Flowers from 1970 | Luckity version

capítulo 18 [Final]

Alex Slimecicle, también conocido como Quackity por sus amigos más cercanos, murió el 20 de diciembre del 2020 a las 21:59 a los 71 años. Su cortés solicitud hacia Luzu para que cuidara de las flores fueron sus últimas palabras conocidas. Todavía era capaz de hablar después de eso, simplemente se negó a decir más porque quería que sus últimas palabras tuvieran algo que ver con Luzu.

Fue Charlie quien le dió la noticia a Luzu al día siguiente por mensaje de texto, asegurándole que no tenía la culpa de nada y que el propio Quackity sabía que se le estaba acabando el tiempo.

Luzu no sabía cómo animarse a hablar con Quackity por teléfono sabiendo que su futuro homólogo había perdido la vida, hasta que recordó lo que Alex le había dicho la noche antes de morir.

"No puedes, mañana es 21 de diciembre, Lusu. Me aseguré de no volverte a llamar"

Luzu estaba tratando de entender lo que eso había significado, pero sabía que todavía se quedaría sentado durante el tiempo que fuera necesario, solo para esperar a que sonara el teléfono. Tendría que guardar el hecho de que había muerto para sí mismo. Necesitaba volver a oír la voz de Quackity. El Quackity que amaba. El Quackity que estaba vivo.

Luzu estaba absorto en sus pensamientos cuando escuchó golpes en la parte de abajo. Le tomó todo lo que tenia para levantarse y empujarse escaleras abajo. Sin mencionar hecho de que aún no había desayunado.

Abrió la puerta y vió a Charlie, que tenía los ojos hinchados y cicatrizados por haberse limpiado demasiado.

— ¿Charlie? — Luzu lo llevó adentro — lo siento mucho — ni siquiera pudo terminar la oración sin ahogarse en lágrimas.

Charlie hizo todo lo posible por sonreír — No lo estés, nada es tu culpa.

Luzu no podía imaginar por cuánto dolor estaban pasando él y su familia. Su corazón se rompió cuando pensó en Juana. Cómo Juana esperara que volviera su abuelo. Nos podía imaginar lo difícil que era para Charlie, como padre sentarla y decirle la verdad.

Luzu ayudó al hombre a entrar, su pisar había sido tan inseguro y confuso — ¿Por qué viniste aquí, Charlie?

— Tengo que decirte algo, Luzu — se volvió hacia Luzu, haciendo todo lo posible por mantener la compostura, pero obviamente fue contraproducente.

— Claro, lo que sea — Luzu se sentó frente a él, le ofreció un vaso de agua y unos pañuelos de papel y le dió unas palmaditas en la espalda.

Charlie le dió las gracias antes de respirar hondo — Mi papá era un gran hombre — su voz temblaba y cada parte de él se estaba desmoronando lentamente como un castillo de arena.

Luzu asintió con la cabeza, Charlie no tenía idea de cuánto había estado de acuerdo con él. Escuchó, tomó un sorbo de agua y trató de mantener la calma sabiendo que lo que Charlie estaba a punto de decir era algo sobre el hombre que amaba.

El hombre que se había ido.

— Nos contaba historias.

— Lo recuerdo.

Charlie se rió un poco — Eran historias tan absurdas, pero yo las creía. Techno no, él era realista, ¿Pero yo? Oh, absorbía cada palabra de su narración hasta que me quedaba dormido — miró con reminiscencia frente a él — la estúpida de él trepando un árbol para protestar para no talarlo, y como fue alcanzado por un rayo después, y todas esa veces que él y su amigo George salían y lanzaban petardos al cielo desde un helicóptero.

Luzu se rió entre dientes junto con él, se preguntó qué otras cosas locas supuestamente hizo Quackity en su vida. La idea de eso caldeó y alivió un poco su corazón. Sabía que Quackity estaba satisfecho y había vivido su vida de la manera que quería.