Good boy

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️ • One shot inspirado en la canción "I can fix him (no really i can)" de Taylor Swift. Cargar medios audiovisuales.

• Referencias a “La propuesta”, la peli de Ryan Reynolds de 2009

• Wade humano, Logan mutante.

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Hacía ya unos 15 años desde que habían dejado las fuerzas armadas, huyendo clandestina y silenciosamente hacia una nueva vida. Buscaron nuevas identidades, nuevos carácteres, pero, sobre todo, la nueva y maravillosa opción de poder pertenecerse el uno al otro sin restricciones.

Ninguno puede explicar con exactitud qué fué lo que los impulsó a tomar la decisión, aunque había una infinidad de motivos. Uno de los dos era el más despiadado y ruin soldado, sobreviviente a dos guerras, un hombre con instinto animal que no se dejaba persuadir por el más mínimo sentimiento. El otro era el más joven y también el único no mutante del grupo, pero no por ello el menos letal, usaba el humor como escudo y las katanas como arma. Él fué quién logró cambiarlo.

Lo que empezó siendo una indecente manera de descargar el estrés de cada misión, acabó volviéndose un gesto que iba más allá de la camaradería. Un vibrante sentimiento los perseguía detrás de cada silenciosa insinuación, detrás del roce prohibido de sus labios, detrás de los rasguños en su espalda y las marcas de su cuello. Para cuando se dieron cuenta, el restregarse tras los vestidores sabiendo que sus compañeros estaban del otro lado no era sólo una forma de saciar su necesidad; era un lenguaje secreto para los dos, un campo magnético, un altar en el cuál dejar ofrendas. Él logró ganarse su maltratado y enjaulado corazón.

El fuego de la fogata de ese turno de medianoche no podía compararse a la llama abrasadora que consumía sus pieles al juntarse. Esa medianoche en la que Víctor, el único capaz de descifrar el código en la mirada de su hermano, hizo explotar su burbuja y le puso fríamente los pies sobre la tierra con 4 palabras.

— Estás enamorado de él— musitó con una voz demasiado suave a comparación de la presión que ejercían sus uñas en sus palmas— puedo olerlo en tí, cada mañana y cada noche.

James, quién solía ser en ese momento, no tuvo que voltearse a mirarlo para saber que era muy tarde para negar algo o pensar que obtendría su aprobación. Lo conocía lo suficientemente bien como para saber también que era impredecible, implacable a cualquier rastro de sentimiento, y renuente a aceptar cualquier cosa superflua a sus normas y las de la sociedad.

— No pueden continuar con esto, no puede ser y lo sabes— la tensión en su cuerpo se manifestó en la punta de sus garras de hueso, asomándose entre sus nudillos— y si piensas que puedes continuar ocultándolo, sus entrañas salpicarán en tu cara. Estás advertido.

Howlett se sobresaltó, y sin haberlo pensado mucho se puso de pie y tomó el cuello de su hermano en su mano derecha, gruñendo tan ferozmente que sus colmillos casi se agrietan. Nunca en todos sus años de existencia había tenido esa reacción con él.

"somos hermanos. Somos todo lo que tenemos"— esas palabras rebotaron en su cabeza, eran las mismas que le había dicho esa miserable noche, la noche en la que habían matado a su padre— "los hermanos se cuidan entre ellos"

Toda su vida había sido manipulado con esas palabras, obligado a hacer actos atroces con tal de obtener su aprobación, tanto para cubrir sus espaldas como para endurecer su alma y obligarse a no sentir nada, y jamás le había fallado.

One shots • ¡Poolverine!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora