Alice Kwon es una mujer de 25 años quien trabaja de modelo de VERSACE para desfile de la marca que se realizan dos veces al año, ella es italiana coreana y le ofrecen ser la novia oficial del embajador global de VERSACE llamado Hwang Hyunjin, el más...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El sol apenas comenzaba a asomarse, iluminando suavemente la habitación, mientras me despertaba en la calidez de la cama. Hyunjin y yo habíamos tenido relaciones sexuales anoche, así explorando cada rincón de nuestro amor como si fuera un secreto atesorado. Pero ahora, era momento de enfrentar la realidad que nos esperaba.
-Es hora de levantarse, cariño -le dije, acariciando su mejilla suavemente.
-Mmmh, cinco minutos más -murmuró, en un intento de aferrarse al sueño, pero yo sonreí, sabiendo que su energía era contagiosa.
Nos levantamos, y pronto nos encontramos en la cocina, donde el aroma del café llenaba el aire. Mientras desayunábamos, el entusiasmo de Hyunjin era palpable.
-Cariño, en una semana nos vamos a Italia -anunció, su sonrisa iluminando su rostro.
Me quedé sorprendida, el corazón me dio un vuelco.
-¿De verdad? ¡Es genial! -exclamé, sintiendo cómo la emoción burbujeaba en mi interior.
-Lo sé, es algo que ambos hemos querido. Mi decisión está lista, y allá podremos vivir en paz -dijo, tomando un sorbo de su café antes de continuar-. No podemos seguir encerrados aquí, como ratas de laboratorio.
-Mmh, sí, parecemos eso, ¿verdad? -respondí bromeando de eso aunque sea algo super corto.
-Exacto. No podemos respirar por esos malditos periodistas que están afuera de casa-dijo mirándome preocupado y algo molesto en su voz sobre eso.
-Tienes razón pero el mundo va a saber que nos vamos a Italia, cariño.-dije diciendo que nos van a perseguir en todos lados.
Hyunjin se detuvo, su mirada se volvió seria.
-No, hay una salida más fácil, los guardias del edificio pueden distraer a los paparazzis y asi evitarlos que estén cerca una y otra vez-dijo con convicción.
-Eso suena como un plan. ¿Y después? ¿Tomaremos nuestro propio avión privado? -pregunté, sintiendo la adrenalina subir.
-Sí, llegaremos con el staff de Versace y mantendremos todo en silencio. He pedido que distraigan a mis fans, sobre todo a las sasaengs y a las fansites que siempre están al acecho -respondió, con una determinación que me llenó de confianza.
-Es una buena idea. Así, evitamos todo ese contacto por ahora.-dije con confianza.
-Exacto. Además, mandé a investigar a los involucrados en los rumores. Ese anónimo, alguien cercano a mí... tengo un detective que está trabajando en eso-dijo, su voz firme.
Mientras hablábamos, una sensación de alivio y emoción se apoderó de mí. La idea de dejar atrás el caos de Corea y comenzar una nueva vida en Milán se sentía liberadora. Era un nuevo comienzo, un lugar donde podríamos ser nosotros mismos sin el peso del juicio ajeno.
