Valiente y pequeña Latina ↬┇Rick Grimes┇

Noche tetrica

—¿no es malo que no te haya llegado el periodo?

—soy irregular.

—una cosa es atrasarse un mes, pero ¿dos?

Natalie movió su mano sin importancia al lado de Amy comiendo.— me ha pasado antes.

—si tu lo dices...

Amy siguió comiendo mientras la noche caía. Al poco Andrea se unió a ellas con su plato y una cerveza que empezó a beber frente a la fogata.

—no es justo que no podamos beber.

—Natalie tiene razón, es el apocalipsis, merecemos algo.

La rubia mayor las miro con burla.— Ni lo sueñen, tu tienes 17 y tu 15. A los 21 podrán hacer lo que quieran.

—¿acaso llegaremos a los 21? 

—no digas eso. —Natalie palmeo el hombro de Amy en juego— Quiero una familia.

—las dos seguirán viviendo mientras yo siga con vida. —declaró Andrea.

—si, cuidara de nuestros hijos.

—tampoco te pases. —Andrea bebió de su cerveza divertida.

—esto esta muy rico. —Morales estaba agradecido por el pescado— lo extrañaba.

—por dos. En la terminal vendían unos riquísimos peces. —le hablo Natalie en español a Morales— mi mamá compraba cuando íbamos a la playa. Y el ceviche... mm extraño el ceviche.

—nunca probé el ceviche, ojala lo hubiera hecho. —Morales observo a Dale ver su reloj— Tengo que preguntártelo ahora, me estoy volviendo loco.

—¿que?

—ese reloj.

—¿Qué tiene mi reloj?

—te veo todos los días y a la misma hora, dándole cuerda como un cura que da misa.

—si a mi también me llamo la atención. —concordo Jacqui.

—no entiendo la pregunta. —Dale sonrió.

—al menos que haya entendido mal, el mundo parece llegar a su fin. O al menos estará detenido un tiempo.

—pero tu estas todos los días dándole cuerda a ese estúpido reloj.

—el tiempo, es importante para llevar la cuenta. Los días al menos ¿no lo crees Andrea? —Dale la miro— Apóyame esta vez.

Andrea negó divertida. Y Dale no tuvo de otra que contar la anécdota.

—Dale suenas como un anciano. —el comentario de Natalie hizo reír a la mayoría.

—si muy extraño. —concordó Amy.

—solo es William Faulkner. Quizás lo recite mal o la nueva generación no lo entiende.

—somos rebeldes sin causa. —la latina abrazo por los hombros a Amy sonriente— Lo aburrido no es para nosotras.

—chicas, tienen que aprender pronto algo de cultura. —reprocho Dale.

—tal vez con el tiempo. —Amy asintió levantándose.

—¿a donde vas? —le pregunto Andrea.

—al baño. Dios, quería ser discreta, pero no se puede.

Todos se rieron mientras Andrea comía avergonzada. Natalie pidio otro pescado y Carol le sirvió con una sonrisa.