¿Qué sentido tiene derramar mis intestinos por ti?
¿Qué más te puedo dar después de arrancarme el corazón deshidratado de tantas noches ahogando a mi almohada?
¿Qué sentido tiene, amor mío?
Si yo no existo.
Si me temes...
Si me guardas en tu repisa de madera.
Quiero que me coloques en el mueble más lindo.
Donde me pueda ver.
Donde todos sepan que me adoras...
Donde me pueda sentir especial.
No quiero llenarme de polvo otra vez, pues fue difícil quitar las manchas de mis olanes...
Ahora sólo quiero quebrarme dentro de estas puertas que me ocultan.
Incluso en la basura me vería mejor.
-Frieden
