- "oh No, es que yo no puedo comerlo" - rondaba la suave melodía de su voz entretejido en sus memorias.
Pasando saliva por su garganta, dirigió su atención a la albina, no había pasado mucho tiempo desde que empezaron su jornada de manera habitual tras la noche anterior, en sus manos sostenía una escoba para la limpieza del local, mientras que la de ojos rojizos le seguía el ritmo haciendo cuentas de los artículos que estaban en las repisas, parecía ya más activa, eso era un buen indicador, sea cual sea su enfermedad pareciera que ya se había aliviado de ello, lo cual le traía una paz interna.
- Estas bien? - Musitó la de cabellos blancos mientras presionaba ligeramente su mejilla con la manga de su abrigo, ni siquiera escucho cuando ella se le había acercado.
- Si - Quito con sutileza la manga del suéter, aun que en su pequeño agarre podía sentir que sus extremidades eran más pequeñas que la de él
- Estas seguro? Parecía que algo te molestaba - retrocedía apenas unos pocos pasos
- No era nada, hoy te vez más activa - volvía a su labor
- je si, estoy con más energías - tan animada que podría jurar que desprendía un aroma dulce
- que bien - sus comisuras se curvearon momentáneamente bajo aquella bufanda rayada
- Que te pareció el postre? Se honesto - "uh?" Se alcanzó a escuchar del contrario
El azebache al sentir aquellos ojos rojos se sentía algo presionado, se detuvo en seco recordando los sabores de aquel postre que le había ofrecido la noche anterior, en verdad sabia bien, refresco un poco su garganta pasando saliva
- Estaba delicioso - Al pronunciar aquellas palabras el rostro de la fémina se iluminó por completo, dando pequeños saltos
- Verdad que si! Es de un pastelería muy conocida por sus sabores que deslumbran a los paladares por su realce! - se podía notar en sus mejillas pálidas tornarse de un color rojizo pálido en estas, se notaba a simple vista que saboreaba probar uno de esos pasteles
"oh No, es que yo no puedo comerlo"
Aquel momento que empezaba a disfrutar por su tranquilidad se veía interrumpido por su recuerdo, no probó ninguna rebanada y en cambio solo bebió té mientras lo observaba, la mente humana es curiosa lo cual odiaba por qué eso llegaba a ser muy imprudentes. Si bien parte de eso lo impulsaba a querer preguntar también debía pensar en la manera adecuada de preguntar para que no sonará intrusivo.
Con Penas un hilo de voz estaba dispuesto a correr un poco de riesgo- Colette - llamo su atención, sacándola de su pequeños saltos de alegría
- Si? - inclino con sutileza su cabellera blanca
- Espero que no suene algo fuera de lugar, pero por que anoche dijiste que no..- antes de poder finalizarla se escuchó el timbre del local
- Que hacen ahí parados? Hay trabajo que hacer chicos - como siempre, el enano de su jefe molestando, por que regreso después de asignarles sus deberes tan rápido?
- Que haces aquí griff? Ya sabemos nuestros deberes - frunció su ceño con claro disgusto
- señor griff, que lo trae de vuelta tan rápido? - pronuncio sorprendida de su regreso repentino
- A que no se lo esperaban jaja, es para ver que no estuviesen distraídos de sus labores - relajo un poco el ambiente, de inmediato regresando a un tono serio - y por lo que veo es cierto - alzo una de sus cejas aquel hombrecillo
- Solo era una pequeña charla para relajar el ambiente jeje - se masajeaba con sus dedos la nuca
- Me parece excelente que intenten que sean amigos pero por favor no se distraigan de sus labores, hoy habrá mucha ventas, lo presiento -
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Mi fecha de caducidad
Fanfiction- Cuanto tiempo me queda? - Puedes decir que te fue muy mal en la vida, tratando te como una basura, pero algunos quisieran tener tu vida y seguir viviendo... Edgar cansado de su propia rutinas se muestra irritado ante aquel que se atreva a dirigi...