Cachorrito~ (Oliver x Abbie- 🔞)

•Capítulo 6•

Al otro día Oliver seguía en casa de Abbie ya que se había quedado a dormir, se despertó primero que el otro y fue al baño para lavarse la cara. Una vez ya realizado aquello fue a la cocina para hacerse el desayuno hasta que vió una nota en la mesa escrita por el papá de la planta.

"Hijo me fui a hacer tramites y a hacer compras. Como siempre portate bien y juega con tu amigo Oliver. Te quiere, papá."

El de cabellera blanca simplemente dejo la nota en la mesa y preparó el desayuno para él y Abbie: sirvió café en dos tazas y pusó en un plato panes tostados, un desayuno simple pero apetitoso.

Justo a tiempo Abbie se había levantado y vio a Oliver poniendo las tazas y el plato sobre la mesa.

-¿T-también... hiciste p-para m-mí?

-Si, bobo, ¿qué no ves que hay dos tazas?

-E-es que... c-creí que harías s-solo para ti...

-Bueno, si, pude haberlo hecho pero da igual. En fin, ven a desayunar- le indicó una silla a su lado.

Abbie se sentó a lado de Oliver y bebió un sorbo de su café. Estaban en silencio, cada uno enfocado en lo suyo, hasta que Oliver volvió a hablar:

-¿Qué te gustaría que te regale?

-¿R-regalarme que c-cosa?

-Nosé, mañana es tu cumpleaños, por eso te preguntó.

-A-ah, cierto.... c-cualquier cosa m-me g-gusta jeje...

-¿Seguro? ¿No quieres algo específico?

-N-no...  c-cualquier cosa e-esta bien para m-mí...

-Bueno, si tú lo dices.

Después de que hayan terminado el desayuno Oliver fue a lavar las tazas y el plato, luego fueron a ver televisión. Oliver paseaba por los canales tratando de encontrar algo interesante pero nada, todo aburrido. Luego a Oliver se le ocurrió una idea.

-Vamos al parque, ¿quieres?

-Eh... e-esta bien- sonrió.
Los dos chicos fueron al parque y se diriguieron a los columpios. Abbie se subió y Oliver empezó a columpiarlo, al principio era suave pero luego lo hizo un poco más fuerte para que el contrario pueda ir más alto. Cada uno se turnaba o se iban a otros juegos como el sube y baja, el tóbogan, la rayuela, etc. Más tarde decidieron ir a una heladería y eligieron las bochas con los sabores que ellos querían: Oliver pidió dos bochas de vainilla y durazno, y Abbie también pidió dos bochas pero de fresa y crema, se sentaron en un banco a disfrutar de sus helados. La estaban pasando tan bien. Mientras disfrutaban, Oliver se pusó a pensar un momento y se dio cuenta que era la primera vez que disfrutaba pasar tiempo con Abbie de una manera más linda y tranquila, sin la necesidad de golpearlo y humillarlo como suele hacerlo siempre.
Más tarde ambos chicos volvieron a casa con sonrisas en sus rostros luego de haber pasado un tarde divertida. Se sentaron en el sofá y suspiraron de satisfacción, hasta que Oliver recordó algo que tenía que hacer.

-Oye Abbie, ¿dónde está tu celular?

-En m-mi cuarto... ¿P-por qué?

-Solo quiero buscar algo, ¿me dejas?

-Eh s-si, claro.

Oliver fue al cuarto y agarró el celular del contrario y lo desbloqueó, y como sea que sabe su contraseña, pero al desbloquearlo estaba en el chat de un contacto; iba a salirse pero se detuvó cuando vio que el chat era de Engel...

Chat

Engel: Por qué te mandó eso?

Abbie: Nosé, me lo mandó de la nada en medio de la clase de Historia...

Engel: Maldito enfermo, lo odio tanto, por qué no lo expulsan?

Abbie: Nosé... a la escuela parece no importarle mucho...

Engel: Mira Abbie mientras estes conmigo no pasará nada más ok? Pero porfavor no me escondas las cosas que Oliver te hace

Abbie: Esta bien...

Engel: Recuerda siempre estaremos para apoyarte campeón

Abbie: Muchas gracias Engel

Engel: De nada Abbie bueno nos vemos mañana en la escuela adiós y cuídate

Abbie: Adiós Engel tú también cuídate

Oliver al ver eso quedó sin palabras... estaba furioso, la sangre le hervía, tenía ganas de buscar un cuchillo y matar a Abbie con ello... pero se controló y soltó un suspiro hondo, sonrió levemente y dijo para sí mismo:

-Vaya Abbie, parece que las palizas de ayer no te bastaron, ¿eh? Pero no pasa nada... siempre estaré aquí para dejarte en claro las cosas... ay, no puedo esperar para escucharte llorar y sufrir mañana en tu cumpleaños...

Cuando dijo eso Oliver apagó el celular y regresó a la sala donde estaba Abbie.

-¿Q-qué buscaste?

-Solo busque diseños de pastel, pienso hacerte uno y así comerlo juntos en mi casa- decía sonriendo aunque claramente estaba mintiendo.
Abbie asintió, creyendóle, y le mostró una cajita que era de un juego de cartas.

-¿Jugamos?

-¿Por qué no?- sonrió Oliver y empezaron a jugar.

Sin embargo, mañana era el cumpleaños de Abbie... y justo en su cumpleaños le espera un infierno...