40. Bajo la lluvia

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Fueron un par de segundos los que me tomaron para poder entrar en el momento. Empecé a inclinar de forma cuidadosa y lenta mi rostro para ir al encuentro de los labios de Ciize. Sonreí al notar que ella se los relamió. Todo alrededor de nosotras estaba oscuro, sólo una ligera columna de luz nos iluminaba a ambas. Cada espacio en la habitación daba el perfecto ambiente para un romántico y apasionado momento entre una pareja. Nuestro amor era furtivo, un amor entre dos mujeres que estaban comprometidas con otras personas, pero que se amaban y deseaban incontrolablemente.

— ¿Estás segura de hacer esto? — preguntó la pequeña mujer bajo mi cuerpo.
Su respiración era pesada, podía notar el deseo en ella.

Ambas estábamos recostadas en una cama tamaño King, no era suya ni mía. Sus brazos alrededor de mi cuello y mis manos en su cuerpo.

— Mucho más que segura, jamás dejé de amarte — Dije tratando de sonar como la persona con más amor y pasión, a punto de liberar todos aquellos sentimientos de mi cuerpo.

— Pero estamos comprometidas, esto nos hace ser amantes.

— No me importa — dije con firmeza. Mis ojos miraban los suyos con desición — Me cansé de ocultar lo que siento por tanto tiempo. Quiero que seas mía.

— Siempre he sido tuya.

Sonreí de forma ladina. Sabía muy bien la respuesta, pero escucharlo era como una melodía dulce para mis oídos.

— Yo tuya.

Dije para finalizar aquel corto diálogo con el inicio de un apasionado beso.
Nuestros labios se encontraban en una sincronizada danza, podía sentir claramente su respiración chocando contra mí. Mis manos trataban de moverse de forma adecuada en el cuerpo de Ciize.

Podía sentir el sabor del labial de Ciize en mis boca, así como también el sabor fresco de la menta que ambas comimos antes de inciar.

— yyyyy corten — Estaba gritando internamente por aquella indicación. No soportaría un minuto más con mí boca pegada a la de mí amiga.

Sentía como si rayos láser estuvieran apuntándome directamente en la frente al punto de hacer un enorme agujero, pero decidí ignorarlo por un momento.
Me incorporé y de paso ayudé a mí pequeña compañera a ponerse de pie.

— Chicas, fue una excelente escena.

Ciize y yo nos inclinamos levemente en agradecimiento para luego escuchar los aplausos que el equipo de filmación.

Aquella sensación de ser apuntada no había desaparecido aún. Pasé mí mano por mí cuello para trata de calmarme, me sentía un poco ansiosa.
Miré en varias direcciones para poder encontrar la fuente de esa sensación. Abrí los ojos de par en par al encontrar al otro lado de la habitación y a lado de la puerta del set a mi sonriente novia. Lo e estaba sentada con las piernas cruzadas una sobre la otra y con la mirada atenta puesta únicamente en mí.

— Milk ¿Qué opinas de la escena?.

El directo preguntó mientras me mostraba la tableta con el vídeo.

— Ammm yo, creo que ha quedado genial. Es una buena escena.

— Eso significa que no la repetiremos ¿Verdad? — Amaba actuar, pero si se trataba de una escena romántica con mi co protagonista, me costaba mucho más trabajo, a pesar de ello ponía mi esfuerzo.

— Se ve muy bien, casi como si realmente se desearan.

Ciize y yo reímos nerviosas. Ambas sabíamos que sentíamos amor la una por la otra, pero no de esa manera. Nuestra amistad seguía siendo la misma que decidimos tomar.

MISMO LUNAR [MilkLove & LingOrm]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora