Después de varios días en Argentina, donde la conexión entre TN y Nicki se había fortalecido en medio de una pasión arrolladora, TN regresó a España. Su mente seguía llena de recuerdos de los momentos íntimos que habían compartido, pero pronto la realidad de su vida en Europa lo envolvió nuevamente. El fútbol seguía siendo su prioridad, y a pesar de la distancia, sentía que su relación con Nicki podía sobrevivir cualquier obstáculo.
De vuelta en Madrid, TN se sumergió rápidamente en los entrenamientos y en la rutina del equipo. Pero fue durante una tarde lluviosa, en la que TN estaba descansando en su casa, cuando recibió una llamada de su manager.
—TN, ¿Cómo va todo? —preguntó su manager, siempre directo y con un tono amistoso.
—Bien, todo bajo control —respondió TN, mientras miraba la ciudad desde la ventana de su departamento.
—Escucha, tengo una propuesta interesante. Ibai Llanos quiere entrevistarte. Dice que ha estado siguiendo tu carrera y que serías un gran invitado para su programa. Además, quiere que te quedes en su mansión unos días. ¿Qué dices?
TN sonrió. Sabía que Ibai Llanos era uno de los streamers y creadores de contenido más influyentes del mundo, y la idea de quedarse en su famosa mansión sonaba divertida.
—Suena bien. ¿Cuándo sería eso? —preguntó TN, interesado.
—En unos días. Me encargaré de todo, solo prepárate para ir a Barcelona.
Y así, unos días más tarde, TN tomó un vuelo a Barcelona, donde Ibai lo esperaba con los brazos abiertos. Al llegar a la mansión, quedó impresionado por su tamaño y el ambiente relajado. La energía del lugar era vibrante, llena de creatividad y buen humor.
—¡TN! Bienvenido, crack —dijo Ibai, abrazándolo con entusiasmo.
—Gracias, hermano. Este lugar es increíble —respondió TN, mirando a su alrededor.
—Lo es. Espero que te sientas como en casa. Vas a quedarte unos días, así que relájate, juega un poco de FIFA si quieres, y luego hacemos la entrevista —le dijo Ibai con una sonrisa, mientras lo guiaba por la mansión.
Los primeros días fueron tranquilos. TN pasó tiempo con Ibai y otros creadores que vivían en la mansión, disfrutando de la atmósfera relajada. Jugaron videojuegos, hablaron de fútbol y compartieron algunas risas. Pero, en el fondo, TN no podía dejar de pensar en Nicki. Habían estado en contacto, pero la distancia comenzaba a sentirse más pesada.
Dos días antes de que TN tuviera que regresar a Madrid, Ibai le dio una sorpresa.
—Oye, hermano. He escuchado que alguien muy especial para ti está por llegar esta noche —dijo Ibai, con una sonrisa traviesa.
TN lo miró, confundido.
—¿A qué te refieres? —preguntó, intentando descifrar las palabras de Ibai.
Antes de que pudiera obtener una respuesta, la puerta principal de la mansión se abrió y, para su asombro, allí estaba Nicki, con una sonrisa tímida y el cabello suelto, caminando hacia él.
—¿Sorpresa? —dijo ella, con un tono juguetón.
TN quedó congelado por un momento. La alegría y la sorpresa se mezclaron en su pecho, y sin decir una palabra más, corrió hacia ella y la abrazó con fuerza.
—¿Qué estás haciendo aquí? —preguntó, aún sin poder creerlo.
—Ibai me llamó. Dijo que pensaba que merecíamos pasar más tiempo juntos —respondió Nicki, sonriendo y mirando a Ibai, quien les lanzó una mirada cómplice antes de desaparecer en otra habitación, dejándolos solos.
—Ibai eres un genio—dijo TN, riendo suavemente.
La tarde se fue convirtiendo en noche, y después de compartir una cena ligera con el equipo de la mansión, TN y Nicki se retiraron a la habitación que TN estaba ocupando durante su estancia. La tensión entre ellos era palpable, pero en esta ocasión, no era incómoda; al contrario, la química era más fuerte que nunca.
Una vez en la intimidad de la habitación, TN cerró la puerta detrás de él mientras Nicki se sentaba en la cama, jugando con el borde de su chaqueta de cuero. La luz tenue de la lámpara de noche iluminaba suavemente la estancia, creando un ambiente íntimo.
—Te extrañé tanto, Nicki —dijo TN, acercándose a ella y sentándose a su lado.
—Yo también, más de lo que imaginas —respondió ella, levantando la mirada para encontrarse con la suya.
El silencio que siguió estaba cargado de emociones. TN tomó la mano de Nicki y la acarició suavemente, sintiendo cómo el latido de su corazón se aceleraba. Ella lo miró con una mezcla de deseo y cariño, y sin decir una palabra más, se inclinó hacia él, cerrando la distancia entre sus labios en un beso suave, pero lleno de pasión.
El beso fue solo el comienzo. Lo que siguió fue una exploración lenta, cada toque encendiendo el fuego que había estado ardiendo entre ellos durante semanas. Las manos de TN recorrieron la espalda de Nicki, deslizando su chaqueta hacia atrás, mientras sus labios se movían con una urgencia que ambos compartían. Sus cuerpos se conocían bien, pero esa noche había una intensidad nueva, una necesidad de conectarse más profundamente que nunca.
Nicki desabrochó los botones de la camisa de TN, dejando al descubierto su pecho, y sus manos recorrieron su piel con delicadeza, mientras sus labios seguían explorando los suyos. TN se dejó llevar, acariciando cada centímetro de su cuerpo, saboreando cada beso, cada susurro de su nombre.
Se deshicieron de la ropa lentamente, disfrutando del momento, hasta que finalmente quedaron desnudos bajo las sábanas. La intimidad entre ellos se sentía más fuerte que nunca. Cada movimiento, cada caricia, era un reflejo de lo que sentían el uno por el otro.
La noche avanzaba, y TN y Nicki se dejaron llevar por la pasión. Los gemidos suaves de Nicki llenaban la habitación mientras TN la abrazaba con fuerza, sus cuerpos moviéndose en perfecta sincronía. El mundo exterior desapareció, dejando solo el calor de sus cuerpos entrelazados y la conexión que los unía.
Finalmente, después de lo que parecieron horas, ambos quedaron exhaustos, sus respiraciones entrecortadas y sus cuerpos entrelazados bajo las sábanas. TN la sostuvo contra su pecho, acariciando suavemente su cabello mientras sentía el latido del corazón de Nicki contra el suyo.
—Esto es perfecto —susurró TN, rompiendo el silencio.
Nicki levantó la cabeza, sonriendo antes de darle un suave beso en el cuello.
—Lo es —respondió ella, apoyando la cabeza sobre su pecho nuevamente.
Ambos sabían que la distancia seguía siendo un desafío, pero en ese momento, no les importaba. Lo único que importaba era que estaban juntos, aunque fuera solo por una noche.
Esa noche, TN y Nicki compartieron algo más que pasión; compartieron la promesa de que, sin importar lo que el futuro les deparara, siempre encontrarían la manera de estar juntos.