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Su cuerpo estaba lleno de sudor, sus piernas y brazos temblorosos mientras seguía taladrando con fuerza contra el contrario.
El sudor que caía de su frente impactaba en gotitas sobre el hermoso rostro del contrario, sus ojos azules mirándole con deseo.

Había hecho tantas cosas morbosas antes... Ahora, incluso el haberse masturbado mientras manoseaba las enormes tetas de un cadáver que había llegado a su morgue, le parecía nada comparado con esto

Tenía la viva imagen de un Sehun debajo de él retorciéndose de placer, mientras su cabeza reposaba sobre el vientre semi abierto del pequeño cadáver de Kim Minseok.

Aún así, estaba más que excitado. No le importaba absolutamente nada, más que llenarle de semen por cuarta vez el culo a Sehun.

Impacto fuertemente de nuevo, dejándose ir dentro de nuevo, sintiendo su espeso esperma llenar al chico nuevamente. Soltó un jadeo ronco y se acurrucó contra el cuello del menor, dejando otra marca y mordida en la zona de su clavícula

— Me tienes loco, Oh Sehun... — susurro, tomándolo del mentón para escupir en su boca antes de besarlo con fuerza.— Loco...

Sehun sonrió, correspondiendo al beso y apretando su interior para darle otra descarga de placer al mayor.

— Que bueno, eso es justo lo que quiero... ¿Quieres probar algo nuevo?

— ¿Algo más todavía?, si que estás lleno de sorpresas.— asintió, saliendo de él para sentarse en la camilla metálica, ahora ignorando que, al igual que Sehun, se había recostado sobre el cadáver del menor.

— Enséñame... — susurro el mayor, colocando sus manos debajo de su cabeza.— Hazme tuyo Sehun, quiero que tú seas mío también.

Ni lento ni perezoso, Sehun obedeció. Trajo consigo un pequeño banco que encontró en la sala de investigación, acomodándose entre las piernas del mayor.

— Bueno, entonces... Lo haré. — murmuró. — Relájate

Coloco cada una de las piernas de Yeol sobre sus hombros, llevándose la ahora flácida verga del mayor  a la boca, comenzando a chupar lentamente.

Paso sus dedos entre su agujero ya bien follado y, con algo del semen de Yeol que escurría ahí, llevo estos al culo fruncido del mayor.

Este dio un pequeño brinco, pero hizo caso a las indicaciones del chico, relajándose y dejándose hacer. Se concentro en las caricias del menor, en su boca, y pronto comenzó a ponerse duro de nuevo, arqueando la espalda.
Sintió uno de los dedos de Sehun introducirse en su interior, tocando tan al fondo que, pronto el dolor se convirtió en placer una vez que Hun tocó una parte de él que le hizo vibrar.

—¡Mierda! — exclamó, sintiendo su erección avivarse aún más que antes en la boca de Sehun
Bajo su mirada y pudo ver al menor totalmente lleno de su verga, su boquita bien estirada mientras seguía metiéndole los dedos.— Me encanta muñeco... Joder ~

Sehun sonrió apenas pudo con la boca llena, liberando la gruesa erección del más alto para ponerse de pie. Llevo uno de los pies de Yeol sobre sus hombros, acomodando su erección entre las nalgas de su mayor.

— Relájate y disfruta... Si te duele mucho, avísame

— Solo mételo cariño. — susurro el mayor, admirando la belleza de Sehun y, sintiéndose deseoso de pertenecerle

El menor acato rápidamente, introduciendose en él con suavidad para no lastimarlo, hasta el fondo, dando un golpe certero que, supo de inmediato, tocó en el punto dulce de Chanyeol, lo vio vibrar y su pene liberar más liquido pre seminal.

No tardó mucho para tomar un ritmo constante, cogiendolo fuerte y seguro, firme y hasta el fondo.

Lo hizo correr un par de veces antes de que el mismo Sehun se corriera en su interior con fuerte alarido.

Para Chanyeol, había sido su primera vez por el culo. Para Sehun, había sido su primera vez como activo en el calor de las caricias.

(...)


El resto de la noche transcurrio con cansancio. No supo cómo, tan solo había despertado con el cuerpo dolorido, en su cama de su habitación, con el culo ardiendo y rebosante de semen de Sehun... Pero sin Sehun a su lado.

Aún así, encontró una nota en su almohada, la misma que contenía el número del pequeño chico que le había encantado.

Sonrió y tomo una ducha para despejarse. Aún tenía que realizar el informe para la policía, guardar el cuerpo y esperar.

No tardó mucho, concentrado y contento, quitado de su estrés, termino antes de las once e indico al jefe de la policía que estaba listo.

Recibió órdenes de realizar las acciones correspondientes con el cadáver del niño para entregarlo a sus padres para su santo entierro, y concluyó.

Los dos cuerpos restantes en los cajones aún estaban esperando indicaciones. Le urgía deshacerse de ellos, pero aún debía esperar.

La tarde la paso sin nada relevante. A veces, el trabajo era así. Vacío, sin nada que hacer más que esperar.

Recordó entonces el número del chico, y nervioso a pesar de las guarradas de anoche; le llamo con una voz titubeante.

— Hey, Sehun... Soy Chanyeol. — saludo, recibiendo una risita al otro lado.

— Hola. — dijo el menor. —…¿Eres el amigo del novio de Kyungsoo?— Chanyeol se extraño por la pregunta, dado que ya se habían conocido y Sehun sabía bien quien era.

— Eh, si... Soy yo. — no presto demasiado atención, sus ganas de volver a verlo eran mayores.— Me preguntaba si estás libre ahora... Es decir, se que es repentino pero....

—¡Esta bien!— dijo una vocecilla al otro lado de la línea, sonando tan animado y nervioso.— Digo, estoy libre... También quiero conocerte.

Chanyeol río, ya se habían conocido pero ahora, la voz de Sehun denotaba una ternura que... Honestamente le enloquecía.

—¿En el parque de la ciudad en treinta minutos?

— Por supuesto, ahí te veré... Ah, llevo una playera blanca y pantalón de mezclilla.— dijo el menor.

No era como si no fuese a reconocerlo, pero Chanyeol indico su vestimenta también y partió luego de asegurarse de que todo en la morgue estaba bien.

Al llegar, esperar ver al muchacho de ojos azules, cicatriz en el ojo izquierdo y ese apice de sensualidad que la noche anterior le había embriagado.

Pero no fue así.

El Sehun de ahora... El mismo Sehun, sonreía con ternura, sus mejillas sonrojadas bañadas en un tono carmín, ojos color miel, sin cicatrices, y con un cabello más largo y de un negro profundo. Su piel era más pálida que anoche, era más delgado, pero mantenía ese culo que....uff~

— Hola, soy Oh Sehun. — le saludo con un apretón de manos.

Chanyeol correspondió y asintió. Creyó que entonces, el Sehun de ahora... El mismo Sehun, tan solo se sentía tal vez, apenado por como se habían conocido anoche y quería empezar de nuevo, quizá, haciéndole creer a Chanyeol que iba enserio

No era necesario, Chanyeol quería seguir bebiendo de su culo, besarlo, amarlo....

—Soy Chanyeol. El gusto es mío, ¿Me permites invitarte a comer?

Pregunto, sonriendo ante la respuesta afirmativa de Sehun.

Quizá, está sería su verdadera primera cita.

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