Look at me, please

15 - '¿INTERES?'

Iba vestida bastante sencilla. Un vestido de color rosa claro, no muy escotado, era de mis vestidos favoritos, mis ganas de ponerme zapatos de tacón eran muchas, pero a veces es mejor prevenir que curar

"Por si pasá lo de aquella vez" pensé.

Habíamos salido un poco tomadas de la casa de Lucía, su madre estaba de vacaciones, así que tomamos todo el alcohol que quisimos, y eso no era poco.

Inmediatamente al oír la música y ver tal cantidad de personas pasándolo bien, nosotras no dudamos en hacer lo mismo.
No era otra fiesta de esas aburridas, era algo diferente,teníamos claro de que esa noche nos lo íbamos a pasar increíble, fuera juntas o separadas.

Bailaba entre un montón de gente, con Lucía y Camila. Deslizaba mi cuerpo entre ellas dos. La estábamos pasando bien.

Quizás estaba un poco tomada, pero que más da? Podría estar triste o preocupada, como en las dos últimas fiestas a las que he ido. Y si es así, sinceramente prefiero estar como ahora.

En ningún momento se me pasó por la mente si Iván estaba cerca o no. Ni si quiera pensé en él.

Bueno, no al menos hasta que lo vi. Iba vestida con un buzo negro como de costumbre y unos pantalones anchos del mismo color. Llevaba el pelo despeinado y un cigarrillo entre sus labios. Sus manos temblaban por alguna razón y no estaba solo, también iba la chica del auto con el, Ori! se llamaba Ori, nunca recuerdo su nombre, será porque estaba drogada el día que la conocí...

Ori me vio y me saludo. No me acuerdo que ocurrió la noche en la que la conocí pero al parecer nos habíamos hecho buenas amigas, me indicó que me acercara a dónde estaban ellos.

"Isa!" Me saludó y me abrazó, realmente era encantadora. "Que hacés aquí?" pregunté yo, Iván seguía fumando y no sé inmutaba ni para mirarme.

"Vine con Iván, él me invitó"

Normalmente las fiestas del parque eran para gente que estudiaba en nuestro instituto, Ori lo hacía pero hace mucho que no se presentaba a clases. Recuerdo haberla visto alguna vez.

"Buenísimo!" mencione acercandome a su oído, había mucho ruido en el lugar.

Ella sonrió y se alejó ligeramente de mi. Iván me agarró del brazo acercando mi oído a su boca.

"Venís a la casa de mi papá? Podemos estar en la pileta, no hay nadie en la casa"

"Nosotros solos?" pregunté confusa, el asintió. Me quedé pensando, ya que volviendo un poco a la realidad del asunto, Iván estaba completamente drogado.

Lo podías notar en el tono de color de su piel ligeramente azulado y sus ojos totalmente rojos.

Pero acepté, se lo dije de vuelta al oído y me tomó de la mano, alejándonos del parque una vez más. No pregunté por Oriana, ni siquiera me despedí de mis amigas, supongo que ellas se lo pasarán mejor que yo.

Caminamos los dos por el camino de la ruta. El camino se me hizo especialmente corto para estar ambos sin decir ni una sola palabra. Llegamos a un camino con casas grandes y lujosas, parecíamos haber llegado a la parte donde vivían los ricos del barrio privado, ya caro de por si.

Iván pasó de tener las manos en el bolsillo todo el tiempo para agarrarme de la mano. No sabía muy bien que hacíamos ahí ni por qué me llevaba a la casa de su padre, pero supuse que sería para drogarnos como hicimos ese día.

Pero entonces entramos al jardín de una casa iluminada, con música jazz sonando dentro. Iván, sin soltarme la mano, me llevo hasta detrás de los arbustos del fondo. Saco de su bolsillo una píldora de color blanca

"Tomá"