fue la primera y última vez

Suspire y deje el plato en la mesa, al instante Sota llegó y sonrió al vernos. Sus heridas estaban medio curadas. Dejó sus llaves en la mesa y camino a nosotras, abrazo y beso a mama, y luego me abrazo a mi, aunque me miró casi enojado al ver el moretón que tenía  

— Misaki... ¿Puedes explicarme qué fue lo que te paso? —Agarro mi mejilla para ver más de cerca el moretón. Mamá solo se quedaba observando, luego de unos segundos decidió dejarnos solos 

— Fue... Una chica me confundio y me abofeteó... —Le dije lo mismo que a mamá

— Una chica eh... —Me soltó— y desde cuando las niñas tienen los dedos gruesos, tal y como los hombres —Trague en seco y mi respiración se aceleró 

— Es verdad, tal vez ella pensó que... No se, yo era una amiga de su novio y me abofeteó 

— Mientes, Misaki —Mi respiración se aceleró más y sin querer lo enfrente

— No miento y es tu problema si decides o no creerme —Lo mire fijamente a los ojos, encarandolo, pero el sonrió 

— Bien... Te creeré, pero mas te vale no tener ninguna relación con esa niña o con el novio de ella —Suspire profundo y solté, me sentía aliviada que no siguiera atacándome con sus preguntas