Escoje una flor en la tierra y moveras la estrella más lejana, por qué por más lejos que estemos el aroma de nuestra primera rosa se quedará presente.
Siempre te agradecí esa primera rosa, y la recibí con mucho cariño y de hay me regalaste todas las...
Karl y Quackity estaban en la tienda discutiendo de que podían hacer para llevar a cabo su plan.
George aún no había llegado, generalmente llegaba temprano pero esta vez se había tardado mucho más.
-¿A que hora llegará?
-No lo se Quackity, seguro se durmió tarde o algo así.
‐Debe estar devastado por lo que paso con Dream.
-Lo se, pero ese idiota va a pagar por lo que hizo.
-Eso espero.
Llevaron su atención a alguien que entró a la tienda, era una chica muy pero muy linda con un vestido negro con patrones de fresas, su olor era muy dulce, tenia unos aretes preciosos y un bolso blanco y se veía tan pero tan bien.
-Señorita esta cerrado.
-Preferiria que me llamaran ...George.
Ambos abrieron los ojos como platos.
-¿¡George!? ¿QUE DEMONIOS TE PASO?
Se quedaron atónitos, era como ver a una nueva persona, no a su amigo de siempre.
-Pues digamos que me arregle un poco, estuve pensando a noche y si a Dream le gustan las chicas, entonces seré una chica, la peor de las chichas.
-Pero ¿Y nuestro plan?
-El plan sigue en marcha chicos, pero yo tengo otro tipo de planes.
La actitud de George ahora era un poco egocéntrica y firme.
-¿Entonces no solo cambia tu skin sino también tu personalidad?
-Puede ser, pero solo por un rato, después seguiré siendo la misma persona que siempre...
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Por otro lado estaba Dream arreglandose y pensando en lo que le iba a decir a George cuando llegará.
-¡No le puedo simplemente decir lo siento! Necesito algo más procesado.
-¿Que otra cosa le vas a decir Dream? Inicia con un lo siento y el resto saldrá por si solo.
Dream se acostó en la cama rendido.
-¿Y si mejor no voy?
-Oh no, nonono, tienes que hacerlo, no puedes dejar a una persona así por que si.
-Pero se que me va a rechazar la disculpa o lo que sea que estoy haciendo.
-Si no lo intentas no sabrás que es lo que pasa.
Dream miró al techo, quizá tenía razón.
-¿Iras conmigo?
-Por décima vez si.
-Bien entonces hagamos esto.
Camino a la tienda Dream iba xada vez más nervioso, no sabía que iba decir, lo que había ensayado se le había olvidado en cuanto salio de su casa.
